Redacción. El Teatro Isabel la Católica de Granada acogerá mañana la gala de entrega de premios de la VIII Bienal Flamenca de la ONCE, que este año rendirá homenaje al maestro guitarrista Pepe Habichuela. La cantaora almonteña Rocío Belén Cuesta, Rocío Belén Flamenco de nombre artístico, el guitarrista granadino Israel Gómez y el cantaor cordobés Antonio José Mejías, como artista don discapacidad, serán los premiados de esta edición, que contará con la actuación de Juan Habichuela Junior como artista invitado.
El alcalde de Granada, Francisco Cuenca, asistirá a esta gala, que presentará la periodista de Canal Sur Televisión, Silvia Sanz. La ONCE premia cada dos años, coincidiendo con la celebración de la Bienal de Flamenco de Sevilla, a los jóvenes valores al cante. La última, que homenajeó al maestro Fosforito, tuvo lugar en 2018 ya que en 2020 no pudo celebrarse por la pandemia.
En colaboración con el Instituto Andaluz de Flamenco, la ONCE rendirá homenaje en esta edición al guitarrista gitano José Antonio Carmona Carmona, Pepe Habichuela, por su trayectoria artística. Granadino del Albaicín, Pepe Habichuela es el patriarca de la saga de Los Habichuela, iniciada por su abuelo ‘Habichuela Viejo’ y continuada por su padre José Carmona; sus tres hermanos, Juan, Carlos y Luis; su hijo José Miguel y sus sobrinos Antonio y Juan José.
Sus inicios artísticos arrancaron tocando la guitarra en el Sacromonte granadino. A los 20 años se trasladó a Madrid donde compartió cartel con artistas de la talla de Camarón de la Isla, Enrique Morente o Juanito Valderrama. Y de ahí saltó a Europa y América consolidando una brillante carrera como solista. En 2018 recibió la Medalla de Oro al Mérito en las Bellas Artes.
El Instituto Andaluz del Flamenco aportará como artista invitado al guitarrista Juan Habichuela Junior, sobrino nieto de Pepe Habichuela e hijo de Juan Habichuela, que realizará también una glosa de su tío abuelo.
Los premiados 2022
Rocío Belén Flamenco, se crio entre los fandangos de su abuelo paterno, y a los 8 años inició su formación de este palo flamenco. Desde entonces ha ido sumando reconocimientos como el premio joven de cante jondo de Mairena, premio Fundación Cristina Heeren, o el del Certamen de Saetas Ciudad de la Unión. Con un flamenco que mezcla pureza y vanguardia ha compartido escenarios con Pedro El Granaino, María Terremoto o Rocío Márquez entre otros, y recibido clases de José Tomasa, Esperanza Fernández o Juan José Amador. Actualmente, Rocío Belén Flamenco participa en numerosos festivales y peñas flamencas por toda España y sigue estudiando y aprendiendo con Antonio Rodríguez ‘El Jaraqueño’, en su Escuela de Cante en la localidad onubense de Aljaraque. El jurado, reunido en Granada, ha acordado otorgar el premio al cante a Rocío Belén Flamenco por su madurez y equilibrio en la voz. La cantaora presentó al concurso una granaína y media, Soleá Apolá y unos tangos.
En la categoría de guitarra, Israel Gómez recibirá el primer premio de esta VIII edición por su técnica superior y la interpretación. Israel, 24 años, se ha criado y empapado del flamenco desde sus inicios, con la escuela granadina como sello distintivo con una técnica y un sonido excelentes desde edad temprana. Ha compartido escenario con guitarristas de la talla de Manolo Franco, Diego del Morao, Miguel Ángel Cortés y Pedro Sierra y ha acompañado y compartido cartel con grandes como El Pele, José de la Tomasa, Esperanza Fernández o Capullo de Jerez entre otros muchos.
Gómez ha sido primer premio nacional del Certamen de guitarra flamenca de Melchor de Marchena en 2019 y primer premio nacional de guitarra flamenca de Sevilla en 2018, entre otros galardones. Ha ganado por la interpretación de un tango y unas granaínas, compuestas por él.
Y en la modalidad de artista con discapacidad, la Bienal de la ONCE reconoce al cantaor cordobés, Antonio José Mejías, vendedor de la ONCE, apadrinado por Fosforito en 2018 ocho años después de que le entregara el premio del Concurso Nacional de Flamenco de Córdoba en 2010. Mejías presentó al certamen una granaia y media granáina por un lado y varios cantes con una temporera de Montilla, una soleá apolá, unas malagueñas y unas bulerías. “Ahí estaremos en Granada para demostrar que en el mundo del arte, al igual que en todos los gremios, debe haber igualdad”, ha dicho tras conocer su distinción.
Por su parte, el premio el mejor artista con discapacidad,Antonio José Mejías Portero (Montilla, 1979), inició su afición al flamenco con solo cuatro años. Con 16 empezó a cantar en el Coro Rociero Virgen de Belén de Montilla, donde destacó por cantar solos. Su primera actuación de flamenco fue en su pueblo, Montilla, en el barrio de la Escuchuela de Cerrillo de San José. Su tía materna Dolores Portero, cantaora flamenca y de canción española, encendió esa pasión por el flamenco que le ha acompañado desde entonces.
En 2018 el maestro del cante cordobés Antonio Fernández Díaz, Fosforito, lo apadrinó como artista, como reconocimiento a su trayectoria en el mundo del Arte Flamenco, en un acto celebrado en el Centro Flamenco Fosforito, en la Posada del Potro de Córdoba. Dentro de su trayectoria como cantaor flamenco ha participado en numerosos festivales y actuaciones en peñas flamencas. En su trayectoria artística destaca su participación en el espectáculo ‘Cierra los ojos y mírame’ del bailaor y precursor del flamenco inclusivo, José Galan, presentada en la Bienal de Flamenco de Sevilla, espectáculo ‘Pinceladas’ presentado en la Noche Blanca del Flamenco de Córdoba.
Granada, sede del flamenco
Desde 2006, la ONCE celebra siempre en Granada su Bienal Flamenca reivindicando el flamenco como identidad de Andalucía y como instrumento de inclusión de las personas con discapacidad en la sociedad. En la Bienal podían participar los artistas flamencos, en la modalidad de cante o toque, menores de 35 años (nacidos después del 15 de febrero de 1987). Para los artistas con discapacidad, no existe límite de edad, aunque deben acreditar su certificado de discapacidad.
El concurso establece un premio de 2.011 euros para las modalidades de cante, guitarra y artista con discapacidad en la categoría de cante o de guitarra.
En la categoría de cante debían interpretar al menos tres cantes, uno por ‘granaína y media granaína’, uno clásico (seguiriyas, soleás, cabales, serranas, livianas, tonás, martinetes, deblas, cañas o polos) y otro de libre elección. En la modalidad de toque debían presentar dos, un ‘solo’ de guitarra y un acompañamiento al cante, a elegir.
El jurado, presidido por el delegado territorial de la ONCE en Andalucía, Ceuta y Melilla, Cristóbal Martínez, ha estado compuesto en esta ocasión por el director de la ONCE en Granada, Alberto Morillas, el consejero territorial Fermín Navarro, el escritor y crítico flamenco de Ideal de Granada, Jorge Fernández Bustos, el guitarrista flamenco, Isidoro Pérez Fernández, el periodista, flamencólogo y miembro de la Cátedra de Flamencología de Jerez de la Frontera, Juan Antonio Ibáñez Jiménez, y el cantaor flamenco, Arturo Fernández Maldonado.
En su última edición, la Bienal Flamenca de la ONCE de 2018 premió a la cantaora de El Viso del Alcor Vanessa González y al guitarrista de Bormujos David Campaña, además del guitarrista malagueño, Sergio Molido, como artista con discapacidad y contó con la actuación como artista invitado con la actuación de José Galán, precursor del flamenco inclusivo y Premio Solidarios ONCE 2016.
La ONCE organiza su Bienal Flamenca en colaboración con la Consejería de Turismo, Cultura y Deporte de la Junta de Andalucía, a través del Instituto Andaluz del Flamenco, del Ayuntamiento de Granada y de la RTVA.