S. D. Fue la crónica de un descenso anunciado. El Sporting Club de Huelva ya ha descendido matemáticamente a la Segunda Federación Femenina, y así afrontará su partido del domingo ante el Cacereño (estadio ‘Antonio Toledo’, 12:00), de la 22ª jornada de la Primera Federación.
Segundo descenso consecutivo para las onubenses que, pese a la mejoría mostrada en la segunda vuelta, no han podido evitar la pérdida de categoría. Porque todo quedó visto para sentencia la semana pasada tras perder la semana pasada en el mismo escenario con el Alavés, y luego darse determinados resultados que imposibilitan ya la salvación del equipo. Punto final.
Ahora en el seno del equipo onubense late el deseo al menos de cerrar su efímera participación en la Primera Andaluza de la manera más digna posible, y para ello quiere ganar el domingo al Cacereño. Quiere dar continuidad a esa mejora insuficiente para salvarse, pero evidente como quedó plasmada en las dos derrotas mínimas sufridas ante los dos equipos que se van a jugar el ascenso directo a la Liga F, a los que plantó cara, Alhama y Alavés. Incluso en este duelo con las vitorianas el equipo de Huelva mereció mucho más, pero se topó con una mala actuación arbitral, cuyas decisiones impidieron ese mejor resultado.
La semana de entrenamientos ha transcurrido con normalidad, aunque marcada por las inclemencias meteorológicas que han afectado a la capital onubense en los últimos días.
Llegará a Huelva un Cacereño que es 5º con 34 puntos, ahora mismo en la zona de promoción de ascenso, con tres de renta sobre el Barcelona B y el Osasuna, éste su más directo rival, ya que el filial azulgrana no puede ascender.
Las extremeñas acumulan ya tres partidos sin perder, con dos empates y el triunfo in extremis de la semana anterior en casa ante el Real Madrid B.
