Juan Carlos Castro Crespo expone en el Instituto ‘La Rábida’ una muestra que llega del Instituto Cervantes de Amsterdam

Mari Paz Díaz. La música y la pintura se unen en la última exposición de Juan Carlos Castro Crespo en Huelva. ‘El Arte de la Fuga‘ da título a esta colección que el artista onubense define como «contundente por la temática, a la vez que muy bonita y agradable». Una nueva propuesta que puede visitarse hasta el próximo 18 de diciembre en el hall del Instituto ‘La Rábida’ de Huelva.

Con esta exposición, Castro Crespo propone a los visitantes un reencuentro con la música clásica. «Y es que la idea de realizar estas obras me surgió en una visita que hicimos mi mujer y yo al Guguenheim de Lisboa, donde tuvimos la oportunidad de asistir a un concierto de la Orquesta Sinfónica de Berlín, que fue maravilloso y que se me quedó impregnado en la memoria. De ahí, en otra ocasión, pude disfrutar de otro concierto, esta vez de un cuarteto de cuerda y piano en el Palacio de Viana de Córdoba. Todo aquello removió mi creatividad y fue así como en un momento determinado saltó la chispa y me decidí a realizar esta serie de cuadros», nos comenta el autor.

‘El Arte de la Fuga’ se expuso por primera vez en el Teatro Felipe Godínez de Moguer el pasado mes de junio de este año 2013. De ahí, la colección pasó en julio a Punta Umbría, desde donde ha pasado a mostrarse fuera de España, primero en el Instituto Cervantes de Lisboa y, después, en el Cervantes de Amsterdam. Lugares muy emblemáticos tras los cuales ha regresado a Huelva para divulgarse entre la comunidad educativa del Instituto ‘La Rábida’.

Según explica Castro Crespo, «para mí, esta exposición es muy especial porque he sido alumno y, después, profesor durante 35 años del Femenino, que se encuentra hermanado con el ‘Rábida’, así que estoy encantado con el emplazamiento elegido para mostrar esta colección y, por supuesto, acepté encantado cuando me lo pidió el instituto».

De hecho, el artista se muestra muy contento de que sus obras puedan ser enseñadas en este centro educativo a una población con una edad fundamental para acercarse al arte, ya sea la pintura como la música. Tanto es así que «los chicos están mostrando un gran respeto por esta muestra que se inauguró el pasado 21 de noviembre, además, lo hizo con una banda sonora muy especial, ya que para la apertura actuó un grupo de música clásica, un cuarteto de cuerda formado por alumnos del instituto».

En total, la exposición recoge 32 piezas muy variadas con la música como hilo conductor -aunque inicialmente contaba con un total de 40 cuadros, aunque algunos han sido vendidos. Así, los visitantes podrán ver el original del que ha sido el cartel anunciador del Festival de Cante Flamenco de Moguer de este año, celebrado el pasado mes de julio, «que tuve el privilegio de hacerlo, causando mucho debate, por lo que creo que es positivo». Ese cartel, en concreto, es un homenaje que Castro Crespo ha querido rendir a un grande de Huelva, como fue el Niño Miguel, un cuadro que realizó justo cuando el maestro acababa de morir.

Pero no es el único homenaje que rinde el artista en esta muestra. Porque también aparecen retratos a otros músicos onubenses de gran talla, como son el pianista Javier Perianes, de Nerva, y Lucas Macías, un gran oboísta valverdeño que toca en la Orquesta Sinfónica de Berlín.

En cuanto a la técnica, las obras también son muy diferentes, utilizando, por ejemplo, el collage para crear un ambiente como de grandes orquestas, donde no faltan la tuba, el violonchelo, el chelo o el piano, entre otros instrumentos.

Todo ello se conjuga en una exposición muy personal de Juan Carlos Castro Crespo, «porque en todo momento se respira mi obra. Además, me he divertido mucho haciéndola, con diferentes guiños, por ejemplo, como el que hago a la ópera de Puccini, sin olvidar el teatro musical», nos cuenta.

Una trayectoria impecable. Juan Carlos Castro Crespo es pintor, escultor, catedrático de Bellas Artes en Huelva y miembro de la Academia de Ciencias, Artes y Letras. Nacido en Huelva en 1948, estudió en la Facultad de Bellas Artes de Sevilla, aunque durante toda su vida fue principalmente autodidacta, puesto que hizo en un único año los cinco que dura normalmente la carrera. Desde entonces, lleva 34 años de intenso trabajo en su ciudad natal, en Huelva, aunque sus exposiciones han visitado todo el mundo.

Entre otras cuestiones, desde 1971 ingresó en la Escuela Superior de Arquitectura de Sevilla; en 1976 lo hizo en la Escuela Superior de Bellas Artes, Santa Isabel de Hungría de Sevilla, ganando las oposiciones al cuerpo catedráticos de I.B. en 1980 y Doctor Cum Laude en BB.AA desde 1995.

Desde 1969, sus obras han pasado por múltiples galerías de arte y salas, tanto nacionales como internacionales, además de haber realizado publicaciones y obras gráficas muy variadas.

Una intensa actividad imposible de resumir en unas líneas, trayectoria  que ha convertido a Juan Carlos Castro Crespo en uno de los pintores contemporáneos más relevantes de Huelva.