Redacción. La Guardia Civil ha procedido a la imputación de un padre y de su hijo, menor de edad, como presuntos autores de un delito contra la salud pública. Así mismo se ha procedido a la incautación de 600 gramos de marihuana.
A este resultado se ha llegado a través de una investigación por un delito de robo que fue cometido en una vivienda de Lucena del Puerto hace unos días. En aquella ocasión los agentes sorprendieron a tres individuos que intentaban robar en una casa que se encontraba en obras en el momento de perpetrar el delito. Durante la inspección ocular que se llevó a cabo como consecuencia del intento de robo, los agentes hallaron indicios sobre la utilización de la vivienda como lugar para el cultivo y secado de cannavis sativa, ya que hallaron cinco maceteros grandes con troncos de esta planta ya desprovistos de sus hojas.
Esto propició que por parte de los agentes del cuartel de la Guardia Civil de Lucena del Puerto, se diera inicio a una investigación tendente a verificar las sospechas. Para ello se pusieron en marcha servicios de vigilancia discreta sobre la casa, los que permitieron sorprender al propietario sacando del edificio una gran bolsa de basura.
Interceptado por los agentes, éstos descubrieron que en el interior de la bolsa se hallaban 18 botes de cristal llenos de marihuana, que alcanzó un peso de 600 gramos. El detenido, manifestó a los guardias civiles que lo que pretendía era deshacerse de la droga, la cual era propiedad de su hijo, quien había aprovechado que la vivienda estaba en obras, para tenerla allí escondida. Precisamente la droga parace ser que fuera el objeto del robo por el que fueron detenidos los tres hombres vecinos de La Palma del Condado hace unos días.
La Guardia Civil ha instruido diligencias que han sido remitidas al Juzgado de Instrucción de Guardia de La Palma del Condado.
Auxilian a un hombre inconsciente en un cortijo de Villarrasa
Una patrulla de la Guardia Civil auxilió ayer a un hombre que se había escondido en el interior de una finca y que presentaba un alarmante estado de ansiedad.
Los hechos ocurrieron durante la tarde del día de ayer, 3 de noviembre, cuando una patrulla de seguridad ciudadana perteneciente al Cuartel de la Guardia Civil de Villarrasa, fue informada por un Guarda de Campo, sobre la posible presencia de un extraño en el interior del cortijo de la finca ‘Dehesa Espina‘. Con las debidas precauciones los agentes se personaron en el citado lugar y procedieron a inspeccionarlo.
Al llegar lo primero que observaron fue el cuerpo de un hombre tendido en el suelo y aparentemente inconsciente. Este hombre se hallaba tras una verja y a pesar de que los agentes trataron de hablar con él no ofreció respuesta alguna. Este hecho motivó que los guardias civiles tuvieran que fracturar la cadena y el candado de la verja, después de haber saltado, para facilitar la llegada de los servicios médicos. Mientras los agentes trataron de reanimarlo primero y calmarlo, pues tras recobrar la conciencia empezó a presentar convulsiones y un gran estado de ansiedad. Más calmado, gracias a la acción de los agentes, fue atendido por los servicios médicos, quienes diagnosticaron además del cuadro nervioso, una lesión en la pierna.
Los guardias civiles averiguaron que esta persona, vecina de Bollullos del Condado y de 40 años de edad, había discutido el día anterior con su familia, abandonando a continuación su domicilio. Al cortijo había llegado con la intención de pasar allí la noche, momento en que se lesionó la pierna al tratar de saltar la verga.
