P. G. La famosa ‘ley de Murphy’ está haciendo estragos en el Recre, que cayó por 1-0 en Valladolid con un gol en el tiempo añadido en el primer tiempo y cuando estaba en inferioridad por lesión de Juanan. Un error u omisión, como ocurrió el día del Mirandés, o un simple avatar en un partido de fútbol, como lo ocurrido en el José Zorrilla al filo del descanso, están penalizando de manera muy severa las buenas intenciones de un Decano al que, eso sí, no le llega con pelear y fajarse con el rival para parar una sangría que le ha llevado a alejarse más de lo deseado de la promoción de ascenso y, ahí es nada, acercarse mucho a las posiciones de descenso.
Claro que de la misma forma que el Recre no anduvo afortunado en ese tramo final, tampoco el equipo onubense tuvo capacidad de reacción para evitar lo inevitable, que era una nueva derrota y acumular ya ocho jornadas sin ganar.
Con Menosse y Dimas como esperadas caras nuevas en el once, se vio un equipo aseado en ese primer tiempo -lo del segundo ya fue otra historia-, con buenas intenciones y, en la pelea a los puntos, cobrar algo de ventaja. Pero todo empezó a torcerse con la lesión de Córcoles y tuvo su colofón con la jugada que cerró el primer tiempo y que fue clave en el desenlace del choque. La mentada ‘ley de Murphy’.
Para aquel que no sepa de que va el asunto, decir que esa ley atiende al razonamiento siguiente: “Lo que puede salir mal, sale mal”. Supuso un guantazo en la cara fría de los jugadores albiazules momentos antes de encaminarse a los vestuarios en el intervalo del partido. Ese guantazo figurado lo dio Mojica, ya en el tiempo añadido, al adelantar a su equipo en el marcador, cuando el Decano estaba con una defensa con alfileres después de la obligada sustitución de Diego Jiménez por Córcoles, y con Juanan en la banda a punto de marcharse, también lesionado. El Valladolid se aprovechó de los trenes baratos que ofrece el fútbol y pilló al Recre a contrapié y con un jugador menos, que en realidad eran dos, pues Joselu estaba en el césped, después de recibir un golpe en una jugada anterior.
Nunca, nunca, nunca debió irse el Recre perdiendo al descanso. Jamás. Porque estuvo mejor sobre el terreno de juego que su oponente, al que maniató y presionó hasta llevarle a fallar muchísimo, de lo que se hizo eco el propio estadio que pitó a sus hombres en algunas fases de ese periodo. Más aún, si establecemos un cómputo de llegadas al área rival, más o menos con peligro, fue el Recre quien acumuló más. Joselu, en una buena triangulación con Álvaro Ántón y Montoro (12′), el propio Antón con un disparo lejano alto y, sobre todo, un remate de Montoro en el área, que marró por poco y facilitó la tarea de Javi Varas, fueron los argumentos ofensivos de un Recre que no dio ninguna concesión a un rival, cuyo único peligro fue una colada de Bergdich, que remató en semifallo Jeffren. Muy poca cosa.
Lo malo es que el fútbol está azotando y de qué manera al Recre, que vio como Corcoles se tenía que ir antes de tiempo por lesión. Un pinchazo en la parte de atrás de su pierna fue el motivo, lo que llevó a Diego Jiménez, su relevo, a la banda derecha, donde estaba cumpliendo… hasta que en el minuto fatídico de añadido, con Juanan fuera y el Recre en inferioridad, el Valladolid sacó petróleo de la situación.
Lo del segundo tiempo fue otro cantar. Durante todo ese periodo estuvo siempre más cerca el 2-0, y quien sabe si más, que el posible empate del Recre. Con la lesión de Juanan, Oltra dio entrada a Braulio, recomponiendo el equipo, que empezó a jugar con una defensa formada por Antonio Núñez, Menosse, Diego Jiménez y Víctor Díaz. Joselu se fue a una banda, en tanto que la referencia arriba, a priori, era Braulio.
Con la misma tranquilidad que se puede decir que el Recre no mereció irse al descanso perdiendo, se tiene que comentar que en el segundo periodo fue un alma en pena. Nadie le discutirá que peleó, peleó y peleó, estuvo siempre arriba como los muñequitos de Duracell, pero fue completamente inocuo, escaso de juego y romo arriba.
Lo mejor que le pudo pasar, además su pelea al menos le tiene que servir de algo, fue que el Valladolid no amplió su renta, y eso que Bergdich, Mojica y Óscar, tuvieron claras oportunidades para haber hecho mucho daño. Mejor que la cosa acabara así, que al menos deja al Decano el consuelo de decir, y no es falso, que dentro de su gris partido, perdió por culpa de una acción de mala fortuna. Dicho queda.
REAL VALLADOLID: Javi Varas; Chica, Chus Herrero, Samuel, Peña; André Leao, Timor; Bergdich (Guille Andrés, 71′), Óscar (Álvaro Rubio, 84′), Mojica; Jeffren (Óscar Díaz, 78′).
RECREATIVO: Dani Sotres, Córcoles (Diego Jiménez, 32′), Menosse, Juanan (Braulio, desc.), Víctor Díaz; Dimas (Manu Molina, 81′), Jesús Vázquez; Antonio Núñez, Montoro, Álvaro Antón; Joselu.
Árbitro: Medié Jiménez (colegio catalán). Mostró la cartulina amarilla a Jeffren (6′), Timor (67′) y Chica (84′), por el Real Valladolid; y a Córcoles (30′), Dimas (44′) y Montoro (58′), por el Recre.
Gol: 1-0 (46′) Mojica aprovecha para marcar un balón de André Leao al segundo palo.
Incidencias: Partido correspondiente a la 16ª jornada en Segunda División disputado en el estadio José Zorrilla, al que asistieron 8.861 espectadores.
