Redacción. En muchas ocasiones son los más pequeños los que dan lecciones a los mayores, y este es el caso precisamente de los menores de la barriada de El Almendral, en Cartaya. Después de semanas de ensayos y preparativos, han sacado a la calle, y con fines totalmente altruistas, una colorida Cruz de Mayo con la que han recorrido el barrio de punta a punta recogiendo alimentos para las familias más necesitadas de la localidad.
La iniciativa, en la que han participado una veintena de menores, debidamente ataviados para la ocasión, y arropados por sus familias, ha permitido recaudar más de 400 kilos de alimentos no perecederos que los jóvenes cofrades han entregado a la delegación de Cáritas en Cartaya.
Todo un ejemplo a seguir el que han ofrecido estos pequeños que han finalizado su solidaria jornada en el parque de El Almendral, donde han posado ante las cámaras de sus progenitores para que estos inmortalizaran el momento en el que los más bajitos de la casa recordaban a los mayores que si se quiere se puede, y que todos podemos contribuir con pequeños gestos y de forma solidaria a paliar la situación de quienes menos tienen.
Este es el mensaje que llevaron estos jóvenes cofrades a la sociedad cartayera, y lo hicieron puerta a puerta, para que les llegara a todos. Y tanto les gustó la experiencia, que ya piensan en repetirla para el próximo año.