Antonio Ramos. El Recreativo Bifesa Tartessos cayó derrotado en Sevilla ante al Fundación Cajasol Ciencias B por 27 -15. Los onubenses jugaron un gran partido en el que la evolución de muchos jugadores ya es palpable. Los onubenses suman una victoria y dos derrotas en la presente temporada.
Bajo una tarde algo fría, el club onubense llegaba a la capital hispalense para hacer frente a su primer partido a domicilio en la presente liga de la Primera Andaluza, tras jugar las dos primeras jornadas como local en el estadio Iberoamericano; y lo hacía frente a todo un referente del rugby andaluz, esto es, el Fundación Cajasol Ciencias B, una institución anclada en la élite del rugby estatal cuya cantera posee uno de los mejores registros del panorama.
El encuentro, disputado en La Cartuja, arrancó como era previsible, es decir con un juego muy comedido por ambas partes y con un Recreativo Bifesa muy bien plantado desde los primeros compases, notándose la evolución respecto a anteriores partidos. Los del Pato Martín confiaron en su juego desde los primeros contactos con el oval lo cual permitió al equipo desplegarse sin rubor ante un Cajasol que observaba como el encuentro iba a ser más duro de la cuenta.
El primer movimiento del marcador llegó bien entrada la primera parte del encuentro, cuando en el minuto 18 los hispalenses lograban el primer ensayo del encuentro tras una jugada en la que los locales lograban posar el balón en juego de velocidad con el que se rompieron la línea de defensa tatéssica. A los cinco primeros puntos se sumarían los de otro ensayo pocos minutos después, en esta ocasión en una internada hispalense por la banda con la que los locales conseguían marcar cierta distancia en el marcador.
Sin embargo, al borde del descanso y tras un par de ocasiones erradas que conllevaron gran peligro, los linces lograban despertar su marcador tras una disparo a palos a través de las piernas del pateador Juan Sayago, el cual lograba reducir la distancia y colocar un 10-3 provisional con el que concluía una primera parte donde el buen juego de ambos conjuntos fue la tónica dominante.
En el comienzo de la segunda parte, el Recreativo salió más enchufado que su rival; no obstante a los 7 minutos de la reanudación el Cajasol Ciencias lograba aumentar distancias con un nuevo ensayo que tampoco conseguían transformar. Fue en ese momento cuando el mejor juego del cuadro albiazul salió a relucir, los recreativistas se echaron hacia delante y lograron imponerse en la zona de 22 rival hasta que en el minuto 14 Juan Ortiz lograba dejar el balón en la zona de ensayo hispalense y colocar un 17 -8 en el marcador que daba alas para lograr el empate.
El siguiente cuarto de hora corrió a cargo de la delantera onubense en busca de un nuevo ensayo con el que lograr reducir la desventaja a la mínima y optar a dar la campanada en terreno rival. El juego no llegaba a obtener rentas y su rival, consciente de sus fortalezas no desaprovechó la siguiente ocasión que tuvo tras un despiste de los linces de forma que esta vez con transformación incluida el Cajasol B lograba aumentar su marcador hasta los 20 puntos con un nuevo ensayo.
Los chicos de Patricio Martín no se rindieron y nuevamente bajo una oleada de posesión en su campo y tras un saque de touch, nuevamente Juan Ortiz -uno de los mejores del partido para su equipo- lograba el segundo ensayo para el Recreatrivo Bifesa, a lo que además se hubo que sumar la posterior transformación de Juan Sayago con el que establecer un 20-15 provisional.
El tiempo corría en contra de los linces, si bien las ocasiones se alternaban para ambos conjuntos dejando en el aire un final que acabaría decantándose para los locales los cuales apenas unos minutos antes de la conclusión del encuentro lograban ensayar nuevamente tras perder el Recreativo una melé al señalizar el juez introducción parcial.
El juego concluía de esta forma con un 27-15 para los sevillanos del Fundación Cajasol B, y un mal sabor de boca para el Recreativo Bifesa Tartessos, que mereció mucho más tras jugar un gran partido en la que la falta de acierto y la mala suerte privaron de obtener un resultado más positivo en su visita a la capital hispalense.
