José Manuel Alfaro/ Sección de ficción ‘El Cuaderno de Muleman’.Este Viernes Santo han empezado los trámites para la constitución del primer sindicato internacional de nazarenos, costarles y penitentes del mundo, bajo las siglas SINCYP, con el objetivo de regular una tradición milenaria y una de las señas de identidad de una de las Semana Santa más importantes de la provincia. Aunque aún queda un largo recorrido para formalizar este sindicato, este hecho podría definir el destino de muchos de los nazarenos, costaleros y penitentes que hacen única una de las fiestas de interés turístico internacional más importante de la provincia.
Aunque aún está por determinar el organigrama que se hará cargo a partir de su constitución de los designios de los hombres y mujeres que componen este paisaje único de la primavera de nuestros pueblos y ciudades.
La junta estará formada por un grupo de personas que aúnan experiencia con años de salidas procesionales, así como niños y jóvenes con una refutada proyección en el ámbito cofrade. Una vez designado el equipo de la primera junta de gobierno, esta se propondrá abordar los principales problemas y carencias de un sector, que busca con esta organización, una regularización que permita hacer de la Semana Santa de Ayamonte una de las más modernas del país, gracias a la firma allí, del primer Estatuto de los nazarenos, penitente y costaleros del mundo y en el que vendrá definida la normativa que regulara todo lo que pasa entre el nazareno, el penitente, el costalero y la hermandad. La función principal de este Estatuto será la de proteger al nazareno, al penitente y al costalero, que por naturaleza es la figura que está en desventaja en la ecuación cofrade.
Asimismo, este Estatuto también se ocupará de que se cumplan ciertas obligaciones, y contendrá algunas prohibiciones más demandadas de los últimos años. Este Estatuto también regulará cualquier conflicto que derive de la relación entre el nazareno, el penitente y el costalero y la hermandad, que deberá respetar unos derechos mínimos y dar seguridad jurídica a los menores de dieciséis años que participen en todas las actividades cofrades, así como en los trabajos nocturnos y de madrugada y las horas extraordinarias.
Este Estatuto de los nazarenos, penitentes y costaleros recogerá temas tan importantes como la negociación, la representación y el conflicto colectivo, el descanso y la jornada cofrade, los períodos de prueba y su duración, la retribución, las medidas de higiene, los despidos, pero sobre todo el salto cualitativo de este Estatuto será la determinación de las modalidades de contrato cofrade, tal como nos cuenta en la siguiente entrevista el futuro presidente de este sindicato, que colocará a Ayamonte en la vanguardia de la Semana Santa.
Qué diferencias hay entre nazarenos, penitentes y costaleros
Hay muchas personas que intervienen en la cadena de valor que hace posible la Semana Santa, pero si hay tres que destacan y que son las más numerosas, esas serían los nazarenos, los penitentes y los costaleros. Es cierto que hay otras figuras como los capataces que también son muy importantes, ellos han sido desde tiempo inmemorables las personas que han evitado que los pasos cayeran por escaleras y barrancos. A día de hoy estos podrían pasar a un segundo plano gracias a la tecnología, que podría permitir sustituir a los capataces por asistentes de voz guiados por GPS.
Pero lo que la tecnología no podría sustituir sería a esos nazarenos cofrades que visten el hábito de reglas acompañando a los pasos bien portando cirios, bien alguna de las insignias de la hermandad y que se distinguen por llevar en la mayoría de ocasiones el capirote armado en su interior con un cono de material rígido. O los penitentes, que son también cofrades que visten el hábito de reglas en la estación de penitencia, pero cuya participación en la misma se define por portar una cruz tal como lo hiciera Jesucristo de camino hacia el Calvario y que podemos verlos detrás de los pasos de la cofradía.
Y por último, son también casi insustituibles, los Costaleros, esas personas encargadas de llevar sobre sí o cargar, de una manera específica, las imágenes o pasos que forman parte de los cortejos procesionales durante la Semana Santa
¿Por qué ahora es el momento de hacer un Estatuto?
Los tiempos han cambiado desde que se fundarán las primeras hermandades. Hemos pasado de ser cofrades pasionales a ser cofrades racionales, es decir, cofrades que no se cuestionaban el dolor, a cofrades que buscan un sentido más espiritual en este ejercicio de sacrificio y fe que representa la Semana Santa. Y ese es quizás ese punto de inflexión que ha generado el nacimiento de este movimiento revolucionario. Lo importante ya no es solo la penitencia, el calvario, la autoflagelación del alma, el dolor interior, las heridas, la sangre, lo importante es ahora el confort y vivir el momento más cerca de un estado místico que del doloroso. Y de esa raíz nace este Estatuto, para hacer más humana y divida que irracional la nueva Semana Santa, que hará posible la implantación del primer Estatuto del nazareno, penitentes y costaleros de Ayamonte.
¿Qué pasará con el Kilometraje de los nazarenos, penitentes y costaleros?
Este Estatuto, por poner un ejemplo, va a traer mejoras muy significativas, sobre todo en momentos en los que nos encontramos, en los que los precios de los combustibles no dejan de escalar, porque eso sí que es un verdadero calvario. Así que en el momento el que se apruebe el Estatuto, el nazareno, penitente o costalero que tenga que desplazarse por necesidad del servicio desde fuera de la localidad, tendrá derecho a percibir dietas, salvo que dicho desplazamiento no tenga perjuicios económicos para el cofrade. En el caso de que no se desplace en vehículo de la Hermandad, tendrá derecho a que se le abone el importe del billete en medio de transporte idóneo o si el desplazamiento se realizase en un vehículo particular del cofrade, se abonará al menos a 0,29 euros el kilómetro.
Es consciente que de que este tema generará polémica
No hay nada en la vida que no genere polémica y este asunto tampoco se iba a quedar ajeno a ello. Los seres humanos somos en esencia un 99% de polémica y un 1% de una mezcla de razón pasional a camino entre la empatía y la adicción en Semana Santa a las torrijas. Pero progresar, implica generar debate, sacudir el conformismo, romper reglas milenarias sin sentido, cuestionar la realidad de la tradición. Y por este motivo, si queremos hacer una Semana Santa de calidad, en la que no veamos niños tirados por los suelos víctimas del agotamiento, costaleros con vértebras fisuradas, penitentes con lumbalgias crónicas, solo hay un camino, el del Estatuto. Por eso más temprano que tarde se aprobará y cuando esto suceda, nos daremos cuenta de que todavía hay más margen para hacer de la Semana Santa de Ayamonte, la mejor Semana Santa del mundo.
