Casi medio centenar de jóvenes aprenden a bailar popping y locking en la AVV Santa Gema

Ana Rodríguez. La danza es su pasión y su nombre… o al menos su nombre artístico. Dan Danza es un joven onubense que se ha propuesto enseñar a sus paisanos a bailar y valorar el locking y el popping, dos estilos de música que hunden sus raíces en el hip hop y el breakdance. Su talento puede trasmitirlo a otros gracias a las clases que imparte, entre otros espacios, en la Asociación de Vecinos Santa Gema, donde cuenta en la actualidad con casi medio centenar de alumnos.

La afición de Dan por el baile le viene desde que era pequeño y su padre le enseñaba vídeos de Michael Jackson, “yo lo imitaba, pero sin saber muy bien lo que estaba haciendo. Hasta los 17 años no me di cuenta de que lo que Jackson bailaba era popping y locking”, afirma el joven. A partir de ahí, el onubense empezó a formarse de manera autodidacta junto con su hermano pequeño –en Huelva no había nadie que enseñara hace ocho años-, a través de vídeos, Internet, viajando para ver a grandes figura bailar, a través de redes sociales e incluso compitiendo… y todo ello a la par que se sacaba su carrera, Trabajo Social, una profesión que, como casi todo en su vida, también ha enfocado a la danza, “aplicándola como una manera de proceder con las personas, de trabajar con distintos colectivos de una forma didáctica”.

Tras unos años formándose, hace cinco comenzó a sentir la inquietud de enseñar, de difundir en Huelva estos dos amplios estilos musicales. Y su gesta comenzó en los bares, que fueron los primeros en abrirle las puertas para que pudiera impartir clases en ellos, cerrando el ‘curso académico’ con pequeñas exhibiciones. Pero fue gracias a este pequeño paso que una Asociación de Vecinos, la de Huerta Mena, se fijó en Dan y le ofreció su sede para sus clases, clases que, con el tiempo, acabaron mudándose a otra Asociación de Vecinos, la de Santa Gema.

Actualmente, más de 40 personas acuden cada viernes por la tarde durante dos horas a que Dan y algunos de sus compañeros les enseñen a bailar, “30 son fijos y el margen de oscilación de los nuevos está entre los 10 y 15 alumnos”, comenta. Las edades de las personas que comienzan en el popping y el locking suelen moverse entre los 12 y los 16 años, aunque Dan tiene gente de todas las edades, “de los seis a los 20 ó 23, incluso hay personas de entre 25 y 40 años interesadas en aprender”. Como señala el profesor, “al principio muchos llegan extrañados, porque tienen la imagen de lo que han visto en programas de la tele y películas como Fama o Street Dance, pero aquí aprenden el estilo como tal. Todo el mundo baila, sólo hay que tener ganas e ilusión”.

Pero las de Santa Gema no son las únicas clases que ofrece Dan Danza. Desde hace dos años, el bailarín instruye a los niños de entre seis y 15 años del Club Juvenil de la Asociación Huelva Creativa de la Fundación Cajasol en el hip hop, mostrándoles sus bases, la esencia del baile urbano y una pequeña especialización. El primer año tuvo 30 alumnos, pero en este último curso duplicó este número gracias al boca a boca, lo que demuestra la satisfacción de niños y padres con las clases. “Enseño competencia y muchos valores, sobre todo a los más pequeños. Es una etapa en la que están formando su identidad y trato de inculcarles el compañerismo, la solidaridad, la disciplina como un comportamiento, como una actitud frente a las tareas y también aprovecho para que adquieran buenos hábitos alimenticios”, un completo cóctel que se apoya en la base del baile.

Precisamente inspirado en esta filosofía de enseñanza, Dan presentó un trabajo sobre la adquisición de competencias a través de la danza al certamen de la Universidad de Huelva ‘Tu idea de negocio’, concurso que ganó, demostrando así que “toda la dinámica que estoy poniendo en práctica sirve y eso te da un enorme aporte de seguridad”.

Con esta idea en mente, no es de extrañar que entre los planes del onubense se encuentre realizar un máster vinculado con el deporte y la danza y montar su propia academia, donde seguir poniendo en práctica sus ideas.

Por otro lado, Dan realiza dos talleres con la Plocc este verano en el Muelle de las Carabelas y ha dado clases en Valdocco, lo hace en un gimnasio de Lepe… pero su arte no sólo se queda en las aulas. Solo o en compañía de su grupo de baile, ‘Yo soy loco’, realiza espectáculos para empresas privadas, instituciones públicas, bares, promociones de marcas, street shows, teatro y un largo etcétera. Últimamente ha participado en la Gala Cuántico, en competiciones en Portugal y Valencia e incluso se presentó al casting de Tú sí que vales junto a su hermano, Pedro Pop.

Yo soy loco. El grupo de baile del que forma parte Dan Danza nació hace seis años, aunque ha cambiado de nombre varias veces y por él han pasado varios bailarines, en la actualidad ‘Yo soy loco’ lo componen de manera habitual seis amantes del locking y el popping: Erick, Mojoyoyo, B-Boy Ñ, Pedro Pop y Kotito, además de Dan, habiendo sido varios de ellos alumnos suyos.

Sus bailes están a caballo entre la calle y la academia, ya que no existe una coreografía establecida sino unas bases que cada uno lleva bien asentadas.

En invierno, probablemente los hayan visto en la calle Concepción o en la plaza de las Monjas de la capital onubense y ahora, durante este verano, podremos ver a ‘Yo soy loco’ las tardes de los domingos por la calle Ancha o la plaza Pérez Pastor de Punta Umbría y también en el Puerto de Huelva, concretamente en el escenario de la Cervecería Bonilla, donde dan clases los miércoles de 20.00 a 21.00 horas y luego hacen pequeñas competiciones. Además, algunos de los componentes del grupo están con un productor cubriendo la oferta hotelera desde Isla Canela a El Rompido, haciendo tributo a Michael Jackson.

A pesar de la gran demanda y atracción que tienen popping y locking, el joven sólo aspira a “tener una manera alternativa de ocio muy asociada a nuestra personalidad y gustos. Lo primero que buscamos es divertirnos nosotros y, si a eso podemos sacarle partido y llegar a ser conocidos a nivel nacional, mucho mejor. Nuestra manera de promocionarnos es nuestra forma de divertirnos”.

Un esquema perfecto en el que bailar en la calle es sólo su tarjeta de visita, la forma de darse a conocer y de atraer tanto a nuevos alumnos como a clientes y promotores.

Así que, la próxima vez que se encuentren a un grupo de chavales bailando en la calle o que piensen en tomar una clase de baile, abran sus mentes y den el salto al mundo del hip hop. En Huelva encontrarán buenos maestros que les guíen.