Mari Paz Díaz. Corría el año 2000 cuando dos cineastas onubenses, hasta ese momento desconocidos para el gran público, copaban todos los informativos nacionales al alzarse con el Goya al Mejor Cortometraje de Animación por ‘Los Girasoles’, un trabajo con el que los hermanos José Lagares y Manuel Lagares, naturales de La Palma del Condado, ponían de manifiesto su valía en materia cinematográfica. No en vano, estos onubenses se convertían así en los primeros andaluces en lograr un Goya en Cortometraje, reconocimiento que, además, recibían de manos del dibujante y humorista Forges en la gala de la 14 edición de los Premios Goya. Un momento que puedes recordar en el siguiente enlace:
‘Los Girasoles’ narra la historia de Ka y Sun, una pareja que se declara su amor e intenta dar el gran salto en busca de su libertad. Un bonito trabajo de estos onubenses, al que le han seguido numerosas historias pensadas para la gran pantalla. Porque los Hermanos Lagares son incansables, unos auténticos enamorados del séptimo arte desde niños. Su interés por el cine, de hecho, comenzó desde muy pronto. Hay que recordar que José nació en 1960 en La Palma del Condado, mientras que Manuel, aunque se siente plenamente onubense, nació dos años después, en 1962, en Barcelona, debido a que sus padres emigraron a Cataluña a principios de los sesenta por motivos laborales.
Este hecho ha motivado que la mayor parte de sus vidas la han pasado en tierras catalanas, pero, tal y como nos confiesa Manuel Lagares, «nos consideramos totalmente de Huelva, porque la mitad del año estábamos en La Palma. Yo nací en Barcelona, pero fue por algo totalmente circunstancial, porque mis padres emigraron, pero yo me considero de La Palma del Condado, choquero. Y toda mi familia de es de aquí, en Huelva y La Palma. Es cierto que tengo una parte de catalán, pero mi corazón y mi mente son choqueras. De hecho, siempre estábamos deseando que llegaran las vacaciones para venirnos a Huelva».
Fue en la ciudad condal donde comenzaron a ver cine, mucho cine. Según recuerda Manuel, «nos encantaba ver todo tipo de películas, de diferentes géneros, en el cine de nuestro barrio, Trinidad, y en nuestra propia casa. Y fue así cómo surgió nuestra afición a este mundo. Tuvimos claro desde el principio que nos queríamos dedicar a esto. Así que, muy pronto, comenzamos a querer hacer nuestras propias películas. Recuerdo que empezamos con una Super 8, una cámara que nos regaló mi padre, después de comprarla en Ceuta. Y fue muy gracioso, porque tuvo que pasar la aduana, para lo cual tuvo que pagar 5.000 pesetas, de las de entonces, con lo que costó más la aduana que la propia cámara».
Para sus primeros trabajos audiovisuales contaron con compañeros y amigos, pero, «como muchos eran muy informales, pensamos que lo mejor era decantarnos por la animación», nos cuenta Manuel, que asegura que «como entonces no había ninguna formación al respecto, tuvimos que aprender nosotros mismos de forma totalmente autodidacta. Así que empezamos a trabajar con plastilina a modo de prueba. Fue increíble, aunque nos suponía mucho esfuerzo, puesto que para hacer un segundo teníamos que trabajar durante dos o tres horas. Y es que no teníamos ningún tipo de estructura, sino que comenzamos metiendo las figuras de plastilina en palillos de diente. Pero, cuando vimos la plastilina en movimiento, nos pareció magia. Luego, para ‘Los Girasoles’, utilizamos pequeños alambres».
Un trabajo minucioso que supuso que para la realización del cortometraje premiado con el Premio Goya tuvieran que emplear dos años, en los que dedicaban doce horas diarias a prepararlo. Además, su presupuesto fue de 25 millones de pesetas, convirtiéndose entonces en el corto más caro de la historia del cine español. Pero, aseguran, que, aunque no tenían pensado ganar nada, el resultado mereció la pena, más aún cuando se alzaron con el Goya. Aquel Goya, de hecho, supuso un antes y un después en su carrera profesional. Según afirman, «el ganar el Goya fue increíble, porque, a partir de ese momento, los profesionales del cine te respetan y te escuchan más. Puedes tener un diálogo, al menos, con los productores. Otra cuestión diferente es que te financien, claro». Además, al año siguiente, en 2001, ‘Los Girasoles’ fue preseleccionado al Oscar.
Pero no fue el único logro de estos cineastas onubenses, porque, además, en 2003, volvieron a ser pioneros después de que su título ‘La Jugada’, protagonizado por Paxi Disqué y Paco del Río, fuera preseleccionado de nuevo para el Oscar, esta vez en la categoría de Cortometrajes de Ficción, con lo que se convertían en los únicos que han estado en la antesala del famoso premio de la meca de Hollywood en tres apartados distintos, puesto que luego también se ha añadido la de Largometraje. De este modo, demostraron que no son sólo directores de cine de animación, sino también de cualquier género de ficción.
Desde entonces hasta ahora, los Hermanos Lagares no han parado de trabajar, llevando sus producciones a diferentes festivales, en los que han conseguido unos 300 premios, incluyendo, entre otros, el Festival de Cannes. Además, entre otras iniciativas, crearon la primera Escuela de Animación en Plastilina de España en Barcelona, un centro de estudios que estuvo en funcionamiento entre 2000 y 2014, obteniendo fama mundial por la utilización de la técnica del stopmotion. Entre sus alumnos salieron grandes profesionales del sector, como una chica llamada Ruth Villamagna, que ha conseguido llegar a Hollywood, donde ha trabajado con Tim Burton y Guillermo del Toro, y que, en la actualidad, se encuentra en Inglaterra.
Ahora, los Hermanos Manuel y José Lagares están viviendo en La Palma del Condado, donde se han afincado desde hace cinco años, por lo que han regresado a su localidad natal. Y, desde aquí, desde Huelva, no paran. Entre otros proyectos audiovisuales, en este tiempo, los cineastas palmerinos han puesto en marcha títulos como Whatsapps (2017), un trabajo premiado en el Festival de Cine Iberoamericano de Huelva. En este caso, se trataba de una historia de denuncia sobre la tiranía de los móviles.
Muy llamativo ha sido también su corto titulado ‘Los duros de Bronson’, trabajo con el que han querido rendir un homenaje a los actores duros de Hollywood, como Charles Bronson, Clint Eastwood, Gene Hackman o Bruce Lee, un corto con el «volvimos a la animación con plastilina y en el que participaron los alumnos de la Escuela de Barcelona. Un proyecto que ha supuesto 23 años de trabajo, dado que lo hicimos en el marco del centro educativo, con los estudiantes», concreta Lagares.
Los Hermanos Lagares también han sido productores de ‘Víctimas de Guernica’, nominado al Goya de Mejor Cortometraje de Animación en 2016. Un corto sobre las víctimas del conflicto armado de El Salvador a través de ‘El Guernica’ de Pablo Picasso, que fue realizado por un alumno suyo. Todo ello, sin olvidar, ‘El Oscar’, un documental dirigido por Isabel Vilallonga y José Lagares, que cuenta con un plano secuencia de 26 minutos de grandilocuencia del dibujante Óscar Nebreda, una de las personalidades más interesantes y provocadoras de nuestro país, miembro de la conocida revista El Jueves.
Como se puede comprobar, Manuel y José Lagares son incansables cuando se trata de crear en el cine. Siendo así, Manuel nos cuenta que «este año hemos diseñado, por lo menos, cuatro proyectos. Uno con una denuncia hacia los pederastas, otro contra el maltrato y otro con una historia de amor, sin olvidar el documental ‘El niño ya no está de luto’, realizado con motivo del 50 aniversario de la película ‘La niña de luto’, rodada en Huelva».
De forma paralela, los Hermanos Lagares han querido hacer su propia aportación a su tierra natal, a La Palma del Condado, con la creación de una escuela de cine palmerina, sin olvidar otros cursos en la Sociedad Cultural Casino de Rociana, al tiempo que son profesores de la Escuela de Cine Manuel Summers –Fundación Vedruna-, una entidad ubicada en Sevilla, que apuesta por una enseñanza del medio audiovisual y del género cinematográfico desde la pasión y el entusiasmo, una experiencia de la que «nos sentimos muy satisfechos, estamos muy contentos con ello».
En general, están disfrutando mucho con su experiencia docente en La Palma, un curso que fue clausurado en una pequeña gala el pasado 2 de junio en el Teatro España, donde se pudo comprobar el trabajo realizado por los chavales. «Está siendo una experiencia muy bonita, porque estamos teniendo muchas recompensas, al tiempo que estamos descubriendo grandes talentos, mientras se divierten. Por ejemplo, nos ha impresionado la joven Lucía, que con tan sólo quince años es una gran actriz con un futuro enorme en el cine español. Así que vamos a apoyarla, porque cuenta con un talento y un carisma innato. A nosotros nos ha superado. Y, del mismo modo, puedo hablaros de Manuel, una gran promesa en la dirección cinematográfica».
Los Hermanos Lagares rodarán una nueva película en julio. Con esta amplia trayectoria detrás, no es extraño que José y Manuel continúen poniendo en marcha nuevos proyectos. Y, de hecho, adelantan a Huelva Buenas Noticias que a principios del próximo mes de julio ofrecerán una rueda de prensa para dar a conocer una película que rodarán en varios escenarios andaluces -todo parece indicar que también incluirá a la provincia de Huelva-, que estará protagonizada por la actriz María José Alfonso, muy conocida en el cine español por su papel, junto a Alfredo Landa, en ‘La Niña de Luto’. En total, serán cinco días de rodajes para esta película con la que están muy ilusionados.
Con todo ello, y mientras esperamos la presentación de esta película, Manuel Lagares nos deja un mensaje final en el que pide «a las instituciones públicas de Huelva que apoye a su gente. Y no lo decimos ya por nosotros, sino porque hay mucha gente que vale, en general. No esperemos a que vengan del extranjero a decirnos que somos muy buenos. Porque en esta tierra hay mucho arte. Y tenemos que apoyarlo, ya sea en el deporte, en el cine, en la literatura…, se lo merecen. Por eso, les pedimos que se abran más».
En definitiva, estos palmerinos pueden sentirse orgullosos por el enorme currículo que tienen a sus espaldas, como es el ser miembros de la Academia de las Artes y Ciencias Cinematográficas de España, miembros del Gremio de Directores de Cine de la Academia, el contar con el Goya al Mejor cortometraje de animación, por ‘Los girasoles’, dos nominaciones a los Premios Goya, tres preselecciones a los Premios Goya (Animación, Ficción y Documental), dos preselecciones al Oscar de Hollywood (en Largometraje y Cortometraje de Animación) y más de 300 premios nacionales e internacionales en sus más de 50 producciones. Trayectoria por la que han recibido, además, la Medalla al Arte, Cultura y Educación de La Palma del Condado. Reconocimientos a los que, estamos seguros, pronto se unirán muchos más. Enhorabuena.
Un reportaje que Manuel Lagares ha querido dedicar
a su madre Anita y a su pareja, Mari Paz.
