La Sierra se prepara para vivir la Semana Santa

Redacción. Nuestra Sierra poco a poco prepara todo su esplendor llenando sus campos de frondosa naturaleza. Los campos extienden sus alfombras verdes de ligera hierba, donde tímidamente aparecen las primeras flores, donde los tonos blancos, amarillos y rojos confeccionan los exclusivos tapices naturales únicos en cualquier rincón de nuestro Parque Natural.

Éste es el primer paso, donde todos los municipios se unen en los preparativos para recibir una de las festividades más esperada por muchos serranos. Es el periodo vacacional donde aquellos que salieron de los pueblos donde nacieron en busca de una experiencia mejor, vuelven para reencontrarse con la familia, los amigos, los aromas y la gastronomía que rodea a la Semana Santa serrana. Esta misma experiencia la van a vivir todas aquellos curiosos que han decidido conocer un lugar mágico y lleno de encanto.

Nuestros hogares planifican con todo detalle los menús de Cuaresma, testigos del tiempo de nuestros antepasados, donde el bacalao va a ser la estrella serrana de la gastronomía popular en esta tracción, compitiendo por unos días con nuestro mejor manjar de aromas, el jamón ibérico de bellota.

Los dulces enmelados serán el postre de toda mesa, donde la canela de las torrijas de pan de hogaza empapada en leche y rebozada con los huevos batidos de las gallinas de corral, vuelven para endulzarnos nuestros paladares. Preparativos que se realizan en los hogares serranos, con ímpetu, realzando las tradiciones y compartiendo una época del año llena se sensaciones difíciles de describir.

Aunque existen peculiaridades que resaltan esta festividad de una manera más curiosa. Éste es el caso del municipio de Cumbres Mayores donde los dulces, recetas, y convivencia se entremezclan con las ideas, bocetos y retales para la fabricación de los monigotes, que serán los protagonistas de los Judas. 

Los baúles y arcas se abren de nuevo un año más, para buscar entre los recuerdos los ropajes y complementos que lucirán los desafortunados muñecos. Las manos expertas de los mayores enseñan a los más pequeños de la casa en la fabricación de la base del Judas y por último se viste con mimo dándole sentido a la amargama de paja, papel y trapos.

En el amanecer del Domingo de Resurrección, las calles de Cumbres Mayores se afanan concienzudamente en lucir entre sus fachadas encaladas, las representaciones de los Judas de este año. Lo viejo está a punto de desaparecer, para dar paso rápido a lo nuevo. Los más pequeños son los encargados de llevar a cabo este ritual, como si fueran soldados medievales, armados con palos a símil de lanzas destruyendo todo recuerdo.

La Sierra de Huelva sorprende, encandila y enamora en cualquier época del año, pero vivir la Semana Santa Serrana con sus aromas, tradiciones y majestuosas procesiones, invita a descubrir la vida  rural dentro de un exclusivo Parque Natural.