Redacción. El Comité Ejecutivo del Consejo Empresarial de Turismo de la FOE ha celebrado una reunión donde se ha puesto de relieve la necesidad que tiene el sector de ayudas «directas y reales» que los saquen del precipicio en el que actualmente se encuentra, desde que se declarara el Estado de Alarma, hace ahora un año.
Entienden los empresarios turísticos que las medidas anunciadas por el gobierno andaluz son «raquíticas» y, por tanto, insuficientes para amortiguar los daños económicos que la pandemia está ocasionado a los establecimientos turísticos. Así, por ejemplo, se recuerda que en se abrió una ayuda directa al alquiler, dirigidas a autónomos por valor de 1200 euros (DL 24/2020 22/09), con una serie de condiciones difícil de conseguir quedando fuera gran parte de los autónomos y todas las sociedades.
Posteriormente, se anunciaban 667 millones de euros de ayudas a los sectores afectados, la mitad de ese importe estaba destinado a avales difíciles de conseguir por la propia situación de las empresas debido a la pandemia y la otra mitad se dividen en 8 líneas de «ayudas directas» para todos los sectores afectados, de las cuales solo se ha ejecutado la línea nº2 dotado de 80 millones de euros, exclusivamente para autónomos no societarios y que no estén en cese de actividad, por la ridícula cantidad de 1000 euros, quedando la mayoría de autónomos y todas las empresas fuera.
Fue en el pasado mes de enero, cuando se anuncia (BOJA Nº5 12/01/20) otra ayuda -a día de hoy sin convocarse- por valor de 44 millones de euros, en la que se incluyen a las sociedades.
A fecha de hoy la inmensa mayoría de autónomos y empresas en Andalucía han recibido «0 euros» de ayudas por parte de la Junta de Andalucía. Mientras esto ocurre en nuestra región, en el resto de comunidades autónomas, desde abril de 2020, ya se estaban ofreciendo ayudas directas a las empresas para sostener sus gastos de mantenimiento.
Según el Consejo de Turismo de la FOE, esta situación está generando el cierre de miles de empresas en Andalucía, lo que conlleva al aumento del paro y pérdida de competitividad en el sector turístico que es el que más aporta al PIB de la región, a la vez que se la propia Junta proclama tener superávit, cosa totalmente incomprensible.
Desde el Consejo de Turismo de la FOE se insiste en la necesidad de mantener el tejido empresarial, es el momento de ayudar a las empresas, para así poder mantener el empleo. De nada sirve tener superávit, cuando después se tendrá que invertir en cubrir el déficit que va a dejar la falta de producción de miles de empresas en la Comunidad.
