Sergio Borrero. Pocas cofradías en nuestra ciudad pueden presumir de tener la vida de hermandad que se respira por la Orden. La Hermandad del Perdón ha sabido asentarse en su parroquia y en su barrio con su llegada al Lunes Santo tras los años de travesía en el desierto en los que procesionaba en la madrugá. El secreto para crecer de una manera tan increíble se basa en el trabajo por parte de los hermanos y su junta de gobierno, encabezada por Carlos Castañeda, que el próximo viernes 26 de junio volverá a presentarse a hermano mayor con el sueño del paso de palio para Nuestra Señora de los Dolores rondando en las cabezas de todos los hermanos del Perdón. Un cabildo de elecciones que tendrá lugar entre las 18.00 y las 21:.00 horas.
– Se terminan cuatro años de mandato que han supuesto un verdadero paso adelante para la Hermandad del Perdón. ¿Qué valoración hace de su gestión?
– La verdad es que una valoración muy positiva, contento y orgulloso sobre todo de la respuesta de los hermanos y del barrio que era nuestro primer objetivo. Nos marcamos hacernos presentes en el barrio, ya que es verdad que en el inicio de la Hermandad, y al haber estado en la madrugá, nos condicionó a estar quizás algo de espaldas al barrio. Cuando entró esta junta de gobierno, y gracias al cambio al Lunes Santo, nos propusimos trabajar de cara al barrio, por y para ellos, y hacernos presentes en todos y cada uno de los hogares. En ese sentido estamos muy contentos. La vida de la Hermandad también se ha fomentado y hemos tenido mucho apoyo por parte de los hermanos que con el tiempo han sentido la Hermandad como suya y, sin ellos, sin su trabajo, sin su esfuerzo y sin su día a día, el crecimiento de la Hermandad sería impensable.
– El eslogan ‘Un sueño, una hermandad, un barrio. Creciendo juntos’ ha articulado estos cuatro años. ¿Se ha cumplido ese sueño que planteabais?
– Sí, bueno, se está cumpliendo. Yo creo que es muy difícil que un sueño tan ambicioso se pueda cumplir en tan poco tiempo y, sobre todo, de la manera que queremos que se cumpla. Empezamos con el lema de “crecemos juntos”, entendiendo que no podemos hacer secciones independientes en la Hermandad, que no podemos trabajar como si no formara parte de la parroquia, que no la podemos entender sin su barrio y que no podemos entenderla sin el resto de hermandades. Crecer juntos significaba eso, establecer relaciones con todas y cada una de las personas, entidades, etc. con las que se pudiera trabajar y seguir progresando. A partir de ahí y con motivo del 25 aniversario de la llegada Nuestra Señora de los Dolores y la respuesta que obtuvimos surgió esa segunda parte de “un sueño, una hermandad, un barrio”. A raíz de eso seguimos trabajando y ese mensaje que hemos tenido estos cuatro años se va a mantener los próximos cuatro.
– Dice en su carta de presentación a los hermanos que es momento de pararse y reflexionar sobre el futuro de la Hermandad, ¿cómo ve Carlos Castañeda el futuro de la Hermandad del Perdón?
– Pues el futuro que veo es el que los hermanos quieran. Siempre digo que la misión de un hermano mayor no es confeccionar una hermandad a su gusto, sino al gusto del mayor número de hermanos posibles, por eso es misión del hermano mayor conocer cuáles son las inquietudes de los hermanos. Sí es verdad que muchas veces lo que se pensó en un momento no es lo más adecuado para la Hermandad, pero creo que escuchando a los hermanos hay que configurar una hermandad populosa, del barrio de la Orden, con todas las connotaciones que tiene ser de barrio y ser de un barrio de gente de pueblo con lo que eso conlleva, gente amable, gente abierta, gente trabajadora y luchadora… Una hermandad del Lunes Santo condicionada por nuestro recorrido. Si es verdad que en los orígenes ha ido pegando un poco de tumbos debido a las muchas inquietudes que hemos tenido pero también a las dificultades para hacerlo. Hemos vivido el día a día, incorporando muchos cambios y creo que no dando los pasos más acertados de cara a un futuro muy a largo plazo. A lo mejor nos teníamos que haber sentado ya hace tiempo y mirar a largo plazo y pienso que ahora es el momento porque no podemos iniciar el proyecto de un palio sin tener la configuración del misterio que los hermanos quieran. Sobre todo de cara a un futuro, un misterio que cuando Nuestra señora de los Dolores procesione bajo palio no se te quede descuadrado y en mi opinión, no tener que adquirir una nueva titular mariana con todo lo que conlleva eso. Hay que asentar las bases para que la Hermandad tenga un futuro a largo plazo sabiendo qué es lo que quiere y a donde nos queremos dirigir.
– Al hilo de esto, propone en su proyecto una reforma para agrandar el paso del Cristo del Perdón y configurar un nuevo misterio, ¿existe alguna idea en mente en la Hermandad?
– Entre los hermanos se mueven muchas ideas. Cuando llegue el momento se le propondrá a todos los hermanos cuál es la configuración que entendemos reúne el sentir de muchos hermanos que nos han venido a transmitir sus inquietudes y que nosotros hemos sido capaces de canalizar. Se le dará forma y se establecerán los pasos adecuados para que en el menor tiempo posible no suponga un cambio muy brusco y duradero en cuanto a su ejecución, sino que una vez que se decida y nos pongamos manos a la obra se realice en 1 o 2 años como mucho. En cuanto al paso vamos a hacer una nueva parihuela más grande que pensamos que ayudará también a nuestro andar en la calle. También ampliaremos la canastilla que a la vista está que para un misterio con tres imágenes es demasiado estrecha, todo ello manteniendo nuestro estilo.
– La extraordinaria de la Virgen de los Dolores del pasado año supuso el espaldarazo definitivo a esa unión con el barrio de la Orden, ¿sigue habiendo ganas de un palio en el barrio?
– Si, el barrio al que nos debemos y creo que también la sociedad lo está esperando. En un futuro no muy lejano la Hermandad se tiene que plantear la adquisición del palio porque ya el cortejo lo demande y el número de hermanos nos permita embarcarnos. ¿En base a qué? Yo siempre digo que 1000 hermanos y un cortejo de 400 nazarenos. Creo que son las cifras que nos pueden permitir económicamente el proyecto sin tener que hipotecar a la hermandad nuevamente como hemos estado años atrás. Yo considero que sería viable y con el trabajo que hemos realizado anteriormente y siguiendo esa forma de trabajar.
– Entonces se podría decir que será en este mandato cuando se empiece a realizar el paso de palio…
– Creo que si, al menos la primera piedra de ese proyecto. La parihuela actual del paso de cristo tras la reforma que queremos realizar en él pasará a ser la futura parihuela del paso de palio.
– De su junta actual repiten prácticamente la mitad de miembros, háblenos del grupo humano que lo acompañan en esta candidatura.
– Yo de ellos no me puedo quejar. Ni del anterior ni del actual. Del anterior grupo yo nada más que tengo palabras de agradecimiento. Ha sido un grupo humano súper implicado, un grupo que con nuestros altos y bajos hemos ido todos a una. Yo creo que se han conseguido muchas cosas que en un principio podría parecer una locura. Yo siempre digo a la gente que están aquí para proponer ideas y nosotros para intentar llevarlas a cabo. Es verdad que nosotros hayamos hecho muchas más cosas con el corazón y a base de esfuerzo y trabajo que con los medios que tiene la Hermandad. Pensar en lo que se consiguió ese 15 de septiembre con la salida extraordinaria de la virgen, todo lo que se hizo en nuestro barrio con la mayoría de calles engalanadas, todos los motivos decorativos… todo eso salió del trabajo de todos los miembros de la junta de gobierno y de todos los que vinieron a colaborar. En una junta de gobierno uno tiene que saber que durante cuatro años su vida es una forma de vivir la hermandad y eso la gente lo entendió bastante bien desde el principio. Los que entrarán en la junta de gobierno nueva pues ya saben a lo que vienen, yo no vengo a ofrecer nada diferente a como hemos trabajado estos cuatro años atrás.
– Aparte del apartado patrimonial del proyecto, ¿cuáles serán sus principales líneas?
– Las líneas van a ser las mismas que hasta ahora. Implicación en la parroquia, en el barrio y con nuestros hermanos. Yo creo que cuando los hermanos quieren venir a trabajar por su hermandad después los proyectos surgen. A más gente que venga más proyectos podremos hacer. Buscando esa colaboración es como hemos conseguido la cantidad de grupos que tenemos actualmente. Hay que seguir fomentando las actividades con el grupo joven, que los pequeños le contagien su ilusión a los mayores. También hemos intentado que el grupo de diputados se sintiera participe el resto del año, ellos tienen que conocer a los hermanos y nuestra idiosincrasia y transmitir en la calle lo que es el día a día de la Hermandad. Seguir haciendo que estos grupos, como también los costaleros, se sientan implicados aquí, nuestra obligación es formarlos e involucrarlos. Otro pilar básico es la formación, seguiremos con nuestros grupos de catequesis de adultos con la parroquia, queremos crear un grupo de catequesis para los niños de la hermandad y también de confirmación, seguir en la línea que hemos tenido con la formación un cuerpo de acólitos y monaguillos. Paralelamente, seguir creciendo también en cuanto a la formación cofrade.
– Para terminar, ¿le gustaría transmitir algún mensaje a los hermanos de su hermandad?
– Nada pues decirle que vengan el viernes y nos muestren su apoyo, algo que es importante. Aunque haya sólo una candidatura, es necesario recibir ese apoyo de un buen número de hermanos y no tener que ir a una segunda vuelta por no ser suficiente el quórum. Y sobretodo que no se olviden que la hermandad es suya, que la junta de gobierno lo único que hace es gestionar los bienes de los hermanos y que ellos son los que se deben preocupar que se haga adecuadamente. La hermandad va a seguir abierta para todos para que vengan en cualquier momento a exponer lo que quieran.