Redacción. La Virgen del Rocío ha amanecido en la mañana del 21 de diciembre vestida de Navidad con un traje de seda color buganvilla en tono rojizo con brocado dorado, plisado en el centro a mano y contorno en la sobremanga, y con el rostrillo a juego, dando como resultado una preciosa estampa en la aldea del Rocío que anuncia el nacimiento del niño Jesús.
Se trata de un modelo estrenado por la Reina de las Marismas en el año 2009, y con el que las camaristas almonteñas la han vestido en la madrugada del viernes al sábado, desponjándola de la indumentaria celeste con el que la hemos visto con motivo de la celebración de la Inmaculada.
El Niño Jesús, está vestido con un traje confeccionado en tisú de plata bordado en oro y espejuelos datados de mediados del siglo XVIII.
Las flores de la Virgen del Rocío son delpheinium en tonos rosas, buganvilla y blanco, junto a los capullos de jazmín, romero y varas de romuscus offimalis, conformando en su totalidad un magnífico colorido a juego con el traje de la Patrona de Almonte y que recuerda a los colores de la Navidad.
De este modo, y como no podía ser de otra forma, la Virgen del Rocío ya se encuentra preparada para celebrar el nacimiento de su Pastorcito Divino, una imagen digna de ver y que ilumina las miradas de todos los devotos que se han acercado hasta el momento a apreciar su belleza, esperando que sean cada vez más los que transiten por su Ermita en estos días de fiestas.