Mari Paz Díaz. Amante del deporte y la vida sana, siendo especialmente apasionado del voleibol, un deporte al que juega y del que es árbitro a nivel andaluz, Francisco Barbosa Marín es un joven onubense de 23 años que estudia Informática en la Universidad de Huelva. Unos estudios que ha aprovechado para solicitar una beca Erasmus este curso académico 2013/14, que le ha permitido marcharse a la Universidad de Salerno, en el sur de Italia.
En esta ciudad italiana lleva viviendo desde hace seis meses, una experiencia que está aprovechando para aprender italiano en una etapa de su vida inolvidable.
Unas vivencias que está compartiendo con su otra gran pasión: la música, ya que en la actualidad está inmerso en un nuevo proyecto con varios compañeros, como es la creación de Xponent Records, el primer sello discográfico de música electrónica en Huelva, además de colaborar cada vez que tiene la oportunidad con Radio Occidente.
Todo ello nos lo cuenta desde Salerno, en una entrevista en la que conocemos cómo está siendo su vida en Italia, teniendo en cuenta que es la primera vez que vive fuera de España.
-Fran, ¿por qué te animaste a irte fuera?
-En primer lugar, por vivir una nueva aventura, saber si me adaptaría a otro país, a sus costumbres y a su gente, pero también para cambiar de aires y conocer nuevos lugares.
-¿Has tenido algún problema con los idiomas?
-Llegué a Italia con un nivel de inglés medio. Pero, con respecto al italiano, vine con un pequeño curso que realicé unos meses antes.
-¿Cuál es tu balance de la experiencia?
-De momento muy bien. Me he adaptado muy rápido a la ciudad y, en cuanto a la universidad, es algo duro al principio por el tema del idioma, pero poco a poco nos vamos enterando mejor de todo.
En el piso vivo con dos españoles más, un italiano y un iraní, una buena mezcla de culturas y de idiomas bajo un mismo techo. Y lo mejor de todo es viajar y conocer nuevos rincones. ¡Italia es bellísima!
-Y Salerno, ¿cómo es esta ciudad?
-Salerno se encuentra en la región de ‘La Campania’, siendo capital de provincia. Es una ciudad de 140.580 habitantes, que en muchas cosas se asemeja a Huelva. Es pequeñita, por lo que puedes ir a todos lados andando. Además, Salerno mira al mar Tirreno, por lo que podemos disfrutar de grandes paseos por el ‘LungoMare‘. Sin embargo, a pesar de ser costera, Salerno capital no destaca por sus playas, pero sí por su gran puerto comercial y turístico. De hecho, podemos ver continuamente cruceros atracar en su puerto.
Gobernando la ciudad, desde lo alto de un monte, se encuentra ‘Il Castello di Arechi’. Desde lo más alto del castillo podemos tener una visión panorámica de la ciudad de Salerno. Sin duda alguna, uno de los rincones más bonitos de Salerno y parada obligada para todo aquel que la visite. La universidad se encuentra a unos 20 kms de Salerno, en las localidades de Fisciano y Baronissi. Cuenta con diez facultades y acoge a más de 40.000 estudiantes, por lo que es una de las universidades más importantes y referentes del sur de Italia.
Tenemos a escasos 50 kilómetros a Nápoles, una de las ciudades más grandes de Italia y más recomendadas para visitar.
De las cosas que más me han sorprendido de esta ciudad, es que la Navidad dura 3 meses. Sí, han leído bien, desde principios de noviembre hasta finales de enero, Salerno se viste de gala e ilumina sus calles con numerosos detalles navideños. Se conoce aquí como ‘Luci d’Artista’ y son numerosos los visitantes de toda Italia que vienen a contemplar tal maravilla.
–Y sus habitantes, ¿cómo son?
-Pues, lo mejor que tiene Salerno es su gente. Son bastante abiertos. No tienen problemas en ayudarte y echarte una mano siempre que lo necesitas. Es gente muy acogedora y alegre.
Viven con gran pasión el ‘Calcio’, a pesar de que la ‘Salernitana’,
que es el equipo de fútbol de la ciudad, se encuentra jugando en la Serie C, equivalente con la Segunda B española. Lo viven con gran pasión y muestran una gran apoyo hacia el equipo granota, luciendo los colores y el escudo en numerosos comercios de la ciudad.
A destacar, se puede decir que son bastante alocados al volante. En Salerno, y en general en toda Italia, la velocidad y las prisas están a la orden del día. Más de una vez han frenado a dos palmos de mí. Por suerte, estoy aquí para contarlo.
-¿Cómo es vivir en el sur de Italia?
-La vida en Italia se asemeja mucho a la española, con la excepción de que la vida aquí es algo más cara. En la alimentación, la pasta y las pizzas son los reyes. No hay rincón en Italia donde no se venda o se vea a gente comer pizzas. Y lo mejor, a buen precio. Pero algo que recomiendo a todo el mundo es a probar la Mozzarella di Bufala, que es un queso hecho a base de la leche de búfalo de agua.
A la hora de desplazarse, tenemos un gran número de autobuses y trenes que conectan con todas las localidades de alrededor.
Estos medios de transporte son bastante utilizados por los italianos, ya que el desplazamiento en coche se hace caro. La gasolina es más cara y hay un gran número de peajes. A destacar el autobús con destino a la Universidad, en el que se va algo apretado todas las mañanas. Las salidas nocturnas, nosotros como estudiantes Erasmus, tenemos algunos descuentos, pero para los italianos se hace algo caro salir. La entrada a cualquier fiesta es de mínimo 15-20€ y las copas en su interior rondan los 10€, por lo que salir una noche y ¡darlo todo! les resulta una broma bien cara.
–¿Cuál es la imagen que tienen los italianos de España?
-Nos tienen mucho cariño y, en especial, a las chicas españolas, que arrasan allá por donde van. La imagen de España en el exterior se asemeja mucho con la italiana. Ambos países no están pasando por sus mejores momentos socio-económicos, siendo la corrupción, el desempleo y la crisis noticia día tras día.
-¿Qué piensa tu familia de tu aventura?
-Ellos están encantados, se han quitado un peso de encima…, es broma. Se alegran bastante de que me haya embarcado en esta aventura y me desean todo lo mejor desde España.
-¿Y tus amigos?
-Mis amigos creían que no duraría ni tres semanas fuera de casa. Se equivocaron. Lo mejor para ellos es que saben que tienen casa en Italia por si alguno quiere venir a hacerme alguna visita.
-¿Cuáles son tus planes futuros?
-Tal y como está la situación hoy en día, lo de hacer planes de futuro lo dejamos algo aparcado. De momento, vivo el día a día y pensando en aprovechar las oportunidades que vayan viniendo.
-¿Te has marcado algún objetivo?
-Uno de mis objetivos principales es aprobar todas las asignaturas que me traigo. Y, como no, aprender italiano, ya que me parece un idioma bastante bello.
-¿Para cuándo tienes previsto volver a Huelva?
-En teoría volvería para finales de julio, pero intentaré buscar algún trabajo aquí y alargarlo hasta finales de verano.
-¿Qué es lo que más echas de menos de Huelva?
-Mi familia, mi novia, mis amigos… La verdad es que no hay día que no se les eche de menos. Menos mal que disponemos de tecnología suficiente para estar continuamente en contacto con ellos.
Y mi Recre. Me estoy dando cuenta que se sufre más en la distancia que en el campo. Debo contaros que me he traído la equipación de los lunares. Me miran algo raro por la calle, no sé por qué… Si es bien bonita, ¿verdad?
-Después de tu experiencia, ¿recomiendas a la gente salir fuera, al extranjero?
-Por supuesto. No solo por la experiencia, sino por los valores que uno adquiere. Porque desde la distancia valoras mucho más lo que tienes y lo que dejas en casa. Aprendes a ser un buscavidas, a ser más independiente, a esforzarte más y a adaptarte mejor a las diferentes costumbres y culturas. En resumen, te ayuda a ser más fuerte moralmente y a cultivarte mejor como persona adquiriendo nuevas experiencias.
-Para terminar, ¿cómo te gustaría despedirte de los onubenses?
-No sabéis cómo se echa de menos el escuchar un… ¡¡ILLOOOO!! Y el clima, las gambas, el jamón… A los onubenses sólo decirles que animen mucho al Decano, que este año es el nuestro y que desde la distancia también apoyamos a nuestro Recre.
