S. D. “Estoy muy feliz por el gran éxito logrado en Bakú”. Era Pablo Abián, el mejor jugador español de bádminton que, con su medalla de oro al cuello tras ganar al danés Holst, se mostró exultante por el logro conseguido en esos I Juegos Europeos que se han celebrado en la capital de Azerbayán.
Abián tuvo palabras de agradecimientos por el apoyo recibido durante este Campeonato: “Quiero dedicar este triunfo a todos los que me han apoyado durante el torneo y también a los lo hacen día a día, en especial a mi familia, a mis amigos y a mi club”, indicó.
Sobre el torneo en sí, el aragonés comentó que “este era un campeonato muy importante” y, por ello, “tenía mucha ilusión” por conseguir “un buen resultado”. En esta misma línea, Abián valoró la importancia del triunfo después de “haber sido tan competitivo desde el principio en un grupo tan difícil, pasar de ronda y luego seguir partido a partido, remontando marcadores desfavorables y reponiéndome a las adversidades”.
En cuanto a la final, el bilbilitano dijo que empezó el primer set “muy activo y sabiendo controlar el juego, sin dar opciones a mi rival”, aunque admitió que el danés en el segundo set “cambió su juego y estuvo por delante casi hasta el final”. Pese a ello, “siempre creí en que era posible la remontada y lo conseguí finalmente”, aseguró el medallista español.