Elisabeth Méndez. Tres estudiantes del cuarto curso de Grado en Geología de la Universidad de Huelva procedentes de Gibraleón, Lepe y Moguer, María Eugenia Aguilar, María del Carmen Feria y Cecilia de la Prada, consecutivamente, han llevado a cabo un trabajo de investigación en el que se da a conocer cómo afectaría un tsunami a la localidad costera de Punta Umbría, una zona que por su cercanía a la Falla Azores-Gibraltar, causante del terremoto de Lisboa de 1755, está expuesta a cierta peligrosidad.
De esta forma, en ‘Análisis especial mediante el uso de herramientas SIG de la vulnerabilidad ante tsunamis en el municipio de Punta Umbría’, trabajo que ha permitido a estas jóvenes obtener el premio Sapere Aude 2013, reconocimiento que cada año concede la Cátedra Cepsa en colaboración con la Universidad de Huelva a labor investigadora de los jóvenes onubenses, se indaga en la vulnerabilidad de la zona, dando a conocer los problemas que estos fenómenos causarían y proponiendo alternativas de edificiación que evitarían una catástrofe mayor.
Para conocer un poco más sobre este interesante trabajo y sus resultados, Huelva Buenas Noticias ha hablado con una de las futuras geólogas que ha trabajado en la investigación, María Eugenia Aguilar, a través de la cual hemos podido comprobar, una vez más, la calidad formativa de los jóvenes de nuestra Universidad y su interés por las investigaciones que conciernen a esta tierra y que benefician a todos los onubenses.
– ¿En qué consiste vuestro trabajo de investigación?
– Se trata de un trabajo de cartografía en el que se analiza mediante herramientas espaciales, integradas en un Sistema de Información Geográfica, la vulnerabilidad ante tsunamis del casco urbano de la localidad de Punta Umbría, potencialmente expuesto a estos eventos tsunamigénicos.
A partir de la integración en el SIG de la información cartográfica y de la adquirida sobre las edificaciones del casco urbano, se ha elaborado un mapa de vulnerabilidad ante tsunami de Punta Umbría que recoge el resultado del análisis de los componentes claves de la vulnerabilidad de los edificios en base a la estructura, los materiales de construcción, el tipo de cimentación y el número de plantas, y que ha permitido su clasificación en cinco clases: muy baja, baja, media, alta y muy alta vulnerabilidad.
– ¿Y cuáles son las principales conclusiones a las que habéis llegado con el mismo?
– A través de este trabajo hemos podido demostrar que el 94 por ciento de edificaciones, es decir 1829 de un total de 1950, presentan niveles de vulnerabilidad de medio a muy alto. Además, tal y como describen estudios previos, la proximidad inmediata de Punta Umbría a la costa, su suave topografía y su pequeña elevación media sobre el nivel del mar, hacen que esté muy expuesta al impacto de tsunamis. Estas circunstancias provocarían que la ciudad quedara completamente inundada en caso de experimentar la llegada de este tipo de procesos de alta energía marinos, incluso en casos de olas de alturas inferiores a 2,5 metros. Además, existen otra serie de factores a considerar que pueden hacer variar la intensidad de los daños que provocaría el tsunami, como la estacionalidad poblacional del municipio puntaumbrieño, la coincidencia de pleamar o bajamar con el evento y/o el momento del día en que éste ocurriera
– Entonces vuestro trabajo confirma que Punta Umbría es una zona vulnerable frente a tsunamis…
– Si, así es. La región costera del Golfo de Cádiz y, en general, toda la costa atlántica ibérica posee cierta peligrosidad por tsunami debido a su proximidad a la Falla Azores-Gibraltar.
– ¿Con qué frecuencia y densidad suelen darse estos fenómenos en la zona y que daño han causado?
– El registro histórico y geológico consultado muestra que esta zona de fractura presenta periodos de recurrencia no muy altos para sismos de elevada magnitud que, sin embargo, han producido enormes daños en el litoral atlántico en los últimos 7.000 años. Según estudios realizados en la ría de Huelva se han encontrado evidencias de varios eventos tsunamigénicos, siendo el último registrado el originado por el terremoto de Lisboa en 1755. Estos datos referidos a escala de tiempo geológica son muy recientes.
– ¿Está Punta Umbría preparada para hacerles frente?
– En la actualidad no. Tal y como hemos comentado con anterioridad, en este trabajo se pone en evidencia los daños potenciales que experimentarían las infraestructuras de la ciudad, por lo que consideramos necesario elaborar planes de evacuación y programas de concienciación e información para la población ante este tipo de procesos altamente destructivos.
– ¿Cómo surgió este tema de investigación?
– A través de la Universidad conocimos la convocatoria del premio ‘Sapere Aude’, y nos pareció una buena idea participar para aumentar nuestro conocimiento y adentrarnos en el mundo de la investigación haciendo una aportación a la sociedad. En este sentido, buscamos un tema relacionado con nuestra formación y que estuviera relacionado con Huelva, y dimos con este.
– ¿Qué ha supuesto para vosotras recibir el premio ‘Sapere Aude’?
– Este premio ha supuesto una gran satisfacción personal debido al reconocimiento de nuestra labor investigadora. El premio ha consistido en una bonificación de 300 euros que hemos repartido entre nosotras a partes iguales, pero el tema económico queda muy lejos de ser lo importante en este asunto, ya que lo realmente importante es nuestro inicio en la investigación y los conocimientos que hemos adquirido.
– ¿Habéis recibido algún otro reconocimiento a vuestra labor investigadora?
– Si. Gracias a este trabajo se nos presentó la oportunidad de ser parte del comité de organización del VRCANS Congress, así como presentar un póster que se expuso en dicho congreso junto a los de otros científicos de la talla de Jorge Civis (director del IGME).
– Y por último, ¿cuáles son vuestros planes de futuro?
– En primer lugar terminar nuestra formación universitaria, en la que gracias a este trabajo, tenemos la posibilidad de realizar las prácticas externas curriculares en el Ayuntamiento de Punta Umbría, aumentando y perfeccionando nuestro trabajo.Tras finalizar nuestra formación, el futuro es un poco incierto debido a las circunstancias en las que se encuentra nuestro país. La posibilidad de emigrar es algo que contempla, creemos, toda la comunidad universitaria.
La investigación de Marta Fernández, otra de las premiadas con el premio Sapere Aude 2013.