P. G. Colorín colorado, esta tortura se ha acabado… O puede que haya empezado. Ya se verá. El Recreativo de Huelva, después de perder por 2-0 en El Sadar ante el Club Atlético Osasuna, ha dicho adiós a la Segunda División A y la temporada que viene -ojalá- militará en Segunda B.
El partido, en líneas generales, fue el reflejo de lo que ha sido el Decano durante buena parte de la competición: un equipo endeble en las dos áreas. Aunque el resultado de 2-0 al descanso fue excesivo a tenor de lo visto sobre El Sadar, todo se puede explicar perfectamente cuando en el campo está un equipo como el Recre, que concede tanto en defensa y necesita Dios y ayuda para anotar.
El Recre acudió a su cita, a su final, con el Osasuna diezmado por las ausencias por lesión de Caye Quintana y Antonio Domínguez, con sendas lesiones musculares. El primero, seguro, y el segundo muy probablemente, apuntaban a titulares en un partido en el que el error, omisión y concesión se penaba mucho. Y más al Recre que tenía que ganar sí, o sí, o también, para seguir alimentando opciones matemáticas de permanencia.
Esas bajas, más la ya sabida de Córcoles por sanción, obligaron al técnico Jose Dominguez a modificar el equipo titular. Aparecieron Diego Jiménez, Jesús Vázquez y Antonio Núñez, al que utilizó como falso 9. Y fue el madrileño quien tuvo las mejores opciones del Recre en un primer tiempo -más una anterior de Menosse con 0-0-, del que sacó más rédito el cuadro local por su mayor acierto en el remate de las faltas laterales. Porque los dos dispusieron de hasta tres lanzamientos de ese índole, llevando la mejor parte el Osasuna que hizo dos goles y estrelló un balón en el palo… por contra el Recre se topó con su propia ineficacia a la hora de culminar esas acciones, pésimamente defendidas también por el equipo rojillo.
Como no quien quiso la cosa, el Recre se fue al descanso con un 2-0 en contra que le mandaba de manera inexorable a Segunda B… salvo milagro en la continuación.
No lo hubo. Es más, los segundos 45 minutos fueron un calvario, una agonía para un equipo albiazul romo, sin llegada, a merced de las contras del Osasuna que, dicho sea de paso, tampoco estuvo nada sobrado. Un par de incursiones de Antonio Núñez y dos disparos tan lejanos como inocuos de Montoro fueron el argumento ofensivo de un Recre que siempre estuvo más cerca de recibir un tercer gol en las acciones al contragolpe del cuadro local, con Nino como estilete.
Pero tampoco necesitó hacer más leña de un árbol que estaba caido y talado desde hace muchas jornadas, y que sólo un arreón de orgullo con dos victorias ante dos equipos que tampoco opusieron excesiva resistencia alargó la agonía.
Punto final a 17 años en Segunda A, en el mismo campo y casi, casi a la misma hora que aquel 4 de junio de 2000, El Sadar. Claro que aquello al final tuvo un final feliz con un ascenso administrativo, lo de ahora quien sabe si es el certificado de defunción de una entidad con más 125 años de historia.
OSASUNA: Asier Riesgo; Miguel Flaño, David García, Vujadinovic; Raoul Loé, Oier, Sisi, Roberto Torres (Hervías, 79′); Álex Berenguer (Kodro, desc.) y Nino (Echaide, 87′).
RECREATIVO: Dani Sotres; Víctor Díaz, Menosse, Juanan, Diego Jiménez (Rubén Mesa, desc.); Jesús Vázquez, Dimas; Pedro Ríos, Manu Molina (Álvaro Antón, 57′), Montoro; y Antonio Núñez (Braulio, 68′).
Árbitro: Sagués Oscoz (colegio vasco). Amonestó a Javier Flaño (38′) y Oier (58′), por el Osasuna; y a Menosse (44′), Víctor Díaz (53′) y Dimas (93′), por el Recreativo.
Goles: 1-0 (14′) Vujadinovic remata de cabeza en el segundo palo tras una falta lateral botada por Roberto Torres. 2-0 (43′) David García, de potente disparo a quemarropa, algo escorado, tras otra falta lateral lanzada por Roberto Torres
Incidencias: Partido correspondiente a la 41ª jornada en Segunda División jugado en el estadio de El Sadar, al que asistieron 17.720 espectadores.