Miguel Ángel Velasco. Está visto que los nuevos empresarios son ya una realidad a tener en cuenta. Su fuerza, dinamismo, visión de futuro e ilusión son bagajes más que suficientes para demostrar en esta ciudad que nada aquí está perdido, que tenemos una urbe viva que si hasta ahora ha estado un tanto adormecida serán ellos los que tiren del carro de la apertura empresarial, de los nuevos proyectos, de un cambio de aires modernista acorde con los tiempos, no ya de los que vivimos, sino de los que se aproximan. Mirando al futuro sin descaro, pero con fuerza.
Afrontando los inconvenientes, aceptándolos, pues antes de emprender semejante y ardua aventura han empezado desde debajo de la misma, conociendo sus fortunas y desgracias. Una juventud empresarial, en suma, los tan cacareados actualmente jóvenes emprendedores, que yo pienso que son jóvenes pero viejos profesionales de los que emprenden por la autonomía y profesionalidad de sus ideas.
Alrededor de las 18.00 horas del pasado 6 de marzo, un público juvenil se arremolinaba sobre el primer tramo de la calle Palacios de Huelva. La fachada de la nueva tienda de moda Brutal se encontraba engalanada de globos de colores vistosos varios. En la puerta, Sandra, una dependienta joven y bonita, atendía a los recién llegados, junto a la compañera de Jaime Gil, el dueño de tan ideal proyecto, y la hija de ambos, con una sonrisa y suma amabilidad familiar. En el interior, compradores e invitados se confundían en un ambiente festivo y, a la vez, laboral. Se trabajaba y se celebraba la apertura del nuevo local de Brutal.
Una tienda deportiva de calle que cuenta ya con 19 años en nuestra tierra y que se ha sabido reconvertir, adaptar a las nuevas fisonomías y necesidades del mercado actual, convirtiendo este su antepenúltimo proyecto en todo un templo del aire casual sport que la juventud de nuestros días pasea por las diferentes ciudades del continente.
El local es todo un compendio bien estructurado de cómo se debe forjar una tienda de este tipo para hacerla compatible con la filosofía que intenta transmitir. Aire desenfadado, composiciones mobiliarias sueltas y arbitrarias, expositores abiertos enmarcados de fotografías publicitarias de frescas imágenes, con infinitas zapatillas de las marcas New Balance y similares colgando en estudiada partitura… todo casual pero sin que nada resulte casual. Todo está estudiado al milímetro, nada se deja a la improvisación. Hay seriedad y mucha profesionalidad en este negocio.
Tanto en los productos que ofrece como en el modo de hacerlo. Se encuentra el visitante relajado en sus estancias, nadie perturba su curiosidad o la observación de los artículos. Igual te puedes encontrar de charlas con unos amigos, que estar sentado en una de sus butacas de estilo vintage mientras tu acompañante empieza o termina su compra. Y es por ello, aprovechando este feliz ambiente, que su propietario, Jaime Gil, tiene previstas múltiples ideas para un futuro inmediato. Desde charlas literarias, exposiciones fotográficas o de cuadros a actuaciones musicales. Sin dejar de lado la presentación en vivo, con modelos, de los nuevos diseños de temporada.
Y hablando de actuaciones, hay que destacar la que se nos preparó para el día de la apertura. Estaba el ambiente ya en su cénit, los jugadores de la primera plantilla de fútbol del Real Club Recreativo de Huelva hicieron su aparición, algunos acompañados de sus respectivas parejas. Álvaro Antón, Córcoles, Jesús Vázquez o Valle. Todos clientes de la firma y fieles portadores de las marcas que allí se expenden hicieron las delicias y cubrieron las expectativas del público infantil que los esperaba a las puertas del negocio, entre peticiones de firmas de autógrafos y fotografías con sus ídolos. También apareció en esos momentos, Fernando Pérez Lozano, en calidad de secretario general de la Federación Onubense de Empresarios, que departió con Gil augurándole suerte y parabienes. Entonces aparecieron los componentes de los grupos onubenses Rust River y Visión Sonora. La mezcla era total y maravillosa. El mundo del fútbol, del arte, de la música, jóvenes y bellas modelos, empresarios, público vario, todos en amigable unión y compañía. Y comenzaron a tocar, cada uno por su parte, sus actuales éxitos que tienen lanzados en el mercado discográfico.
Guitarras rítmicas y voces de sones rockeras y abluesadas, con aires del sur, anegaron el espacio silenciando las conversaciones, deleitando a los presentes con temas fuertes y letras actuales, vivas, con contenido, pero íntimas y grandes y veteranos sonidos acústicos en sus interpretaciones.
“En estos momentos me encuentro muy tranquilo. En una nube, pero sereno y feliz. Feliz por este proyecto nuevo que acabamos de empezar, feliz por la aceptación que está teniendo por parte del público, feliz por verme rodeado de tanta gente que me quiere y que siento como míos. Feliz, en definitiva, de poder contribuir a engrandecer esta ciudad, mi ciudad, de poder darle aires nuevos y bríos renovados y sobre todo, feliz porque tengo ilusión en el futuro. Esto no se acaba aquí. Esto empieza aquí. Quiero y deseo dar a Huelva y a sus gentes muchas más alegrías con nuevos y variados proyectos, crear puestos de trabajos…”.
Son un mar fuerte pero tranquilo las palabras de Jaime Gil. Se le nota emocionado y reposado a la vez: “Claro que me ha sorprendido la afluencia del público, nunca deja de sorprenderme después de 19 años en este negocio. Pero creo que en esta ocasión ha rebasado totalmente nuestras expectativas y ello me da fuerza para intentar seguir progresando, para mantener la ilusión de vender y que Huelva nos tenga como referencia en este mundo de la moda textil”.
Suerte, Jaime Gil. Suerte por tener a tantos y buenos amigos como los que te acompañaron este 6 de marzo. De tu gremio y fuera de él. Suerte para seguir dándonos todo lo que hasta ahora nos has dado. Suerte porque simplemente, te la mereces.