Redacción. La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible ha declarado hoy un foco de gripe aviar en una explotación de broilers localizada en el municipio de Villarrasa, en la provincia de Huelva, tras confirmar el Laboratorio Central de Veterinaria de Algete la detección del virus de Influenza Aviar de Alta Patogenicidad (IAAP) en esta explotación.
El municipio onubense ya había sido incluido, por parte de las autoridades veterinarias de Andalucía, dentro de zona de especial vigilancia por influenza aviar, zona en la que debido a la situación epidemiológica de la enfermedad en Europa ya se estaban adoptando medidas adicionales para prevenir posibles brotes de la enfermedad en aves domésticas.
Se trata de una explotación de broilers, distribuida en dos naves, con un censo de 41.000 pollos de seis semanas de edad. La sospecha de la enfermedad vino derivada por la detección de un incremento anormal de mortalidad en una de las dos naves y que comenzó el pasado 28 de enero. Las muestras tomadas por parte de los profesionales de los Servicios Veterinarios se remitieron al Laboratorio Central de Veterinaria de Algete, como Laboratorio Nacional de Referencia de la Influenza aviar en España, que ha confirmado que se trata de una cepa de IAAP subtipo H5N1. Durante todo este proceso, la Consejería ha estado en comunicación permanente con el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
En cuanto al posible origen del foco se mantiene bajo estudio, si bien se considera a las aves silvestres como fuente más probable.
Los Servicios Veterinarios de la Junta de Andalucía han adoptado, de forma inmediata, una batería de medidas de control en coordinación con el sector. Entre ellas, la inmovilización inmediata de la explotación afectada desde el momento de la sospecha del foco y la realización de una encuesta epidemiológica con objeto de conocer el posible origen y las explotaciones en riesgo por movimientos de personas y vehículos.
Además, se está sacrificando a todo el censo de la explotación afectada y la destrucción, en una planta de tratamiento autorizada, de los cadáveres, pienso y otros materias que puedan facilitar la propagación del virus.
Asimismo, se ha establecido una zona de restricción que comprende dos áreas: una de protección de un radio de 3 km desde el lugar del foco y una de vigilancia con un radio de 10 kilómetros desde el lugar del foco.
Coordinación
La Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Desarrollo Sostenible, en coordinación con la Consejería de Salud y Familias, ha tomado todas estas medidas para controlar el brote, al tiempo que cuenta con la máxima cooperación del sector, que ha sido informado desde el primer momento de esta situación.
Si bien hasta el momento no hay constancia de que el subtipo H5N1 que durante los últimos meses está afectando a Europa tenga capacidad zoonótica significativa, es decir, su capacidad de transmitirse a las personas resulta muy reducida, se recomienda minimizar el contacto innecesario con las aves que muestren síntomas clínicos o se hallen muertos en el campo. En cualquier caso, este virus no puede ser transmitido al hombre a través de carne de ave cocinada, huevos o productos procesados derivados de ellos.
Por otro lado, se mantienen activas todas las medidas preventivas para evitar la aparición de nuevos casos en las explotaciones de la Comunidad autónoma. Entre ellas, una vigilancia continua que engloba muestreos y evaluación de medidas de bioseguridad.
Se trata del segundo foco de IAAP H5N1 en aves de corral en España, tras la detección de un foco en una explotación de engorde de pavos en la provincia de Segovia el pasado 18 de enero y tras la detección de 8 casos previos en aves silvestres en 2022 en las provincias de Lleida, Girona, Ávila y Palencia.