Sergio Borrero. Las puertas de la iglesia conventual de Santa María de Gracia se abrían a las 21:00h en la noche de ayer jueves para que comenzará el rezo del Solemne Vía Crucis presidido por la imagen titular de la corporación del Jueves Santo. La portentosa talla que gubiara el imaginero Joaquín Gómez del Castillo recorrió las calles cercanas a su templo
se iban rezando una tras otra las distintas estaciones del Vía Crucis.
Ha sido este un día especial, ya que debido a la reciente restauración a la que ha sido sometida el Cristo por parte del restaurador D. Enrique Gutiérrez Carrasquilla, el Cristo no ha sido expuesto en devoto besapiés como viene siendo habitual estos años atrás. Una decisión adoptada tras la recomendación hecha por el propio restaurador, quien aconsejó no celebrar este año dicho culto dado lo reciente que estaba aún la intervención. Recordemos que el Cristo llegó a Huelva el pasado día 8 de febrero.
Por motivo de la reciente restauración también, la imagen ha sido portada en el solemne rezo sobre unas andas llevadas por los hermanos y no directamente sobre el hombro de éstos como sucedía años atrás. El cortejo lo componían hermanos portando cirios y cuatro faroles escoltando al Santísimo Cristo de la Buena Muerte.