Redacción. Casi ocho horas ha estado en la calle la Virgen del Rocío en la madrugada de este lunes 19 de agosto en la procesión extraordinaria celebrada con motivo del Bicentenario del Rocío Chico y el Año Jubilar Mariano. En concreto, era la 1.12 de la noche cuando se producía la salida de la Blanca Paloma a hombros de los almonteños, una procesión que ha finalizado poco antes de las 9 de esta mañana.
Miles de personas han acompañado a la Virgen del Rocío en esta salida extraordinaria, que ha supuesto la cuarta vez que ha procesionado en este 2013. Y es que Almonte vive un año muy especial gracias a la declaración de Año Jubilar, vigente hasta el próximo 8 de septiembre. Con esta procesión extraordinaria por el bicentenario del Rocío Chico ya son cuatro las procesiones que se han acogido este año. Destacan la acontecida por las calles de Almonte, el traslado el pasado mes de mayo de la Virgen desde la iglesia de la Asunción de Almonte a la aldea, una tradición que se repite cada siete años, así como la tradicional con motivo de la romería, a la que ahora se ha unido la salida extraordinaria por el bicentenario del Rocío Chico.
Y no sólo esta madrugada, sino que se calcula que a lo largo de este fin de semana, 18 y 19 de agosto, han pasado por la aldea almonteña unas 500.000 personas, que han querido participar de esta tradición que tiene su origen en el voto de acción de gracias que el pueblo de Almonte hizo en 1813 tras haberse librado del ataque de las tropas francesas. El acta de voto tiene fecha del 16 de Agosto de 1813.
Para esta ocasión extraordinaria, la Virgen ha sido vestida por las hermanas camaristas con el traje denominado de los Montpensier, donación de la Condesa de París, Isabel Francisca de Orleans y Borbón, a principios del pasado Siglo XX.
Ha mostrado, así mismo, las ráfagas de rayos viselados, de estilo imperial, en plata, a juego con la corona y media luna, que datan de principios del siglo XIX. Y se ha presentado también adornada con flores de talco, completando la estética iconográfica del siglo XIX, que se prolongó hasta las primeras décadas del siglo XX.
La junta de gobierno de la Hermandad Matriz ha querido recuperar de esta forma una iconografía decimonónica de la Imagen de la Virgen del Rocío, que se puede suponer por los grabados y documentos históricos, que tuviera en el siglo XIX, y en 1813, cuando se produce el voto de acción de gracias que hoy conocemos como del Rocío Chico.
Un Rocío Chico que ha llegado ya a su fin, habiéndose cumplido con el voto de acción de gracias y con una alta participación de rocieros.
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