Jonathan Valle, el cántabro trotamundos que ganó la Copa rusa con un equipo tártaro

P. G. Kazán es la capital de la República de Tartaria, en la Federación Rusa. Allí juega el Rubin, el último equipo en el que estuvo enrolado un cántabro trotamundos llamado Jonathan Valle, jugador ahora del Recreativo de Huelva, y para el que el partido del domingo ante el Racing “es especial”. Kazán fue una estación más del largo peregrinar en el fútbol, desde que se dio a conocer siendo alevín en el Torneo de Brunete, donde le ganó la mano a un tal Andresín, que con el tiempo llegó a ser Andrés Iniesta. En las filas de los tártaros del Rubin, antes de regresar a España para enrolarse en el Recre, ganó la Copa de Rusia.

A sus 28 años, Jonathan Valle ha vivido mucho y de prisa. Por sus inicios estaba destinado a ser un grande en cualquier grande. Decisiones inapropiadas y erróneas le apartaron del camino del triunfo, para comenzar un largo periplo por muchos –demasiados- equipos en busca de la identidad perdida.

Lejos queda aquella concentración con el primer equipo en una ciudad holandesa llamada Dwingeloo (curiosidades del destino, pertenece a la provincia de Drenthe, del mismo nombre de otro jugador de decisiones inapropiadas y erróneas) con apenas 14 años. Fue la puerta que se le abrió de su equipo, el Racing, en el que debutó en Primera División con sólo 18 años.

Con altibajos, luces y sombras, Valle aportó su fútbol con cuentagotas, marchando en 2006 al Málaga, que entonces estaba en Segunda División.

Su vuelta al Racing coincidió con una época de muchas lesiones, que le impidieron rendir como se esperaba, siendo cedido de nuevo en 2008 a la Ponferradina, con quien asciende un año después, esta vez cedido por el Castellón.

De nuevo las lesiones se cruzan en el camino de Jonathan Valle, que había firmado por el Leganés, donde no acaba de cuajar, quedándose sin equipo. Participa en las sesiones de la AFE para jugadores en paro, en donde coincide con Sergi Barjuan. Con todo, la temporada 2011-12 la acaba en Kazán, en las filas del Rubin, donde conquista esa Copa rusa… antes de recalar en el Recreativo de Huelva.

En las filas albiazules ha participado en 18 partidos, doce de ellas como titular, y lleva anotados 4 goles. El domingo se vé las caras con el equipo que le vio nacer como futbolista, el Racing, “un partido especial como lo serán siempre los que me enfente a él”.

Valle, ausente por sanción en el encuentro del sábado anterior en Murcia, marcó el primer gol del Recre en el amistoso con el Bravos do Maquis. A su término reconoció esa motivación que le supone enfrentarse a su ex equipo, si bien ahora mismo está centrado en el Decano. “Lo que importa es que ganemos otros tres puntos”, indicó el cántabro, que reconoció que “estamos atravesando una dinámica buena y lo que queremos es que continúe a ver si podemos sumar tres triunfos seguidos”.

El Recre se ha metido de lleno en la pelea por la zona de promoción de ascenso, aunque Jonathan Valle, haciéndose eco del sentir generalizado de todos los componentes del plantel albiazul, remarcó que “todavía queda mucha Liga, muchos puntos por disputar, pero es positivo estar ahí arriba en la lucha con los equipos que quieren ascender”. Para el cántabro “el Recre debe ir partido a partido, para que cuando queden diez jornadas estar bien posicionados”.