S. D. Carolina Marín no podrá ver, de momento, alcanzado uno de sus sueños, acceder al número 1 del ránking mundial, al caer en las semifinales del Yonex Sunrise India Open (Open de la India), después de perder con Ratchanok Intanon en un dramático, equilibrado y agónico partido en tres sets (19-21, 23-21 y 20-22), que duró 1 hora y 24 minutos. La tailandesa sigue siendo la ‘bestia negra’ de Carolina, a quien ha ganado en las cuatro ocasiones que se ha enfrentado.
La onubense, que se ha estrenado en Nueva Delhi como número 4 del mundo, tenía en sus manos alcanzar el número 1 si llegaba a la final, y la local Nehwal no pasaba de cuartos, o bien si ganaba el torneo y su rival no llegaba a la final. Carolina no ha podido cumplir con lo que se demandaba, aunque no por ello se puede dejar de calificar como soberbia su actuación en este torneo, coronada con un portentoso partido ante Intanon, resuelto podía decirse en la ‘foto-finish’, dada la igualdad reinante. De momento su participación en la India le ha valido para subir al segundo peldaño. Ahí es nada.
En la pista número 1 del Complejo Deportivo Siri Fort de la capital de la India estaban, nada más y nada menos, que las dos últimas campeonas del mundo. Intanon, que lo fue en Guangzhou (China) en 2013, y Carolina, el año pasado en Copenhague (Dinamarca). Y las dos venciendo en la final a la misma contrincante, la china Li Xuerui.
Fue un duelo duro, competido, con tintes de dramas y con momentos para las dos. El primer set definió en parte el encuentro. Tras un inicio igualado, con empates sucesivos en el marcador, salió a relucir la mejor versión de Carolina quien, intratable, fue sumando puntos y ventaja, hasta llegar a un 17-9 que hacía presagiar un triunfo por la vía rápida en la manga. Pero no, Intanon reaccionó de forma admirable, aprovechando un ligero bajón físico de la onubense para, primero igualar a 17, y luego colocarse por delante gracias a un parcial de 10-0. Aunque Carolina quiso revertir la situación, el set fue para la tailandesa por 21-19.
En el segundo y en el tercero, la igualdad fue la nota predominante. A pesar que Carolina, como ocurrió en el inicio, comenzó mejor la segunda manga, con parciales favorables de 5-1, 8-3 y 10-6. Pero quedaba un mundo por delante. Con las dos jugadoras a tope, se llegó a un final de auténtico infarto. Intanon cobró dos puntos de renta (19-17) que parecieron definitivos. Tampoco. Carolina reaccionó y se colocó 20-19 a volante de set. Replicó la tailandesa que volteó la situación y disfrutó, con 21-20 de un punto de partido. Y otra vez Carolina se rehizo para dominar finalmente la manga por 23-21.
En el tercer set, aunque marcado por la igualdad nuevamente, Intanon estuvo más tiempo por delante. Carolina salvo un 7-6 a su favor fue a remolque de la tailandesa, que llegó a disponer con 20-18 de dos volantes de partido. La onubense se resistió a entregar el partido e igualó a 20, pero de nuevo Intanon en el punto de partido que tuvo con 21-20 aprovechó la tesitura para ganar la manga y el dramático encuentro.
No podrá ser, por tanto, el acceso de Carolina Marín al primer puesto del ránking mundial. Ni tampoco derrotar por primera vez Intanon. Son ‘deberes’ que tiene por delante la onubense, pero a tenor de lo visto en el torneo y en esta semifinal, los tiene a su alcance. Su frase al final del partido: “Tendré más oportunidades de ser número 1 del mundo” lo dice todo. Cuestión de tiempo.