Redacción. Evidentemente la frase no es mía, pertenece a Rudy Tomjanovich. El ex entrenador de los Rockets la hizo célebre al conseguir el segundo anillo consecutivo cuando nadie los daba por favoritos.
Misma situación se puso de manifiesto en Oakland cuando nadie daba por hecho, tras el baile de fichajes veraniego, un posible “repeat” de Curry y compañía. Está claro que esto no ha hecho más que empezar, pero este inicio de curso hace muy factible una temporada regular tan espectacular como la registrada el año anterior. De hecho, si ganan a los Wolves, batirán su mejor inicio de temporada de la historia con un 10-0, pero cuando por julio los Clippers, Cavs o Spurs firmaban y renovaban a los agentes libres más cotizados, en incluso ellos no renovaban plantilla sino que perdían jugadores como es el caso de David Lee, no importante en cuanto a estadística, pero si dentro del vestuario, las casas de apuestas bajaban la cuota de un nuevo anillo por parte de los jugadores de Kerr. Por cierto, si queréis apostar por los Warriors o algún otro equipo de la NBA, tenéis todas las apuestas deportivas en William Hill.
Este inicio no solo es el hecho de ganar, de momento, 9 partidos seguidos, sino la forma en la que se ha hecho. Si el año pasado ya estuvieron entre los mejores equipos de la liga tanto en ataque como en defensa, en estos nueve primeros juegos han conseguido ganar por más de 20 puntos a equipos de primer nivel como Houston o Memphis. Si algo voy a reseñar en esta racha inicial es el escandaloso nivel con el que ha empezado Stephen Curry promediando 32 puntos, 6 asistencias y 5 rebotes, más estadística que con la que acabó la temporada pasada.
También me ha sorprendido el buen hacer de Ezeli sustituyendo al lesionado Bogut, mucho más activo, y de Harrison Barnes, que con la búsqueda de un nuevo contrato, parece que ha empezado con una intensidad que no fue todo lo regular que debiera el año pasado. En conclusión diré, que aun no siendo mis máximos favoritos, los Warriors a este nivel no creo que se les pueda ganar en 4,5 ó 6 partidos. Mucho tendrán que sudar Popovich, Rivers o quien se encuentren con ellos para poder ganarles aunque sea en el séptimo y decisivo partido.