José Manuel Jiménez / Zalamea la Real. La Casa Hermandad de la finca de El Romerito fue el marco que acogió el tradicional pregón que anuncia la romería 2013 de Zalamea en honor a la Santa Cruz y la Divina Pastora. Eva Vélez fue la encargada de anunciar El Romerito de este año con un pregón cargado de sentimiento, evocando su relación con esta fiesta desde la infancia.
Durante el prólogo, intervino el alcalde de Zalamea, Marcos Toti, que señaló la valentía de la pregonera ante la responsabilidad que supone anunciar la romería zalameña. Toti quiso, además, destacar la labor de la hermandad a lo largo del año y, sobre todo, en las semanas previas a la fiesta.
Del mismo modo, quiso destacar las diferentes medidas que se van a tomar conjuntamente con la hermandad. Quiso terminar deseando una feliz romería para zalameños y visitantes, para que disfruten en un entorno privilegiado.
El mayordomo de este año, Juan José Sánchez, quiso también desear una feliz romería e invitó a los asistentes a que pasaran por su casa durante el próximo fin de semana.
El pregonero de la edición anterior, Luis Hernández, antes de presentar a su sucesora, quiso agradecer de nuevo a la hermandad, el hecho de haberlo elegido para anunciar la romería de 2012. De la pregonera de este año, refirió que , aunque nacida en Galicia, su corazón es zalameño por los cuatro costados. Tras dar unas pinceladas sobre la biografía de Eva Vélez, quiso destacar su cariño hacia la romería, la cual vive intensamente en ‘La Carreta’, su casa en la finca, habiendo sido además, junto con su marido, los mayordomos del pasado año.
La pregonera inició su intervención apuntando que cuando recibió la propuesta para dicha tarea, no dudó un momento en aceptarla. Para Eva, pregonar debe ser algo más que anunciar un evento público. Expresó su deseo de compartir lo que alberga su corazón con respecto a El Romerito y su fiesta, hablar de creencias y sentimientos.
Durante su intervención, un grupo de voces zalameñas interpretó diferentes sevillanas tradicionales y coplillas típicas de las cruces zalameñas.
La pregonera habló de la tradición mariana de Zalamea a lo largo del año. Su amor por el pueblo, inculcado por sus padres desde la infancia cuando residía en tierras gallegas, lo que se tradujo posteriormente en su implicación en las fiestas zalameñas, especialmente en la romería, participando en el baile de las sevillanas pardas y el fandango de Zalamea.
El Romeríto no deja indiferente a nadie, aseguró Eva, y se puede expresar de mil maneras. Recordó como evolucionó su vinculación con la fiesta, la experiencia única de despertar en la finca. El camino de ida el viernes por la tarde, el cual, siempre ha vivido intensamente. El Rosario la noche del sábado y la Misa de Romeros del domingo, bajo una cruz vacía , símbolo de la vida. Quiso recordar la procesión de la Divina Pastora por la finca, así como el momento de la puja de la mayordomía, deseando desde pequeña poder hacerse cargo de la misma, algo que sucedió en 2012. Para Eva, ser mayordomo es una experiencia en la que se recibe más de lo que se da.
Con respecto a la última jornada de la romería, la pregonera lo llamó ‘Camino de Gloria’ acompañando a la Divina Pastora con sevillanas salidas de gargantas ya roncas, que al llegar a la Cuesta de Los Pocitos, marcan el final de la fiesta, pero también la cuenta atrás para la del año que viene.
Finalmente, volvió a agradecer públicamente el haber compartido sus sentimientos y manera de ver la fiesta, entregando a la hermandad una copia de su pregón. El acto concluyó con la actuación del grupo Infussión, ganador del certamen Operación Romerito, celebrado a principios de año.