C. Botello / Lepe. Un punto de oro. Que tiene que saber a oro. Y es que el San Roque de Lepe, titubeante hasta el momento, se trabajó un empate más que merecido (2-2) ante un Écija Balompié, que se plantó en el Ciudad de Lepe como equipo invicto, y que sólo pudo ser el dominador de la contienda en el segundo tiempo, a raiz de quedarse el cuadro de Lepe con un jugador menos por expulsión de Álex Hornillo.
Quiso el San Roque darle una alegría a sus incondicionales, huérfanos de buenos resultados y muy preocupados por la marcha del equipo. Y a fe que el conjunto de David Torres ‘Chiqui’ estuvo cerca de darle alegrón a su gente. Esos imponderables del fútbol lo evitaron.
Con ganas, empuje y mucho corazón el San Roque plantó cara desde el inicio al Écija, que si bien tuvo el control del juego en los primeros compases, apenas si inquietó a Bocanegra. Bastó un acercamiento con enorme intención del cuadro sanroquista, que finalizó con un buen disparo de Nico Gaitán -paró Fermín- para que el partido comenzara a decantarse del lado local. Porque esa jugada fue el detonante del mejor hacer sanroquista, que vio premiado su abnegado esfuerzo con el 1-0, después de que Higor Rocha diera un enorme pase a la espalda de la defensa astigitana, del que se aprovechó Pablo Aguilera para marcar.
Sin embargo el San Roque de este año, sin estar del todo bien, es un equipo al que le penalizan sus errores. Cometió uno casi a renglón seguido del gol, que pudo tener funestas consecuencias. Bocanegra evitó el gol en esa acción, que acabó en córner. Del que vino el primer empate, obra de Juan Delgado.
Con el equilibrio en el marcador los dos equipos dieron rienda suelta a su juego de ataque y las dos porterías pasaron por sus apuros. En esta especie de ruleta rusa salió mejor parado el San Roque, que volvió a cobra ventaja gracias a un gol de Juanma a cuatro minutos del intervalo.
Qué hubiera podido pasar en el partido si el San Roque aguanta con los once hombres en el segundo tiempo es algo que ya no se sabrá. Lo que es seguro es que Álex Hornillo vio la segunda amarilla en el minuto 51, y el guión del partido comenzó a cambiar.
El Écija Balompié, con un hombre más, se fue arriba en busca de la igualada, ante un San Roque que intentó defenderse como pudo. Aguantó el tipo un cuarto de hora, el tiempo que tardó el cuadro sevillano en establecer de nuevo la igualada, ahora por mediación de Ezequiel al transformar un penalti.
Mal se le pudieron poner las cosas al San Roque, en inferioridad y con un rival empeñado en darle la vuelta al marcador. Pero en esta ocasión se vio un cuadro sanroquista con oficio, con empaque y con la suficiente entereza como para aguantar de pie las embestidas del Écija, que en botas de David Castro, Ezequiel y Adri Campos trataron por todos los medios de lograr el tercer tanto.
Pero el San Roque se defendió con orden y sin perder la cabeza, y hasta llevó el ¡uy! a los graderíos en un lanzamiento de falta de Lúa casi desde el centro del campo, que no entró de milagro.
No dio mucho más de sí el partido. El San Roque dio por bueno el empate ante un buen equipo, al que le plantó cara y le superó a ráfagas cuando los dos tuvieron once jugadores.
SAN ROQUE DE LEPE: Bocanegra; Álex del Río, Juanma, Álex Hornillo, Fran Ávila; Jorge Vázquez, Nico Gaitán (Camacho, 79′); Gerardo (Lúa, 71′), Higor Rocha, Selu; Pablo Aguilera (Pedro Baquero, 56′).
ÉCIJA BALOMPIÉ: Fermín; Núñez, Alejo, Adri Crespo; Manu Reina, David Castro, Marrufo, Moyita; Juanito; Ezequiel, Juan Delgado (Fran Mesa, 63′).
Árbitro: Medina Martín (colegio gaditano). Expulsó por doble amonestación al local Álex Hornillo (38′ y 51′). Mostró la cartulina amarilla a Jorge Vázquez, Gerardo, Selu, Higor Rocha, Bocanegra, Nico Gaitán, por el equipo de casa; y a Marrufo, Adri Crespo, Manu Reina, Ezequiel, por el cuadro forastero.
Goles: 1-0 (20′) Pablo Aguilera. 1-1 (28′) Juan Delgado. 2-1 (41′) Juanma. 2-2 (65′) Ezequiel, de penalti.
Incidencias: Partido correspondiente a la 7ª jornada en el grupo X de la Tercera División disputado en el Ciudad de Lepe. Alrededor de unos 500 espectadores en las gradas.
