Dime cómo te llamas y te diré de dónde eres

Mari Paz Díaz. La tradición marca en muchos puntos de la provincia de Huelva el nombre de sus habitantes, que optan por el santoral de su localidad natal a la hora de poner el nombre a su hijo o hija. Por este motivo, en muchas ocasiones, nuestro nombre puede ser tan característico que nos sitúa de forma inmediata en el lugar geográfico del que procedemos. 

Porque todos conocemos y solemos participar en las fiestas patronales de nuestra localidad y los municipios vecinos. Y es que, en los países de cultura hispana, las fiestas patronales cuentan con una enorme tradición, días solemnes que se celebran anualmente en la fecha de su patrón o patrona.

Pero, además, el santoral que marca a cada municipio también nos ofrece muchos datos de sus ciudadanos. Porque, aunque en los últimos años se han ido imponiendo nuevos nombres de diferentes procedencias, sigue siendo fácil identificar el lugar de nacimiento de muchos onubenses por su nombre.

Es cierto que hay casos tan universales que suelen romper esa regla, como sucede con la Virgen del Rocío, patrona de Almonte, puesto que es una advocación fácil encontrar, tanto dentro como fuera de la provincia de Huelva.

Pero, salvo ejemplos tan excepcionales como éste, lo normal es que si conocemos a alguien que se llama Bella sea de Lepe, Cinta, de Huelva y Montemayor o Monte, de Moguer. Y lo mismo sucede con Juan Bautista, en San Juan del Puerto, Vicente, en Lucena del Puerto, Jorge, en Palos o Benito en El Cerro, en el caso de los hombres.

En definitiva, no cabe duda de que el santoral sigue marcando en muchos casos el nombre de los habitantes de cada municipio. Una costumbre que se sustenta en el hecho de que, tanto en la Iglesia católica como en la ortodoxa, se considera que el patrón o patrona es el protector de sus habitantes, por lo que son considerados su intercesores, de ahí que sean elegidos de forma habitual por los padres para sus hijos.

Así sucede en Huelva capital, con Nuestra Señora de la Cinta y San Sebastián, como patrón y patrona, teniendo el 8 de septiembre y el 20 de enero como días grandes, respectivamente. Sin embargo, en la capital onubense son más habituales las mujeres llamadas Cinta, que los hombres llamados Sebastián, aunque sí es un nombre que denominó a un barrio, el Barrio de San Sebastián de Huelva.

Lo mismo sucede con el resto de municipios de la provincia de Huelva, por los que nos gustaría hacer un somero recorrido a través de sus diferentes comarcas.

Comenzamos en Alájar, donde es muy conocida su Romería en honor a su patrona la Reina de los Ángeles, por lo que el nombre de Ángeles es habitual no sólo en la localidad, sino en otros municipios serranos, que cuentan con hermandades filiales en esta fiesta que tiene su día grande el 8 de septiembre.

Otros nombres habituales en la Sierra son Eulalia, referida a Santa Eulalia de Mérida, patrona de Almonaster la Real; Remedios en Arroyomolinos de León; Prado, en Higuera de la Sierra; Carmen, patrona de Galaroza; Prado, en Higuera de la Sierra -con San Sebastián Mártir de patrón-; la Virgen de la Fuente, de Fuenteheridos, donde es curioso que su patrón sea Espíritu Santo; o la Virgen de la Tórtola en Hinojales, así como Ntra. Sra. de los Ángeles en Linares y Ntra. Sra. de Gracia en Los Marines.

Más conocidos son los patrones masculinos de municipios como Aracena, cuyo patrón es San Blas y su patrona, la Virgen del Mayor Dolor; San Sebastián en Cabezas Rubias; San Isidro Labrador en Rosal de la Frontera, Divino Salvador en Valdelarco; o en Aroche, cuyo patrón es San Mamés y la Virgen de los Dolores, su patrona.

Otros nombres habituales en la Sierra al ajustarse al santoral de la zona son Inmaculada Concepción en Corteconcepción, Piedad en Cortegana; Remedios, en Cortelazor la Real; Flores, en Encinasola; Cala, en Cala, Marina, en Cañaveral de León; Dolores, en Castaño del Robledo; Ana, en Santa Ana; Virtudes, en La Nava; Puerto en Zufre; la Virgen de la Cabeza, en Puerto Moral o Miguel Arcángel y Ntra Sra de los Remedios, en Jabugo.

En cuanto a las Cumbres, nos encontramos en Cumbres de En Medio, a San Pedro; en Cumbres de San Bartolomé, Ntra Sra de Aliseda; y en Cumbres Mayores, Ntra Sra del Amparo o Esperanza.

En la zona del Andévalo podemos hablar de casos tan conocidos como Piedras Albas en El Almendro y Villanueva de los Castillejos y Caridad en La Puebla de Guzmán, si bien es más popular la Virgen de la Peña, o Benito por San Benito Abad en El Cerro, con la Virgen de Albricias como patrona. Por su parte, Silvestre y Rosario son los patrones de San Silvestre de Guzmán; Ntra. Sra. de la Rábida de Sanlúcar de Guadiana; y Blanca, de Villablanca. 

Entre los municipios andevaleños comparten patrón a San Juan Bautista, Berrocal y Alosno, cuya patrona es la Virgen de Gracia. Nombres curiosos también son la Virgen de la Coronada, en Calañas; Santa Catalina de Alejandría en El Granado; Magdalena en Paymogo; Granada en La Granada de Riotinto; o Vicente en Zalamea la Real.

Santa Bárbara, patrona de los mineros, es, al mismo tiempo, la patrona de diversos  puntos de la Cuenca Minera, como Tharsis, Santa Bárbara de Casas o Minas de Herrerías, aunque no sucede así en Minas de Riotinto, cuya patrona es la Virgen del Rosario, o Nerva, con San Bartolomé y Santa Ana, al igual que El Campillo, con  Ntra Sra de la Granada, Campofrío, con Santiago Apóstol o Villanueva de las Cruces con San Sebastián Mártir y Ntra Sra de la Cruz.

En el Área Metropolitana de Huelva tenemos ejemplos como el de Remedios en Aljaraque, ya que la patrona del municipio aljaraqueño es la Virgen de los Remedios y, su patrón, San Sebastián Mártir, mientras que en Corrales, su patrón es San José Obrero y su patrona, la Reina del Mundo. En cuanto a los olontenses, aunque se conozca especialmente a Isidro Labrador, los patrones de Gibraleón son San Roque y Santa Ana.

En la Costa, como hemos comentado, está el ejemplo de Almonte, con la playa de Matalascañas, cuya patrona es la Virgen del Rocío, si bien, el patrón almonteño, San Pedro es menos conocido. En el otro extremo de la provincia, Ayamonte vive cada 8 de septiembre el día grande de sus fiestas patronales de Nuestra Señora de las Angustias, una fecha muy señalada, mientras que su patrón es San Diego de Alcalá.

Otros nombres habituales son los de Bollullos, con Mercedes; Bella, en Lepe -que tiene a San Roque como patrón-; y Rosario, tanto en Isla Cristina como Cartaya, que además tiene a San Sebastián como patrón.

También sucede en algunos puntos de la Costa de Huelva, que eligen a la patrona de los marineros, a la Virgen del Carmen, como su patrona. Así ocurre con Punta Umbría, La Antilla, Punta del Moral, El Rompido y Mazagón, aunque curiosamente también es patrona de San Juan del Puerto y Trigueros, localidades en las que son más conocidos sus patrones, San Juan Bautista y San Antonio Abad, respectivamente. Otros puntos del litoral son La Redondela, con el patronazgo de laVirgen de la Esperanza de los Doce Apóstoles

Por último, en el Condado y la Campiña, hay nombres muy característicos, como Clarines en Beas, con San Bartolomé como patrón; Salomé en Bonares, con San Francisco de Borja, como patrón; Estrella en Chucena; Valle, en La Palma, Manzanilla e Hinojos; Montemayor, en Moguer, con San José como patrón; Milagros, en Palos de la Frontera, con San Jorge Mártir como patrón; Luna, en Escacena del Campo, donde San Isidro Labrador es el patrón; Virtudes, en Paterna del Campo; Luz en Lucena, si bien es más conocido y habitual escuchar el nombre de su patrón, San Vicente; Socorro en Rociana del Condado; Pino, en Niebla, que también cuenta con el patronazgo de los Santos Walabonso y María de Niebla; o Águeda en Villalba del Alcor; y la Virgen de los Remedios y San Vicente Mártir en Villarrasa o San Bartolomé / San Sebastián Mártir en San Bartolomé. 

Todos estos nombres son más que habituales en estas localidades. Casi todos conocemos a alguien que así lo atestigua, que los identifican directamente con su procedencia. Conocerlos nos permite también adentrarnos un poco más en la identidad de cada pueblo de Huelva y del sentir de su gente. Antropología y santoral se dan la mano.