Redacción. La ciudad de Niebla cumple un año más con los cultos en honor de un Santo iliplense, el patrón Walabonso, martirizado en tierras de Córdoba el 7 de junio del 851, junto a su hermana María, también Santa neblí.
La encargada de organizar los actos anuales en su honor es la junta de gobierno de la Ilustre Hermandad de la Santísima Virgen del Pino y de los Santos Mártires Walabonso y María, un grupo joven y ahora renovado, que cuenta con muchas ganas de trabajar por mantener la arraigada tradición en la localidad, y que preside Manuel Vizcaíno Barba.
El pasado miércoles, 3 de junio, la imagen del mártir se trasladó desde su ermita en los arrabales hasta el templo parroquial Santa María de la Granada presidiendo el altar mayor.
El viernes 5 y el sábado 6, a las 20:30 se ha programado el solemne triduo, mientras el domingo 7 de junio, festividad del Santo, tendrá lugar a las 12:00 horas la Función Principal en su honor oficiada por el párroco Marcelino Ahadji y cantada por el coro de Madres de la propia parroquia. Ya por la noche, a las 21:00 horas concretamente, la imagen de San Walabonso recorre las calles de la amurallada localidad a hombros de sus paisanos, cumpliendo con la vieja tradición.
El momento que más intensamente se vive es la salida del templo y también a la llegada al monumento de la Puerta del Buey, ya en extramuros, donde se quema una vistosa colección de fuegos artificiales entre el río Tinto y la también rojiza muralla neblí.
Historia
San Walabonso mártir fue un cristiano mozárabe de Elepla condenado a muerte por su fe bajo los reinados de Abderramán II y Mohamed I en el Emirato de Córdoba.
María y Walabonso eran hijos de matrimonio mixto entre un cristiano y una musulmana posteriormente convertida. La prohibición de estos matrimonios mixtos provoca la marcha de estos iliplenses a la serranía de Córdoba y se formaron en la religión cristiana, de hecho María ingresa en el monasterio de Cuteclara mientras que Walabonso lo hace en el de San Félix para posteriormente estudiar teología en la escuela del abad Frugelo en Códboba. La formación del hoy mártir le permitió alcanzar la dignidad de diácono, llegando a ejercer en el monasterio de Cuteclara.
Las fiestas en su honor datan del año 1.624, según acuerdo del Cabildo de Niebla, como hace constar el Libro de Actas Capitulares.