S. D. Cuando aún no se han apagado los rescoldos del triunfo del CB Conquero en el Campeonato de Andalucía Junior Femenino de baloncesto, las miradas ya se ponen en la siguiente cita, el Nacional en Gudalajara. Salvi Quintero, responsable de la cantera del club, ha sido la cabeza visible del cuerpo técnico en este reciente Andaluz que se ha vivido en Huelva, y que se ha saldado con un oro más que merecido para las onubenses y la clasificación para el Campeonato de España.
– Grandísimo campeonato, y final en la que ha habido que remontar porque Maristas lo ha puesto complicado.
-Tanto la semifinal como la final han sido un calco. Los equipos rivales juegan contra el anfitrión, que queramos o no hemos ido demostrando que éramos el equipo a batir, y en cada partido ha habido un detalle diferente. En el primero dos faltas de Rosa Garrido hicieron que cambiáramos la rotación y en la final (con Andrea) ha sido igual. Cuando tenemos ese problema hay que aguantar los cuartos con jugadoras menos habituales, que han mantenido el marcador. Luego, igual que en las semifinales, hemos roto en el tercer periodo y luego ha sido cosa de defender y aguantar. Es una satisfacción ganar en casa.
– Y tampoco es tan fácil, porque la presión de chicas tan jóvenes hay que saber sobrellevarla.
– Sí, sobre todo la ansiedad. Yo se lo he dicho, que esto primero es un tema de juego y después de emociones; el juego lo tenemos controlado, las emociones es lo que hay que controlar y siempre en los tiempos muertos se lo recordamos: Ante un error, olvídalo y defiende, ante un fallo defensivo, ataca. Esto es más una cuestión psicológica y han demostrado que son buenas jugadoras y que emocionalmente se controlan. Eso es muy importante para el juego.
– Confiabas en este grupo, pero ¿para llegar tan alto?
– Es un grupo muy peculiar porque hay mezcla de cadetes, júniors, Nacional… Cuando yo por mi trabajo no puedo venir a entrenar, está Hugo, Marta, Nino. Que yo esté de pie hoy es porque tocaba júnior. En la siguiente semana serán las mismas jugadoras en el Nacional y las llevará Hugo, a la siguiente la Cadete. Es decir, es un grupo muy peculiar pero contentísimo, y sobre confiar en ellas, siempre tienes que confiar porque al final esto depende de las jugadoras.
– Y ahora, ¿qué papel crees que puede hacer el equipo en Guadalajara?
– Vamos a competir y a disfrutar, pero sobre todo a competir, porque las niñas siguen un plan formativo; se están formando, están compitiendo, están ganando, y allí vamos a ver qué podemos hacer. No tengo ni idea del nivel que tendrá el Nacional, pero evidentemente hemos hecho un gran Campeonato y ser campeón de Andalucía te obliga a poder competir.
– Como coordinador de cantera, las conoces bien a todas. ¿Hay materia prima para el primer equipo?
– Desde infantil para arriba hay niñas que ya están destacando. A todas las tratamos exactamente igual, pero quieras o no a partir de cadete hay ya una especialización, una elite buscando que lleguen al primer equipo. Eso se está coordinando y haciendo bien.