M. A. F. Fernando Castelló fue el técnico con el que el Club Balonmano Pedro Alonso Niño de Moguer ascendió a la División de Honor Plata en la temporada 2008-09 y, tres años después de su marcha, volvió el pasado verano para coger las riendas de un proyecto de transición, con una plantilla corta y sin aspiraciones de disputar la fase de ascenso. Pero pese a esas premisas, Castelló ha sacado el máximo rendimiento a su plantel, puliendo a los jóvenes para construir un equipo competitivo en torno a los supervivientes de la época gloriosa, para juntos rozar la fase de ascenso con una segunda vuelta espectacular. Para el nuevo ejercicio él está dispuesto a seguir, pero todo está en manos de quien dirija el club a partir del 30 de junio.
– ¿Qué balance hace de la temporada ya concluida?
Con las perspectivas que había al principio de la temporada, muchos decían que lo íbamos a pasar mal para mantener la categoría y al final hemos sido cuartos y casi jugamos fase de ascenso. Creo que hemos ido de menos a más pese a los problemas y el balance de la temporada es muy bueno.
– ¿Qué ha sido lo mejor y lo peor de esta campaña?
Lo mejor ha sido la evolución y la competitividad que ha demostrado el equipo. Lo peor ha sido la mala suerte que hemos tenido con las lesiones y es algo que lo hemos notado muchísimo. Sin embargo eso ha servido para que otros jugadores asuman responsabilidades y mejoren en su rendimiento, por lo que habrá que decir eso de no hay mal que por bien no venga, aunque es verdad que con una plantilla corta como la nuestra las lesiones nos han hecho mucho daño.
– ¿Cuál ha sido la clave para que el equipo haya realizado una segunda vuelta tan espectacular?
En la segunda vuelta la implicación y aprendizaje de los jugadores ha ido a más y han ido sabiendo competir. Todo requiere un proceso hasta que nos comportamos como equipo. Había un grupo de jugadores en parte nuevos para un entrenador que llega y funcionar requiere un tiempo y no se consigue de la noche a la mañana y todos nos hemos ido adaptando.
– ¿Qué nota pone a los jugadores jóvenes y a los más veteranos?
Sin dudarlo un sobresaliente a todos ellos. El deporte es muy simple y se evalúa en función de resultados y potencial y en nuestro caso lo hemos optimizado al máximo. Con varios jugadores veteranos importantes lesionados los jóvenes han evolucionado, aunque no han sido capaces de asumir su rol determinante, pero hay que ser conscientes que nos medimos a equipos con canteras que están acostumbradas a jugar y ganar campeonatos de España, como la de Elche o la de Córdoba y que en Huelva nuestros jugadores apenas compiten porque el balonmano se practica en pocas localidades y el escalón hasta la Primera Nacional es muy grande.
– ¿Si el Innovasur Granada no se hubiera retirado el PAN Moguer estaría en fase de ascenso?
Eso no se puede saber. Al final la liga es un todos contra todos y es justa. Está claro que si Granada no se hubiera retirado tendríamos dos puntos más y hubiéramos jugado la última jornada en casa, pero es inútil plantearse eso ahora. De todas formas creo que por nuestras circunstancias hubiera sido complicado para nosotros disputar la fase de ascenso porque tenemos muchos jugadores con problemas físicos y jugar tres partidos seguidos al máximo nivel es complicado. Nadie al margen del Antequera partía como favorito para subir y ha dado la sorpresa el Benidorm, cuando había equipos de más potencial, como la Nava.
– ¿Continuará al frente del equipo la próxima temporada?
Ahora se abre en el club un momento de incertidumbre. En teoría hay elecciones y no sabemos qué idea tiene la directiva, si el presidente deberá continuar porque no sale nadie o si definitivamente se va. Hay diferentes perspectivas y opciones y veremos qué pasa. Yo quedo al margen de todo eso y por supuesto que me gustaría seguir. Estaría encantado porque en Moguer me siento muy a gusto y he disfrutado y aprendido mucho en esta temporada, que nos ha obligado a exprimirnos al máximo. Si hay un proyecto ilusionante y quieren contar conmigo aquí estoy. Me siento como en casa y he tenido un regreso muy agradable al club, que siento como mío y tengo una relación personal de amistad con su gente, que siempre me ha facilitado mucho las cosas.
– ¿Si continúa cree que tendría una plantilla similar a la actual o prevé cambios?
Hay jugadores que por las lesiones igual toman una decisión, teniendo en cuenta su vida profesional y personal, y otros que tras muchos años de éxitos igual afrontan de manera diferente un cambio de objetivo. Al final se trata de que haya equilibro en todo y tener muy claros los objetivos en función de los medios y los recursos. La verdad es que está todo en el aire. Estamos también a la expectativa de que va a pasar con la remodelación de las categorías nacional y ahora tras la elecciones en la Federación se definirá todo. La verdad es que no sabemos en qué categoría va a jugar la temporada que viene el club. Igual tenemos que hacer una plantilla con jugadores jóvenes y en formación pero con ganas, que vayan a dar un rendimiento a medio plazo y logremos sacarles algo más inmediatamente. Mediremos nuestros esfuerzos con otros equipos y a ver dónde nos podemos situar.