Ana Rodríguez. El sábado, día 6 de julio, es su gran día. Los actores amateur de la Asociación Sociocultural Amigos del Teatro, Amitea, escenificarán sobre las tablas del Castillo de Niebla, dentro de la programación previa al comienzo de la XXIX edición del Festival de Teatro y Danza, una versión muy innovadora de un clásico de la literatura universal, Romeo y Julieta, de William Shakespeare.
Los nervios ya recorren la piel de los 48 jóvenes de entre 14 y 30 años que traerán Verona hasta el municipio onubense este fin de semana. La obra, convertida en musical tras dos años de duro trabajo, permitirá demostrar al público las cualidades para cantar, bailar y actuar de los integrantes de esta Asociación llena de talento.
Como apunta la directora del montaje, Ángeles Romero, “es un orgullo para nosotros que en ésta, su XXIX edición, hayan decidido invitarnos a participar en el Festival. Estamos convencidos de que sacaremos grandes beneficios personales de nuestra representación”.
Amitea nació hace tres años, cuando dos amigos que habían trabajado juntos decidieron, impulsados por dos jóvenes de la ahora Asociación, crear algo diferente en Huelva relacionado con el teatro, con las artes, con la convivencia entre jóvenes y adultos y con la solidaridad. La idea fue tomando forma y el 10 de octubre del 2010 Amitea fue instituida como una asociación sociocultural.
Luego, todo fue crecer. Poco a poco la entidad fue desarrollándose y a ella se sumaron personas que tenían en común su amor por las artes escénicas y que compartían los mismos objetivos que los miembros fundadores: divulgar el teatro clásico entre la población juvenil, demostrar que los jóvenes tienen unos valores que en ocasiones no ve la sociedad y, sobre todo, la solidaridad. Este último punto es clave, es el hilo conductor de la Asociación y desde la misma intentan mantenerlo de dos maneras: destinando recaudaciones de sus actuaciones a asociaciones sin ánimo de lucro para ayudarlas a respirar mejor y saciando la necesidad de sonrisas y cariño allá donde las encuentran como, por ejemplo, los centros de mayores y de niños.
A cambio de poner a disposición de los demás su trabajo y su tiempo, estos jóvenes, actualmente un total de 50 de entre 10 y 30 años, obtienen como beneficios el aprendizaje, la confianza y la satisfacción. El primero viene un poco de la mano de la citada solidaridad y de la base de compartir que sostiene a la Asociación. Así, aunque en Amitea son autodidactas, los miembros especializados en una disciplina artística (canto, baile, actuación, etc.) enseñan y aconsejan a los demás, además de echar mano cuando los necesitan a consumados profesionales. Por ejemplo, en el caso de Romero y Julieta, Amitea ha contado con la colaboración de una de sus fundadoras, Manoli Cerrejón, que recorrió la provincia de Huelva con grandes obras de teatro.
En esta dinámica colaborativa también tienen su lugar los familiares de los asociados que, de manera desinteresada, ayudan en la confección de vestuarios, decorados, etc. Pero sólo echan una mano, ya que absolutamente todo ha sido previamente ideado, diseñado y elaborado por los jóvenes, desde el diseño de vestuario a la propia adaptación de los guiones, y siempre tomando las decisiones de manera democrática. Ello pone de manifiesto el compromiso de estas personas, que no sólo pertenecen a Huelva capital, sino también a diversos municipios onubenses como San Juan del Puerto, Aljaraque, Gibraleón, Niebla, Lepe y hasta Sevilla. Una diversidad de localidades que, a su vez, enriquece la diversidad cultural del grupo.
Para ensayar, Amitea emplea de forma esporádica su propia sede, ubicada en la Asociación de Vecinos de La Hispanidad, aunque donde suelen hacerlo con regularidad, cada fin de semana, es en la Asociación de Vecinos del Molino, a la que siempre agradecen su desinteresada colaboración.
La Asociación centra su repertorio en el teatro clásico, en las obras de los grandes maestros por todos conocidos, aunque de los que no siempre se ha tenido la oportunidad de ver representadas sus obras más famosas.
En este sentido, Romero comenta que “el teatro es como la vida. Siempre tenemos mucho que aprender de nuestros mayores. Y, ¿hay algo más bonito que aprender de la mano de Dickens o Shakespeare? Al igual que el teatro de la Andalucía profunda de García Lorca o los hermanos Álvarez Quintero. Vivencias de nuestros abuelos llevadas a cabo por jóvenes. ¡Todo un espectáculo!”
En esta línea, los artistas de Amitea han llevado a escena con anterioridad la aplaudida obra de Charles Dickens Cuento de Navidad, que el Gran Teatro de Huelva acogió en las Navidades de los años 2011 y 2012 –y que probablemente acogerá en las de 2013-, así como coreografías, tributos a los grandes musicales de Broadway, bailes latinos, etc.
Es en estas actuaciones donde los asociados transmiten su pasión por la música, el baile y la interpretación, desembocando esa percepción en que, al terminar las representaciones, son muchos los jóvenes que se interesan por la iniciativa cultural y solidaria con intención de sumarse a la misma.
Sobre los intérpretes de Amitea, Ángeles Romero destaca que “hemos tenido la suerte de tener un elenco juvenil sano, dinámico y con buen corazón. Y es que somos una gran familia y como tal nos comportamos, algunos con sus roles ya definidos. Todos creemos en el respeto y la tolerancia y nuestros jóvenes ya vienen con eso aprendido de casa”.
A sólo unas horas de que se levante el telón, la directora del montaje hace un llamamiento a la sociedad onubense para que “confíe en los jóvenes de nuestra provincia, que se quite los prejuicios y estereotipos creados” y también les incita a que “vayan al teatro, que inviertan en cultura y en solidaridad”.
Así pues, si tienen oportunidad, acudan a Niebla este sábado, 6 de julio, a ver Romeo y Julieta. Si no, no se preocupen, Amitea tiene previsto volver a llevar a escena la obra de Shakespeare, esta vez en la capital onubense, el próximo otoño.
