Redacción. Una exhibición de gimnasia rítmica protagonizada por las escuelas de esta modalidad deportiva de Cartaya, y que contó la colaboración de Punta Umbría, ha servido para cerrar con un auténtico espectáculo el curso en las escuelas deportivas municipales de Cartaya.
Éste ha sido el broche de oro a un año deportivo en el que se han impartido diez disciplinas, dos de ellas novedosas, psicomotricidad y balonmano, y en el que por primera vez, la escuela de fútbol ha estado gestionada directamente por la Agrupación Deportiva Cartaya.
Una representación bastante numerosa, conformada por más de 700 alumnos que han participado en estas escuelas y en los juegos deportivos municipales, que se han desarrollado en el mes de junio, protagonizó el acto de clausura, en el que el área municipal de deportes repartió medallas para los alumnos más jóvenes y los ganadores de las diferentes competiciones que se han venido celebrando en las últimas semanas.
También, se otorgaron premios para los equipos que se impusieron en cada una de las categorías de los Juegos Deportivos Municipales, cuyos familiares no daban abasto para inmortalizar tan importante momento.
Las futuras promesas del deporte cartayero recibieron un premio a su esfuerzo realizado durante todo el año. Según destacó el concejal de Actividades Deportivas, Manuel Barroso, “se trata de transmitir a los chavales los valores implícitos al mundo del deporte e inculcarles, desde muy pequeñitos, la importancia de practicar alguna actividad física, hacerlo en equipo y entablar nuevas relaciones con otros niños de su edad”.
Esos son los objetivos con los que cada año se ponen en marcha las Escuelas Deportivas Municipales, que en este curso deportivo 2012/2013 han ‘ampliado y variado su oferta formativa’ en distintas disciplinas, que van desde aeróbic, ajedrez, atletismo, baloncesto, balonmano, gimnasia rítmica, multideporte, psicomotricidad, tenis o voleibol.
Esta fue toda una jornada de satisfacción y sonrisas para los futuros futbolistas, tenistas, ajedrecistas y gimnastas, así como una tarde llena de flashes y emoción para las familias de los más pequeños, que recibieron una distinción por su esfuerzo.