S. D. Benjamín Naranjo, presidente del Recreativo de Huelva, se ha querido dirigir a los aficionados del club onubense a través de una carta abierta, en la que se hace un llamamiento a la reflexión, después de los acontecimientos vividos antes, durante y después del partido del domingo ante el UCAM Murcia y que, de todos modos, significó el primer triunfo albiazul en casa.
El presidente, en su carta al recreativismo, dice lo siguiente:
“En el partido contra el UCAM Murcia celebrado en la matinal del día 4 de octubre, en el estadio Nuevo Colombino, he escuchado cánticos y gritos de “Comas, vete ya”, “Comas, vende ya” y “Directiva, dimisión”. Aparte de otras lindezas que personas, enmascaradas entre el público, se atreven a emitir, ya que seguramente cara a cara no tendrían ese “valor”.
Hasta hace pocos años siempre había defendido que no había “malas personas” en el mundo , sino “personas interesadas”. Es decir, que a éstas les mueve algún interés personal y actúan en favor del mismo, no pretendiendo en ocasiones provocar daño a nadie. Aquellas otras, sin embargo, sí van buscando el daño, el mal a otros, probablemente intentando conseguir un beneficio personal.
En cuanto al requerimiento de “Directiva, dimisión”, voy a contestar en nombre propio: Si eso redunda en beneficio de la entidad, mi dimisión la tienen desde “ya”; deseando que entre los que la pedían se encuentre la persona que ocupe el puesto y lo haga con más acierto que yo y, sobre todo, con más dinero que yo para poder invertir en el Club.
Porque de eso se trata casi todo: ¡DE DINERO! Eso es lo que necesita la entidad, DINERO para poder afrontar el pago al personal, deportivo y no deportivo, a los proveedores, a los acreedores…
Desde hace dos meses que he llegado al cargo, y no hay un solo día que no me haya arrepentido, me ha sorprendido comprobar cómo llevando más de un año y medio sufriendo un desgarrador embargo de Hacienda se había podido hacer frente a los pagos, con retraso, sí, pero solventándolos. Cómo se había llegado al 31 de julio sin denuncias en la AFE, y para eso había que poner dinero. Luego, días mas tarde, se había afrontado el tema de los derechos federativos, superando también este escollo. Regularizar las nóminas de la primera plantilla hasta agosto, y se abonan las nóminas del personal no deportivo hasta junio. A las personas del Club que se les adeuda estos atrasos los que, como yo, hemos sufrido esta situación les comprendemos perfectamente (es muy duro pedir prestado, o simplemente pedir a familiares y amigos, sobre todo si recibes una negativa por respuesta, para poder afrontar tus obligaciones económicas con tu familia y otras cuestiones).
Antes de ocupar mi cargo actual, intuía quien ponía ese dinero o quien conseguía que lo pusieran. Ahora lo sé con plena seguridad, y no somos los consejeros, por supuesto yo no, ni el segundo accionista mayoritario, sino el representante del primer accionista mayoritario: Pablo Comas. Esto me lleva al otro cántico que escuché de las gradas, y que alguna persona de las personas que se han aproximado al palco me solicitaron que interviniera: ¡Comas, vende ya!… Bien, ¿PERO A QUIEN?
Llevo dos meses preguntando, pública y privadamente, si hay compradores, si hay alguien, alguna empresa, entidad o institución dispuesta a adquirir el paquete accionarial mayoritario. Hasta ahora sólo he recibido negativas o la “callada” por respuesta. Desde aquí lo solicito una vez más. Si hay alguien dispuesto a hacerlo, me ofrezco como interlocutor y mediador en las negociaciones.
La Directiva puede dimitir, yo ya he manifestado mi predisposición, ya le sustituirá otra y así sucesivamente, que la entidad seguirá subsistiendo; pero si se marcha el que pone el dinero, el que busca para que lo pongan, y NO hay un relevo inmediato, ¿podrá sobrevivir el Real Club Recreativo de Huelva?
A los que profieren esos cánticos y a los promotores de que se formen grupos que emitan esos cánticos, yo les rogaría que miraran menos su interés y egoísmo personal y defendieran los del Decano del Futbol Español”.