La nueva túnica bordada para el Señor de Pasión

Redacción. El historiador y actual  conservador del convento de Santa Clara de Moguer, Juan Manuel Moreno Orta, ha realizado el siguiente artículo sobre la nueva túnica que el Señor de Pasión estrenará el Martes Santo:

«En este año en que se cumplen los 75 años de la hechura de la actual imagen del Señor de la Pasión se va a estrenar una nueva túnica donada por unos devotos. Como en otras ocasiones especiales el Señor irá de blanco. En ella se han colocado unos bordados antiguos que han sido pasados, compuestos e incrementados, acorde a su estilo, por el bordador onubense Francisco Mesa Ortega.


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Esos bordados en oro provienen del mercado del arte y eran unas piezas litúrgicas que habían sido desmembradas y descompuestas y ofrecidas a la venta. El autor de la túnica ha sabido conjugarlos y dotarlos de nuevas piezas en consonancia con las adquiridas, otorgándoles una de una nueva vida y volviendo a ser usadas para el fin para el que se crearon: darle culto a Dios…

El bordado primigenio ha de enclavarse en el denominado Modernismo o más concretamente, y ciñéndonos a su lugar de origen y ejecución, el Art Nouveau francés. Desconocemos la fecha concreta de su realización pero hemos de fijarla en la segunda mitad del siglo XIX.


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Las piezas están realizadas en hilo de camaraña de oro, a realce, mayoritariamente con la técnica de “cartulina”, también tiene decoración a base de hojilla y muestran, además, ornato de piedras y detalles en sedas.

En la parte central de la túnica y en su parte baja vemos como una serie de tallos de azucenas (con flores abiertas y cerradas) y roleos van desplegándose cobijando en la zona inferior una Cruz de Jerusalén en gules (recordándonos la heráldica la esta corporación penitencial). Está todo culminado por el monograma del nombre de Jesucristo1 (el conocido JHS), orlado de 12 rosas2 y rematado por una flor de lis. Dicho elemento es en realidad una flor del lirio y está relacionado con la Realeza de Francia (aquí vemos que ese símbolo se vincula a quien es el Rey de Reyes, Nuestro Señor Jesucristo). Así mismo el lirio es para el cristianismo símbolo de la pureza, la castidad y la inocencia.

La túnica en su bordura inferior y en las mangas, lleva un galón en oro fino que nos muestra hojas de roble con sus frutos, símbolo de la constancia de Cristo. Son un aditamento ideado por el autor para dar sostén a toda la obra que se eleva sobre esa base.

La decoración de las mangas está compuesta por unos ramilletes floridos que caen hacia los pies del Señor y una rama de olivo que se eleva. La rama de olivo tiene 11 hojas que se apuntan a lo alto,  mientras que una lo está hacia abajo. Son el símbolo del Colegio Apostólico (quienes aun flaqueando, mintiendo y escondiéndose en su mayor parte, se mantienen fieles a Cristo y la doceava es la que representa al Iscariote), el día en que se realiza el diseño de estas mangas coincide con la festividad litúrgica de la Virgen de la Paz. El autor ha querido mostrar cómo está depositada en las manos del Señor de Pasión la ansiada Paz que todo el orbe tiene. Las dos flores que se inclinan hacia el espectador se hallan enfrentadas, lo cual es símbolo del ser humano ante el mensaje de Cristo: unos lo atienden y otros, desgraciadamente, se vuelven y lo ignoran. La parte más importante de las mangas es de nueva creación, salvo los ramos, todo lo demás es diseño y ejecución del bordador que ha realizado la túnica.

En el cuello de la túnica volvemos a encontrar la misma decoración modernista que en el resto de la prenda. Partiendo de la base que le marcan los dos ramos superiores, el artista ha rematado la parte baja de la abertura con unas hojas que se unen en su base gracias a una especie de faja y de la que surge una hoja palmeada. Dichos elementos se hallan partidos en bandas horizontales a modo de decoración (usando los distintos hilos y brillos del oro), lo que concuerda perfectamente con los elementos originales art nouveau ya que son modos decorativos usados por ese movimiento artístico.

Toda la túnica se haya decorada con minúsculos tréboles, símbolos de la Santísima Trinidad.  Incluso hay uno de cuatro hojas, este a su vez representa a los cuatro Evangelistas. Es de todos conocida la vinculación con la suerte de esa planta. Su aparición en la vestimenta del Señor de Pasión no es baladí (como hemos anunciado), sino que también nos está prefigurando lo que va a ocurrir tras clavar a Cristo en la cruz: la soldadesca se echa a suertes su túnica inconsútil (ver Evangelio de Juan 19, 23 – 24). El artista hace referencia de una manera sutil de ese momento de la pasión de Cristo.

El color blanco de la prenda viene dado por los antecedentes históricos ya conocidos en la hermandad. Aun así hemos de dejar patente que esa tonalidad simboliza la Pureza y la Fe (dos palabras unidas a Cristo), también vemos una referencia a las Profecías de Isaías3: como Cordero mudo es llevado al matadero (el cordero puro e inmaculado es de color blanco). Prefiguración del Cordero Pascual que es Cristo. Es el color que refleja la Inocencia y además el Espíritu Santo se muestra en una Paloma Alba.

Sirvan las presentes líneas como análisis breve del significado que encierra la nueva túnica que el Señor de Pasión estrenará en el Martes Santo de su 75 aniversario.

Laus Deo Semper».

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