Redacción. Mama Juana en senior masculino y las Cocodrilas en femenino, fueron los campeones de esta novena edición. Los anfitriones del Bifesa Tartessos se llevaron la Copa Plata en el duelo onubense. Las categorías inferiores, grandes protagonistas en la jornada matinal. Hubo calidad, entretenimiento, pero sobre todo un clima espectacular en esta novena edición que desde la organización proclaman ya como la mejor hasta el momento a las puertas ya de la que será el décimo aniversario el próximo año.
El rugby fue el dominante durante toda la jornada con más de 10 horas de juego ininterrumpido en la playa de la Canaleta pero, sin duda, el ambiente logrado entre clubes, participantes y público fue el gran protagonista tal y como destacaron todos los agentes implicados y por las sensaciones transmitidas durante el día.
La novena edición arrancó a las 10.00 horas con la participación de las distintas categorías inferiores, desde sub8 hasta sub18 pertenecientes a los clubes del Bifesa Tartessos de Huelva, Plasencia y la Estación de San José de la Rinconada, así como varios jugadores de distintos clubes y aficionados que también quisieron participar. Mientras los más pequeños estrenaban en campo junior, primero en la historia del campeonato, los más mayores hacían lo propio en las pistas centrales compaginando los encuentros con los veteranos, quienes volvieron a poner color y diversión en la mañana onubense con la posterior victoria de los sevillanos Mama Juana.
A partir de las 13.00 horas, arrancaron las categorías senior masculina y femenina en las que desde el primer encuentro se comprobó que en esta edición, la búsqueda del título no iba a ser tan sencilla como en otras ocasiones. En la parte masculina, los hispalenses de San Jerónimo y Mama Juana así como onubenses del HRU y los anfitriones del Bifesa Tartessos, fueron los principales dominantes como se demostró tas la finalización de la primera fase, en la que los cuatro conjuntos lograron el pase a los cruces por el título mientras que Crac de Córdoba y Correcaminos de Granada, terceros en sus respectivos grupos, obtuvieron plaza para la copa bronce. En el lado femenino, Cocodrilas y Gacelas lograron imponerse en sus respectivos triangulares y sellar su billete para una final más que ajustada.
Según se acercaban los cruces por el título, el perímetro del torneo y sus gradas se cubrieron de curiosos que no querían perderse el espectáculo que aún quedaba por lidiar. El primero de los duelos fue la final de la Copa Bronce que fue a parar al CRAC no sin dificultad ante sus rivales granadinos con un definitivo. 5 – 2. Ya en la Copa Plata, el club granadino se resarció de sus rivales con la victoria de las Chochocaminas por 8 – 2; mientras que en el lado masculino deparaba un duelo onubense de lo más emocionante en el que los organizadores se impusieron por poco a sus paisanos del HRU por 4 -2.
Pero sin duda la emoción estuvo en la final de la Copa Oro, primero con el duelo entre hispalenses de Cocodrilas y Gacelas donde las primeras demostraron porqué disputan la primera categoría del rugby nacional logrando llevarse nuevamente un título que si bien tuvieron que pelear hasta el último segundo para vencer por 5 a 4. El broche al torneo llegó con el duelo entre San Jerónimo y Mama Juana, dos viejos conocidos del torneo que volvían a repetir con la intención de alzarse con el título siendo para los segundos tras un partido de espectáculo y potencia que hizo vibrar a la grada en todo momento. Los Mama Juana se impusieron por 5 a 2 y lograron llevarse esta novena edición.
Tras la conclusión, se realizó la tradicional entrega de trofeos en el Mosquito Club donde los cánticos y humor se entremezclaron con la solemnidad que da llevarse un torneo que es ya una seña de identidad más del verano de Punta Umbría.
