Redacción. El Centro Cultural de Punta Umbría acogió este 12 de junio, la mesa redonda denominada ‘Las hermandades como nexo de unión de la sociedad puntaumbrieña’, dentro de su programa de eventos para conmemorar el 50 Aniversario del municipio costero.
Así, bajo la coordinación de Ángel Ramírez Coronel, primero se realizó un repaso al organigrama de cada una de las siete hermandades existentes, para desarrollar después su implicación con el pueblo, así como los momentos más importantes que recogen en sus celebraciones.
En el evento, participaron miembros de la Hermandad de Nuestra Señora del Carmen, de la Santa Cruz, del Santo Cristo del Mar y María Santísima de los Dolores, la filial de Montemayor, así como la Real Hermandad del Rocío de Punta Umbría, La Borriquita o cofradía de Jesús del Amor en su Entrada Triunfal en Jerusalén y la nueva pro Hermandad de Jesús de Pasión.
Representando a la Real Hermandad del Rocío de Punta Umbría, Manolo Sevidanes destacó la convivencia que viven sus miembros en la romería y en el resto del año, “siempre intentando hacer cosas nuevas, como la semana cultural, que en este 2013 hemos dedicado a Cartaya”.
Por su parte, el presidente de la Hermandad de Nuestra Señora del Carmen, Manuel Ferrera, subrayó como momento especial la celebración del centenario y los actos tradicionales de la festividad de la Patrona, como la sardiná, el homenaje al marinero o las dos procesiones.
En representación de la del Santo Cristo del Mar y María Santísima de los Dolores, Plácido Ruiz Pomares, dijo como curiosidad que la Virgen en principio se llamó de la Paz, y que en sus sentimientos “esta hermandad es la Semana Santa de este pueblo”.
En cuanto a la de la Borriquita, Diego Manuel Rodríguez explicó que a la vez que el paso se fue haciendo la imagen del Cristo del Amor, del escultor palmerino Martín Lagares. A pesar de su corta historia, puesto que procesiona desde el 2011, “estoy seguro de que engrandece a Punta Umbría y le hace disfrutar más de su Semana Santa”.
Roberto López Pérez, de parte de la Hermandad de Montemayor, habló de la importancia del 15 junio de 1957, momento en el que entregaron en el obispado los papeles de la entidad. Recordó el carretón que les hizo Antonio Olaya, que ha pasado por varias hermandades del pueblo, e incluso este año ha tenido que apoyar a la del Rocío por la rotura del suyo. Esta hermanad tiene un organigrama diferente al resto, porque el hermano mayor es el presidente.
Juanibel Benítez Abril, de la Asociación Pro Hermandad de Jesús de Pasión, se emocionó al recordar que ese Cristo fue un sueño de su madre, la primera maestra de Punta Umbría. Después, esa misma imagen se ha acompañado de una Virgen.
Por último, Rafael Martín fue el responsable de detallar la labor de la Hermandad de la Santa Cruz, quien rememoró que la primera romería fue en 1947 y que, bajo su presidencia ha intentado este año volver a las raíces.
La mesa, más allá del carácter religioso de estas entidades, se adentró por tanto en el componente social que tienen y en sus vínculos con el pueblo.
Sobre el futuro, debatieron la posibilidad de realizar una actividad conjunta en la zona hotelera a partir del mes de septiembre, para dar a conocer las tradiciones locales a los visitantes.