Redacción. Las dos prestigiosas marcas locales se han dado la mano para ofrecer a los visitantes y a todos los admiradores de la obra cumbre de Juan Ramón, un estuche compuesto por dos de los productos más representativos de cuantos se producen en la ciudad del poeta, como son el tradicional vino de naranja y las quesadillas de almendra, dos delicias gastronómicas elaboradas artesanalmente y con ingredientes de máxima calidad, que además presentan un extraordinario maridaje en su degustación, capaz de satisfacer los paladares más exigentes.
El acto de presentación de este estuche conmemorativo del Año Platero se inició con la bienvenida a los asistentes a cargo del director de la Fundación Zenobia Juan Ramón Jiménez, Antonio Ramírez Almanza, quien analizó con la cercanía y profundidad habituales en sus intervenciones, algunos aspectos gastronómicos presentes en la elegía andaluza, así como datos y curiosidades sobre los productos y comidas que más agradaban al Premio Nobel.
Posteriormente se realizó la presentación del estuche por parte de los responsables de las dos marcas moguereñas involucradas en este suculento proyecto, Antonio Sáenz Azcárate por las Bodegas del Diezmo Nuevo, conocidas popularmente como Bodegas Sáenz, y Juan Acebedo Núñez en representación de Confitería La Victoria.
Estas dos prestigiosas empresas moguereñas son las únicas que mantienen su actividad ininterrumpidamente desde la época en la que Juan Ramón vivió en la ciudad del Tinto y escribió las deliciosas páginas de ‘Platero y yo’, y constituyen sin duda la mejor tarjeta de presentación de la gastronomía moguereña.
Tras las intervenciones de Sáenz y Acebedo, tomó la palabra el presidente de la Diputación Provincial, Ignacio Caraballo, quien destacó la gran tradición vinícola y pastelera de la comarca del Condado, y felicitó a los dos empresarios moguereños por esta iniciativa novedosa y sin duda atractiva para todo tipo de públicos.
La concejala de Cultura, Lourdes Garrido, cerró el turno de palabra insistiendo en la importante trayectoria de estas dos grandes marcas moguereñas que han sabido actualizar su oferta a los tiempos modernos, sin perder ni un ápice del carácter artesano de sus procesos de elaboración, y cuidando siempre al máximo la calidad de sus ingredientes. Garrido agradeció tanto a Bodegas Sáenz como a La Victoria «su decidida apuesta por el Año Platero con este magnífico estuche que condensa dos de los mejores sabores que puede ofrecer nuestro pueblo».
El acto, que se celebró en los corrales de la casa museo, junto a la antigua cuadra de Platero, concluyó con una degustación de los deliciosos productos que componen el estuche y la actuación del joven valor de la guitarra local, Álvaro Mora, que demostró ese gran dominio de las seis cuerdas que le ha convertido en una de las grandes promesas de la guitarra en nuestra provincia.
