Mari Paz Díaz. De padres onubenses y con una gran vinculación con la provincia de Huelva, Ramón Arroyo es una cara cada vez más conocida en los medios de comunicación a nivel nacional porque su vida es todo un ejemplo de superación. Nacido en Bilbao, aunque residente en Madrid, Ramón ha estado este miércoles 11 de noviembre en Huelva para ofrecer la conferencia ‘Rendirse no es una opción’, un título muy sugerente para una cita organizada por la Asociación de Esclerosis Múltiples de Huelva, que tuvo lugar en el Hospital Infanta Elena.
Una charla que generó un enorme interés por conocer en persona a este amante de la provincia de Huelva de 43 años, que veranea todos los años en La Antilla y que tiene a toda su familia en esta tierra. Y es que la historia de Ramón no sólo es merecedora de ser conocida, sino que su caso puede servir de impulso para muchas personas que estén pasando un mal momento, especialmente a causa de alguna enfermedad grave.
La vida de Ramón transcurría hasta hace pocos años de forma totalmente normal. Casado y con dos hijos, su trabajo estaba en Madrid, donde ejercía como responsable de cuentas estratégicas en una multinacional. Un empleo muy activo con el que estaba continuamente viajando, especialmente a Asia, zona de la que era encargado.
Sin embargo, todo aquello se truncó cuando en el año 2004 le diagnosticaron Esclerosis Múltiple (EM) Recurrente Remitente, una enfermedad de la que reconoce que en aquel entonces sabía más bien poco. «Al principio, cuando me la diagnosticaron, me quedé impactado porque tenemos muy poca información. Así que los primeros dos o tres años le di la espalda a la enfermedad. No quería aceptar lo que me estaba pasando, una reacción muy habitual en estos casos», nos confiesa.
Así fue hasta que a finales de 2007 sufrió un brote muy fuerte. Entonces acababa de nacer su hijo mayor y llegó un momento en el que le daba miedo coger al bebé. Fue cuando tomó conciencia del problema y comenzó a cuidarse, a tomarse la vida de otra forma, a disfrutar de las pequeñas cosas y a hacer deporte. Tanto fue así que se convirtió en un deportista nato, ya que cada vez se encontraba mejor, hasta el punto de participar en carreras de 10 kilómetros, medias maratones y maratones. Actividades que compaginaba con pruebas de triatlón en diferentes distancias hasta llegar al IronMan, lo que alcanzó con éxito el pasado 6 de octubre de 2013 tras meses de esfuerzo.
Fue todo un reto y un logro para un enfermo de esclerosis múltiple, convirtiéndose en un ejemplo para muchas personas. Su cara, de hecho, se hizo en habitual en los medios de comunicación nacionales, pues quisieron hacerse eco de la gesta llevada a cabo por Ramón. ‘Informe Robinson’ de Cuatro o ‘El Hormiguero’ de Antena 3 han sido sólo algunos de los programas de máxima audiencia que difundieron su gesta.
Hay que tener en cuenta que un IronMan es una prueba de larga distancia que consiste en realizar 3.800 metros de natación en aguas abiertas, 180 kilómetros en bicicleta de carretera y concluir con una carrera a pie que cubra la distancia de la Maratón (42 Km 195 m). Esta disciplina está considerada como una de las pruebas más duras del mundo deportivo y en la actualidad sólo 4 personas afectadas de esclerosis múltiple han sido capaces de realizarla con éxito, entre las que se encuentra Ramón Arroyo.
Pero su apuesta por el deporte no sólo ha sido una actividad digna de admiración, sino que, además, se ha convertido en un pilar fundamental en su recuperación después de cada brote y le ha permitido incrementar su calidad de vida. Una idea que en un principio no aconsejaban ni médicos, ni psicoterapeutas o fisioterapeutas. A pesar de ello, Arroyo impulsó en 2012 una iniciativa deportiva solidaria denominada ‘IM4EM’, conjuntamente con la Federación Española para la Lucha contra Esclerosis Múltiple / Esclerosis Múltiple España (FELEM/EME), con el objetivo de sensibilizar a los afectados de esclerosis múltiple de la importancia de la actividad física y recaudar fondos para EME.
Su caso ha tenido tanta repercusión que Ramón suele ser invitado a dar conferencias para contar su experiencia, como un aliento para todos los enfermos de esclerosis múltiple, como ha sucedido ahora en el Hospital Infanta Elena de Huelva. Según nos comentaba, «no soy un profesional de estoy, pero sí suelen invitarme a charlas, sobre todo a raíz de mi participación en un IronMan. Y eso que con mi diagnóstico, al principio, no aconsejaban la práctica deportiva, pero ahora se ha demostrado todo lo contrario«.
En la actualidad, Ramón no se encuentra en su mejor momento físico, puesto que recientemente le han dado cuatro brotes seguidos muy fuertes, por lo que su objetivo ahora es recuperarse, dejando el deporte un poco más apartado. Aun así, «hay días que puedo nadar o coger la bici, pero ahora mismo estoy centrado en hacer mucha rehabilitación».
En su casa, Ramón Arroyo disfruta de sus dos hijos, teniendo una vida lo más normalizada posible. Nos cuenta que «me hubiera gustado tener un hijo más, pero hay que ser consciente que, a veces, yo soy un niño más. Mi mujer ha sido mi muleta en todo este proceso. Además, ella me conoció poco antes de que me diagnosticaran la enfermedad y es una persona muy fuerte. Es mi heroína. Luego, mis hijos lo ven todo como absolutamente normal, porque ellos vinculan la esclerosis con el hecho de que su papá hace deporte y le hacen entrevistas en la televisión, así que lo ven como algo muy chulo. Eso sí, cuando estoy malo, me cuidan mucho. Los niños son muy listos».
Son impresiones que ha dejado patente en su intervención en Huelva. Una provincia a la que se siente muy vinculado y de la que nos confiesa que lo que más le gusta es «la playa y el agua fría, porque sus coquinas, acedias y chocos los suelo comer mucho porque mis padres me lo llevan a Madrid».
Con todo, Ramón Arroyo afirma rotundamente que en la vida «hay que aceptar las cosas como vienen». Y, aunque no es muy dado a dar consejos, a todas las personas que se enfrenten a un caso similar al suyo les recomienda «que se informen bien. Para ello están las asociaciones de pacientes, con personas que han pasado antes por eso y que les pueden ayudar. Sobre todo porque al principio te sientes muy solo, muy abandonado. Hoy en día tenemos mucha información que a veces no es fácil de digerir, de ahí que lo mejor sea acudir a una asociación, como la que existe en Huelva».
La Esclerosis Múltiple es una enfermedad autoinmune, crónica, degenerativa e incurable que afecta a 1 por mil de la población joven adulta, lo que supone en España la segunda causa de incapacidad después de los accidentes de tráfico.
También llamada la enfermedad de las mil caras, produce tantas secuelas como afectados. En términos generales, sus síntomas son fatiga, trastornos visuales, problemas de equilibrio y coordinación, espasticidad, alteraciones de la sensibilidad, trastornos del habla, problemas de vejiga e intestinales, problemas de sexualidad e intimidad y trastornos cognitivos.
Así que por tu ejemplo, muchas gracias Ramón. Y mucha suerte.