Redacción. La Hermandad de Nuestra Sra de los Clarines suscribió en el día de ayer un acuerdo con el restaurador natural de Isla Cristina, Daniel Sánchez Vázquez, para proceder a la remodelación y restauración del retablo de la Ermita de Clarines y del camarín que alberga la imagen.
Según explican desde la Hermandad, «era necesario acometer dichas obras ante el estado de deterioro que presenta el retablo, tanto en el dorado como en los elementos ornamentales del mismo». Por otra parte, el camarín de la Virgen también será objeto de remodelación, «con idea reformar y reforzar las paredes y evitar las grietas que año tras año aparecen en el mismo, fruto de los frecuentes movimientos de terreno», explican, ya que la ermita de Clarines se encuentra situada en un terreno arcilloso y de gran actividad sísmica -el último terremoto fue en 1968, destruyó el camarín completamente-. Las obras se iniciarán de inmediato y está previsto que culminen en Enero de 2016.
Por otra parte, la Hermandad de Nuestra Señora de Clarines se ha unido a la iniciativa impulsada por Cáritas y Manos Unidas Beas, y apoyada por la parroquia, para acoger a una familia de refugiados en las próximas semanas.
al y como explican a través de un comunicado, en efecto, «haciéndose eco del llamamiento del Papa Francisco, las distintas asociaciones de la Parroquia de Beas, lideradas por Cáritas y Manos Unidas, se han comprometido a acoger a una familia de refugiados, invitando a los particulares y a las asociaciones y hermandades a unirse a esta iniciativa con una aportación mensual, mientras la familia permanezca en el municipio». Ya cuentan con un piso cedido por un particular durante uno o dos años para acogerlos, y con una gran cantidad de donantes particulares que han comprometido una cuota mensual para hacer frente a los gastos que se puedan derivar de dicha acogida.
La Hermandad de Clarines, como no puede ser menos, también realizará una aportación mensual para contribuir a dicha propuesta solidaria, ya que no puede descuidar la ayuda a los más necesitados, a pesar de los gastos a los que va a tener que hacer frente con motivo de las obras en la ermita.
