S. D. Más que punto y final, punto y seguido. El primer asalto por el ascenso lo perdió la Olímpica, pero no el combate. Los valverdeños cayeron 2-1 en el campo de la UB Lebrijana (0-0 en la ida) y tendrán que esperar a que se produzcan vacantes en el grupo X de Tercera División para subir.
Partido típico de final de temporada con un ascenso en juego. Mucho control por las dos partes, ninguno corriendo riesgos y los dos sabedores que un error u omisión costaba caro. Y en la mente de todos el partido de ida en Valverde, de donde salió vivo el equipo lebrijano, y que podía pasar factura en la vuelta. Pasó.
Porque si la Olímpica hubiera tenido un porcentaje de acierto normal en ese partido, el que se jugó el domingo hubiera quedado a efectos de inventario. Y no fue así. Como había muchísimo en juego, los dos prácticamente tiraron el primer tiempo, en el que los nervios y las imprecisiones abundaron.
Mejor fue el segundo, pero sólo por los goles y por la emoción ante un marcador incierto. No pudo empezar peor ese segundo periodo para las huestes de Juan Carlos Camacho. Porque en la primera acción de la continuación, Jesús, de cabeza, establecía el 1-0 que daba el ascenso directo a la otra Balona.
Ese gol podía haber hecho mucho daño a la Olímpica, pero no lo hizo. Simplemente porque supo sacar fuerzas de flaqueza y, por fin, pudo perforar las meta del hasta entonces imbatible Luisma. Antonio Domínguez, autor de goles importantes esta temporada, fue quien hizo el empate, que devolvió la alegría a los casi 200 seguidores valverdeños desplazados a Lebrija, aprovechando una falta de coordinación de la zaga local. En ese momento, la Olímpica era de Tercera.
A los andevaleños les empezó a interesar que el partido se parase, que no cogiera ritmo. Lo estaba consiguiendo la Olímpica, pero en una jugada extraña, de nuevo Jesús mandaba la pelota a la red. Ese gol sí hizo daño. Mucho daño. Porque aún con más de 20 minutos por delante, la Olímpica casi entregó la cuchara. Insistió, peleó y trató de llegar a las inmediaciones de Luisma, pero lo hizo con el corazón y no con la cabeza, facilitando las acciones defensivas de una Lebrijana que no tuvo excesivos problemas para llegar a buen puerto, ganar el partido y ascender a Tercera.
A la Olímpica le quedó el orgullo de un buen trabajo a lo largo de la temporada, y la esperanza fundada que todo eso tenga la recompensa merecida, aunque haya que esperar un poco.
UB LEBRIJANA: Luisma; Miguel Ángel, Samu, Juande, Pedro; José Mari, Paco (Cristóbal, 88′), Luigi (Adri, 70′); Plata (Luisma Jiménez, 87′), Jesús y Gerardo (Selu, 66′).
OLÍMPICA VALVERDEÑA: Nacho; Antón (Samu, 81′), Pipa, Canterla, José Ángel; Víctor Pachón (Marcos Bermejo, 87′), Pichardo; Luis Ligero (Iván, 93′), Antonio Domínguez, Marquitos (Berna, 75′); y Mario Mora.
Árbitro: Cerrato Moreno (Córdoba). Amonestó a Miguel Ángel, Pedro, José Mari y Gerardo, por la UB Lebrijana; y a Canterla, Pipa, Pichardo, Luis Ligero y Víctor Pachón, por la Olímpica.
Goles: 1-0 (46′) Jesús. 1-1 (55′) Antonio Domínguez. 2-1 (67′) Jesús.
Incidencias: Partido de vuelta de la eliminatoria por el ascenso a Tercera División disputado en el estadio Municipal de Lebrija ante más de 4.000 espectadores, 200 de ellos procedentes de Valverde.
