S. D. Carolina Marín ha derribado dos nuevos muros en su carrera deportiva, que le hacen ser aún más grande: ganar un Superseries Premier y vencer, por fin, a Saina Nehwal. Se empiezan a acabar los retos para una Carolina Marín que se ha proclamado campeona del 103ª edición del Yonex All England Open Championships, el torneo más importante del mundo, el ‘Wimbledon’ del mundo del bádminton.
Marín ha sido capaz de remontar un complicado inicio y terminar imponente para derrotar a su bestia negra hasta la fecha, la india Saina Nehwal, por 16-21, 21-14 y 21-7. De esta manera, Marín completa la triple corona de Europeo, Mundial y All England en menos de un año para auparse a la cuarta plaza en la próxima actualización del ránking mundial.
La gran final se presentaba con una Carolina Marín en franca progresión, demostrando aún mejores prestaciones que en los torneos disputados en este 2015 donde fue finalista. Enfrente estaba Saina Nehwal, la única jugadora que había sido capaz de parar a Carolina Marín en sus tres enfrentamientos previos y que parecía tener tomada la medida a la española.
En el primer set, Nehwal consiguió poner el partido de su lado con una defensa al límite que le permitió contraatacar de forma muy peligrosa. Ese juego bloqueaba, a su vez, el plan de juego de la española que veía como además la defensa felina de Nehwal minimizaba los ataques de una Marín que se vio superada durante el primer set. Sólo una leve reacción final, donde se pudo ver un atisbo del camino a seguir hacia el triunfo, puso algo de emoción al parcial que terminó con el 16-21 para la india.
En el inicio del segundo set Nehwal volvió a llevar las riendas del partido bloqueando el intento de reacción de Marín al final del primer set. Con una gran eficiencia en el golpeo, la india se aprovechó de los errores no forzados de la española para abrir pequeñas rentas: 1-6 ó 5-9. A partir de ese momento llegó el cambio de dominio en el juego que terminaría dando el triunfo a Marín. Mucho más agresiva en la pista, consiguiendo meter presión en red a su rival a la más mínima oportunidad, Marín empezó a convertir en estériles las defensas de una Nehwal que no encontraba ya oportunidad de contraatacar y se veía sobrepasada por el juego de la española.
Además, el nivel físico de Nehwal empezaba a bajar y esto ayudaba a que empezaran a aparecer en su juego los errores no forzadas que hasta el momento no había cometido. Plena de energía en todas sus acciones, Marín conseguía llevarse el set por 21-14 y forzar una tercera manga en la que la dinámica ganadora la presentaba como clara favorita.
El tercer set fue un claro ejemplo de lo que es la campeona del mundo. A sabiendas de que iba en progresión y que Nehwal no mantenía el ritmo y la intensidad en el juego, Marín salió dispuesta a no darla la más mínima oportunidad y llevarse el título. Desde el primer punto Marín se marchó en el marcador. El nivel de exigencia en el ritmo del partido, sumado a la agilidad de sus desplazamientos a red y la potencia de sus remates para cerrar cada punto dieron a entender a Nehwal que ya no había partido, la española era tremendamente superior. Marín terminó arrasando a su rival y cerrando el set, el partido y el campeonato con un mayúsculo 21-7.
Este Yonex All England Open Championships es el primer torneo Superseries Premier -los Grand Slams del bádminton- que Marín suma a su historial. Tras el Europeo y el Mundial pasados, Marín y su equipo tenían claro que había que ratificar los éxitos en el Mundial oficioso. No han dejado lugar a dudas, Carolina Marín es la mejor jugadora del mundo.
