S. D. Serán 14 etapas. 9.ooo kilómetros. Una aventura como reto diario. Pero quien dijo miedo… «Si fuera con miedo no iría». Palabras de Luis Calderay, piloto valverdeño que se estrena este año en el Rally Dakar que comienza el día 5 de enero en la localidad argentina de Rosario. «Riesgos existen cada día, no se puede tener miedo», aseguró el piloto, que conducirá una Yamaha 450.
Luis Calderay se encuentra ya en Rosario realizando las verificaciones y ajustes mecánicos de los primeros días de recepción del Dakar. El debutante andaluz lleva los colores del Recre y la ilusión de toda su vida puesta en este desafío personal que por salud no pudo llevar a cabo en 2012.
«Tengo muchas ganas de empezar», indicó Calderay que tiene un solo reto: «Mi principal y único objetivo es terminar la carrera, no me planteo nada más. Me daré por satisfecho si llego a meta el próximo 19 de enero en Valparaiso», aseguró el valverdeño que, para preparar este exigente compromiso, no ha parado: «He corrido varias pruebas del Mundial de rallies: en Cerdeña, Abu Dhabi, Qatar, la de los Faraones en Egipto, la Baja España, el rally de Marruecos…».
El Dakar tiene algo especial. Se celebre sobre su trazado de siempre partiendo desde París y acabando en el Lago Rosa, o ahora por mor de los imponderables que marca el destino en Suramérica con salida en Rosario y punto final en la ‘Perla del Pacífico’, Valparaiso. El gusanillo le viene a Calderay desde hace tiempo: «Un día haciendo enduro con amigos lo dije y aquí estoy. Todo empezó con Manolo Borrero y su camión, y eso que hubo mucha gente que me intentaron quitar las ganas, tuve detractores, pero como fui terminando carreras como Faraones, entre otros, dejaron de pensar que estoy loco. Conocí a Jordi Arcarons que proporciona asistencia y he acabado en el Team Pedrega», indicó.
El Dakar exige enormes sacrificios, principalmente antes de la prueba: «He entrenado una hora y media o dos horas diarias, corriendo, montando en bici, nadando o haciendo cardio. Estoy física y mentalmente muy fuerte, gracias a mi preparador físico estoy a tope. Llevo tres años preparándome para esto, solo interrumpidos un año a causa de una enfermedad», comentó Calderay que hizo largas distancias de cinco a seis horas de pilotaje en Huelva, Marruecos y Zaragoza. «He tenido un par de carreras para probar la nueva Yamaha 450 porque antes iba con Honda. Estuve probando en el Merzouga para que los problemas que tenga la moto los diera antes y no en el Dakar», recalcó.
Antes de partir para Rosario su amigo Manuel Borrero, que participó con anterioridad en el Dakar en la categoría de camiones, le dio algunos consejos: «Me ha dicho que tenga paciencia, que vaya carrera a carrera. Son muchos días, e hay que ir en función de cómo me vaya encontrando. Espero tener regularidad, e ir subiendo en la clasificación, porque estoy seguro que a medida que vayan pasando los días me iré adaptando e iré cogiendo ritmo”.
Calderay será el primer embajador del Recreativo de Huelva en el año en el que la entidad albiazul celebra su 125 aniversario. “Con la imagen del Decano creo que me convierto en el primer piloto español apoyado por un club de fútbol en la historia del Dakar. Es un orgullo el apoyo, los aplausos y el cariño recibido del Colombino cuando presentamos el casco. Llevaré el escudo del Recre y su 125 aniversario con orgullo», recalcó Calderay que se acordó de todos aquellos que han puesto su granito de arena para que esta aventura fuera una realidad: «Sin esta veintena de amigos y patrocinadores no lo hubiera conseguido. Va por ellos. En Andalucía hay poco apoyo porque nadie tiene experiencia. Hay que tener fe, amigos y presupuesto. Hemos estado luchando hasta el final para lograr patrocinadores».