Antonio Ramos. El Rugby Club de Loulé fue el vencedor del I Trofeo Colombino, tras vencer al Recreativo Bifesa Tartessos y al CR Xerez, en tanto que en las categorías Infantil y Cadete fue el Unión Aljarafe Sevilla Rugby quien hizo doblete ante los representantes onubenses.
La carabela se despide de Huelva… al menos hasta el año que viene. Y es que el Trofeo Colombino de Rugby cayó en manos de los portugueses del Clube de Rugby Loulé quienes tras un fenomenal campeonato lograron hacerse con el ansiado trofeo, que les otorga el derecho a participar el próximo año en la segunda edición si quieren conservar en sus vitrinas el admirable trofeo.
La jornada deportiva comenzó con la participación de las categorías inferiores de infantiles y cadetes, quienes se presentaban ante el público onubense en un escenario tan vistoso como el estadio Iberoamericano de Atletismo gracias al acuerdo de colaboración con la Diputación de Huelva y que supuso un marco idóneo para presentar el I Trofeo Colombino de Rugby.
Los jóvenes cachorros se enfrentaron por partida doble a los hispalenses del Unión Aljarafe Sevilla Rugby, una de las canteras con mayor número de jugadores y que aglutina a diversos ex conjuntos de la ciudad del Guadalquivir. Aún así, los recreativistas tuvieron actuaciones de gran calidad lo que les llevó a acercarse a la victoria, si bien los hispalenses ofrecieron una muestra del extenso trabajo de cantera que se viene realizando y lograron vencer en infantiles por 25-5 y en cadetes con un más contundente 46-5, que no reflejó el buen juego de los locales, los cuales lograron mantener el partido en tensión hasta los últimos minutos del encuentro.
Tras la exhibición de las jóvenes perlas onubenses, llegó el turno del triangular y a la vez piedra angular de la jornada deportiva que se estrenaba con un vistoso enfrentamiento entre Clube Rugby Loulé y CR Xerez, que concluyó con una trabajada victoria de los lusos por 26-5 lo cual dejaba claro las intenciones del equipo louletano amén de una magnífica impresión de los jerezanos, equipo que dio una excelente imagen durante toda la jornada.
Tras el primer encuentro, llegaba la hora del estreno del Recreativo Bifesa Tartessos en su casa y lo hacía frente a un desconocido hasta ese momento el CR Xerez, quien llegaba por primera vez a Huelva con la vitola de campeón de la liga amateur andaluza. Y no decepcionó.
Los onubenses, muy activos durante los primeros minutos de juego, no lograban romper la línea defensiva de su rival, correoso y bien posicionado durante los 40 minutos que duró cada partido. Si bien, cercano al ecuador del encuentro, una jugada del zaguero Juan Ortiz sirvió para que, tras una patada a seguir en la que la zaga jerezana quedó despistada, el onubense lograse colarse y posar el balón oval en terreno rival con lo que sumar los primeros cinco puntos.
Tras esta acción, y confiados en su superioridad teórica, los onubenses relajaron su juego lo cual fue aprovechado por el conjunto xerecista para lograr empatar el encuentro al borde de la conclusión de éste. Sin embargo, el palo más duro llegó en el último minuto y cuando todo parecía indicar que el resultado acabaría en tablas pues tras un golpe de castigo a favor de los visitantes, éstos decidieron patear y tras colocar en balón entre los dos postes sumaron tres nuevos puntos que les daba la victoria in extremis por 5-8 frente a un sorprendido Recreativo Bifesa Tartessos.
Tras el varapalo frente al CR Xerez, llegaba el turno de enfrentarse a los siempre incómodos jugadores de Loulé. Éstos, más descansados y con la experiencia que atesoran supieron controlar desde los primeros minutos el ritmo de juego, mientras el Recreativo Bifesa no lograba sentirse del todo cómodo sobre el césped. No obstante, los onubenses, más duros en delantera, lograron frenar gran parte de las embestidas de un rival que no quería dejarse el trofeo por el camino. Pese al esfuerzo de resistencia de los tartéssicos, en una jugada por la banda derecha, los lusos lograban penetrar hasta el fondo y hacerse con los primeros 7 puntos tras transformar a palos. El resultado no se movió más. Los linces lo intentaron, sabedores de lo que se jugaban si bien el Clube Loulé movió muy bien sus cartas para amarrar un resultado que les brindaba lograr la primera Carabela de Rugby.
Tras la conclusión del triangular, se realizó la entrega de placas conmemorativas a los participantes así como del trofeo que el capitán luso recogió de manos del representante onubense, una carabela cedida por el Recreativo de Huelva y que los atestigua como vencedores del primer trofeo colombino de rugby con lo que los louletanos tendrán en cesión durante un año el prestigioso trofeo hasta la celebración de la próxima edición el año que viene, en la que deberán volver a Huelva si quieren revalidar su título… si los onubenses les dejan.
