El CB Conquero se sustenta en Mosby para ganar en Burgos y amarrar la continuidad en la Liga Femenina

Las jugadoras del equipo onubense, felices en el vestuario tras ganar el partido. / Foto: www.cbconquero.es.
Las jugadoras del equipo onubense, felices en el vestuario tras ganar el partido. / Foto: www.cbconquero.es.
Las jugadoras del equipo onubense, felices en el vestuario tras ganar el partido. / Foto: www.cbconquero.es.
Las jugadoras del equipo onubense, felices en el vestuario tras ganar el partido. / Foto: www.cbconquero.es.

S. D. Tyrone Bernice Mosby. Nombre propio en el CB Conquero. Ya lo fue en la temporada pasada, aunque se marchara de Huelva con el sinsabor de no haber podido certificar una permanencia que luego en los despachos se firmaría. Es posible que la jugadora nacida en Avon Park tuviera en lo más profundo el resquemor por no haber podido coronar su trabajo con el objetivo marcado en el inicio de la temporada. Puede que todo eso le llevara de nuevo a Huelva para acabar con ese trabajo que, puede, solo puede, le pareciera inconcluso.

Meses después Mosby -26 puntos y 25 de valoración- se tomó cumplida venganza con aportaciones importantes en los partidos que disputó, y que fue estelar en el primer momento que el CB Conquero tuvo en sus manos cerrar de manera definitiva la permanencia. Lo hizo el equipo onubense liderada por Mosby en la cancha de uno de los gallitos de la Liga Femenina, el Beroil Ciudad de Burgos, que echaba cuentas fundadas en disputar las eliminatorias por el título. Ahí es nada,

El CB Conquero, que aterrizó en Burgos con la moral arriba tras superar a otro gallo, el Gran Canaria, en el partido precedente, sumó la victoria definitiva (50-58), con Mosby como estrella rutilante, eso sí, bien secundada por el trabajo completo, concienzudo y eficaz de este equipo Lemmings, que brilla cuando traslada a la cancha eso de ‘todos para uno, y uno para todos’.

Parar, templar y mandar. Cánones del toreo. El CB Conquero los hizo suyos en El Plantío donde había mucho toro que lidiar. Las onubenses, a sabiendas de lo que se jugaba el equipo local, plantearon el partido desde la defensa. Bien pertrechadas y dejando un margen escaso a las locales en ataque, provocaron que las anotaciones rivales fueran con cuenta-gotas. Para más inri, una atinada Bröring puso las primeras ventajas en favor de las onubenses, que aguantaron el arreón burgalés (10-10, tras un parcial de 4-0), para cerrar el primer cuarto con las cartas credenciales sobre la mesa: 10-14.



Si para el Beroil Ciudad de Burgos fue complicado el primer cuarto, lo del segundo fue un campo de minas. Gabriel Carrasco, entrenador del equipo onubense, entendió que este partido se ganaba desde la defensa, y el trabajo empezó a dar mejores réditos conforme avanzaron los minutos. Permitiendo poco o nada a las burgalesas y manteniendo un tono más que aceptable en ataque -primeros atisbos de Mosby-, la renta en el electrónico fue progresivamente más amplia en favor del CB Conquero (13-23, a falta de seis minutos). Y de ahí al final de este cuarto, al que se llegó con un 23-32 para la esperanza.

El Beroil Ciudad de Burgos quemó sus naves en el arranque del segundo tiempo. Más con el corazón que con la cabeza logró acercarse en el marcador, pero se encontró con la respuesta más contundente que podía imaginar: Mosby. La chica de Florida se echó el equipo a su espalda -como en muchas ocasiones en la campaña precedente- y, bien secundada por Lucía Pablos y por Nina Bogicevic, lograron de nuevo ampliar el marcador a once puntos (29-40), que al término del tercer cuarto fue de ocho: 38-46.

El cuarto definitivo comenzó de la mejor manera posible para las onubenses, es decir volviendo a poner tierra de por medio y alcanzar una más que aceptable renta de 12 puntos (38-50). Puede que el CB Conquero, tal y como marchaba el partido, cometiera el único desliz posible: pensar que todo estaba hecho. Error (pronunciése incluso como lo hacen en el anuncio de los seguros). Del que se aprovechó el cuadro burgalés para ir, poco a poco, limando la desventaja y colocarse con un inquietante 45-50.

Puede que a Mosby se le pasara por su mente la película de la temporada pasada, en la que a pesar de disfrutar de una sólida ventaja en la tabla, al final el equipo se vio obligado a jugarse un ‘pierde-paga’ final con el rival menos indicado. Con los nefastos resultados consabidos. No estaba dispuesta a dar pie a que se volviera a repetir tamaña odisea y, volviendo a los símiles taurinos, de nuevo apareció al quite para culminar su faena con seis puntos consecutivos que ya sí que sí, fueron definitivos. Que el partido acabara con más o menos renta en favor de las de Huelva era cuestión baladí (50-58 para las estadísticas). Lo importante era que el CB Conquero tenía en el bolsillo el partido y, por ende, la confirmación de que en este figurado Gran Hermano que pudiera ser la Liga Femenina, el nominado para abandonarla no sería él. Llevaba la firma indeleble de Mosby.

BEROIL CIUDAD DE BURGOS, 50 (10, 13, 15, 12): Arrojo (8), Vilaró (10), Bahí (7), Berta Chumillas (8), Elonu (10) -cinco inicial-; Calvelo (3), Argüello (2), España (2).

CB CONQUERO, 58 (14, 18, 14, 12): Lucía Pablos (6), Aya Traoré (3), Tanya Bröring (6), Ana Alonso, Bernice Mosby (26) -cinco inicial-; Amaya Gastaminza, Nina Bogicevic (10), Ivona Bogoje (2), Claudia Pop (5).

Árbitros: Palomo Cañas y Martín-Villanueva Tena. Sin eliminadas.

Incidencias: Partido correspondiente a la 20ª jornada de la Liga Femenina de baloncesto disputado en el pabellón El Plantío ante unos 200 espectadores.


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