HBN. ¿Dónde está el secreto para que una empresa familiar continúe en la senda del crecimiento con el paso de una generación a otra? “La clave es precisamente su carácter familiar, el trabajar juntos nos ha unido más si cabe y eso nos ha hecho más fuertes”, explica a Huelva Buenas Noticias José Ramón Muriel, quien nos atiende acompañado por su hermana María del Mar Muriel en su despacho en la sede onubense de esta compañía de Huelva con presencia internacional.
Ellos, junto a un tercer hermano, Sergio Muriel, están en la primera línea de la firma Baltimar (Herederos de Ángel Muriel), empresa armadora de buques de pesca que, como desde hace cerca de medio siglo, continúa liderando Josefa Moreno Benítez, ejemplo de superación y capacidad. Más conocida como Pepita Muriel, la onubense rompió moldes en la década de los setenta haciéndose un nombre a base de trabajo y sacrificio en un sector, el pesquero, tradicionalmente masculino. Tras el fallecimiento de su marido en el año 1977, y con cuatro hijos menores, Pepita Muriel tomó las riendas de un negocio, al que pronto se incorporaría el hijo mayor Ángel Muriel -quien falleciera en 2014 a casusa de un cáncer- y, posteriormente el resto de sus hijos, logrando, no solo sacar a flote la firma sino convertirla en un referente en el sector.
Con una flota de nueve buques congeladores, incorporándose recientemente a la compañía el que lleva por nombre ‘Ciudad de Huelva’, Baltimar comercializa, principalmente en la provincia onubense, gambas, langostinos, alistados y cangrejos, desde donde, posteriormente, la empresa los distribuye por mercados nacionales e internacionales. Cuestionado por el producto estrella, para José Ramón Muriel no hay duda alguna: «la gamba de Huelva es la referencia de la empresa«. Protagonista de nuestra tradición culinaria, la «gamba de Huelva no es comparable por su calidad con la de ningún otro lugar, hablamos de un producto autóctono, muy bien visto y reconocido internacionalmente, que no tiene competencia«, señala José Ramón Muriel.
Orgullosos de sus raíces, desde Baltimar (Herederos de Ángel Muriel) ejercen de embajadores de Huelva en el exterior: concretamente en las costas africanas de Mauritania, Guinea Bissau y Senegal por las que sus buques navegan y donde tienen una sociedad Hispano- Senegalesa con el nombre de Hisepec, contando con unas oficinas en el puerto de Dakar con una superficie de 1.500 m2 de parcela y 500 m2 edificados en tres plantas. Así las cosas, Baltimar lleva el nombre de este rincón andaluz por el litoral del continente negro a través de buques «bautizados» como ‘Ría de Huelva, ‘Playa de Huelva’, ‘Sierra de Huelva’, ‘Puerto de Huelva’, ‘Costa de Huelva’, y el recientemente incorporado ‘Ciudad de Huelva’. Apadrinado éste último por María del Mar Santamaría Muriel, nieta e hija de la familia Muriel, su botadura y salida tenía lugar el pasado martes, 14 de noviembre, desde el Puerto de Avilés, Asturias.
De cara al futuro, desde Baltimar se muestran optimistas. «Hablamos de un sector potente, está saneado y con buenas proyecciones», nos cuenta José Ramón Muriel. «Huelva es el puerto por excelencia del comercio de mariscos de Europa, solo nos falta creernos lo que tenemos«, añade.
La experiencia acumulada y la calidad de sus productos son señas de identidad de la empresa de buques de pesca Baltimar, firma que, más allá de su actividad en el sector pesquero, destaca además por la importante labor que desarrolla en pro de la sociedad onubense a tráves de la Fundación Ángel Muriel, capitaneada por Pepita Muriel.
Esta Fundación, entidad sin ánimo de lucro con sede en Huelva, dedica su nombre a la memoria de Ángel Muriel, quien fuera director de Baltimar, presidente de la Asociación Nacional de Armadores de Buques de Pesca de Marisco (Anamar) y miembro del Comité Ejecutivo de la Federación Onubense de Empresarios, fallecido a causa de un cáncer en el año 2014. Entre los objetivos de la misma, destacan fundamentalmente apoyar a las personas a las que se les ha diagnosticado algún tipo de cáncer y a sus familiares, así como desarrollar acciones que permitan avanzar y actuar de forma permanente contra el cáncer. En esta línea, con el fin de fomentar el interés investigador en el colectivo médico y estimular el desarrollo de trabajos en el ámbito oncológico, la Fundación convoca el Premio Nacional a la investigación médica en el ámbito oncológico ‘Fundación Ángel Muriel’.
Esta empresa onubense constituida en 1.963 por Ángel Muriel Santana, y que actualmente dirigen su viuda e hijos, esperan incorporar una tercera generación en los próximos años.
