HBN. Cuenta atrás para las Fiestas de San Antonio Abad en Trigueros, donde desde el pasado 26 de diciembre se encuentran los cochinos del Santo, que este viernes 6 de enero recorrerán las calles de Trigueros al son de la flauta y el tamboril. De este modo, y como marca la tradición, el municipio despide la Navidad y comienza a preparar las fiestas patronales de finales de enero.
Como cada año, representantes del Ayuntamiento de Trigueros y de la Comisión del Santo acudieron a la finca de Majomalejo, en el término municipal de Gibraleón, para elegir a los animales durante una jornada de convivencia de preparación de las próximas fiestas de San Antonio Abad 2017. Los elegidos son magníficos ejemplares, pues la media de los cinco cerdos es de 15,5 arrobas, según ha explicado el concejal de Medio Ambiente y Agricultura de Trigueros, Benjamín Pulido.
Este paseo matutino del 6 de enero se repetirá de forma sucesiva hasta las fiestas, donde se llevará la tradicional rifa en la puerta del Ayuntamiento de Trigueros. Incluso, los cochinos son trasladados a las localidades vecinas.
Festividad de San Antonio Abad. La procesión, que comienza el domingo al medio día con la «entrega» ritual de la imagen del Santo Patrón al pueblo por parte del Alcalde, está en la calle más de 30 horas sin interrupción.
San Antonio Abad recorre todo el pueblo parando en las casas, donde encuentra sus puertas abiertas para recibirlo.
En las famosas «tiradas del santo» se lanzan, desde ventanas y balcones, todo tipo de alimentos, que son recogidos por las personas que siguen la procesión. Son esperadas especialmente las «tiradas» que realizan determinadas familias de la localidad, así como la del Ayuntamiento.
Especialmente emotiva es la visita del Santo al cementerio, en la madrugada del domingo al lunes. El jolgorio y la algarabía que acompaña al Santo se convierte en un respetuoso silencio, roto tan sólo por el sonido de las campanillas del paso de plata que porta la imagen del Patrón.
Antes de estos momentos, tan especiales para los triguereños, destaca la tradicional bendición de los animales y la Procesión de Tercia, de gran solemnidad. Igualmente reseñables son el traslado, las vísperas del sábado y el regreso a la capilla del lunes, donde no falta la original «escapada».
Durante todo el mes de enero Trigueros vive el preámbulo de su fiesta grande. Repiques diarios de campanas, novenas, los tradicionales paseos de cerdos que se rifarán al término de la fiesta y las hogueras conocidas como «las Candelas» son la estampa habitual de Trigueros en estas fechas.