Redacción. El Ayuntamiento de Huelva está desarrollando una campaña preventiva anti-roedores consistente en la instalación de barreras físicas sobre las palmeras de la ciudad. En este sentido, se ha procedido ya a la instalación de 75 collares sobre los troncos o estípites de las palmeras, de modo que se evite el acceso de los roedores a este tipo de arbolado, en el que sus frutos, los dátiles, suponen una fuente de alimentación.
Como ha destacado la concejala de Hábitat Urbano e Infraestructuras, Esther Cumbrera, “es la primera vez que se instala en Huelva este novedoso sistema, unas anillas que ya pueden verse en grandes ciudades como Madrid o Barcelona y que se caracterizan por cumplir criterios tanto de seguridad, al ser de materiales compatibles con el desarrollo de las especies vegetales, como estéticos, gracias a la elección de colores discretos, que armonizan con la especie vegetal a proteger”.
De esta forma, esta actuación municipal, enmarcada dentro del programa de control de plagas urbanas, permitirá continuar durante este primer trimestre del año con la labor planificada de vigilancia, prevención y tratamiento en parques y zonas ajardinadas de la capital, al constituir estos espacios al aire libre uno de los sectores de mayor complejidad en cuanto a la intervención en plagas urbanas.
En este sentido, en las zonas verdes de los distintos barrios de la ciudad se conjugan una serie de factores, como la presencia de alimentos, procedentes tanto de los frutos de determinadas especies vegetales como de restos y residuos que los usuarios de los parques y jardines dejan depositados en el suelo, que propician el desarrollo de roedores comensales. Por ello, para el Consistorio resulta fundamental poner en marcha una efectiva actuación municipal como ésta, que consiga evitar el anidamiento que se da principalmente en las palmeras.
Además, cabe señalar que este sistema destaca por garantizar el respeto medioambiental y por contribuir a preservar la salud de este tipo de árboles, al estar realizado con velcro industrial que gracias a su espesor evita que se hagan perforaciones en el tronco, lo que podría representar un peligro para las palmeras. Ventajas a las que hay que sumar que la instalación de estas anillas de vinilo supone una importante reducción de costes económicos, en comparación con otros materiales como las chapas pintadas. Así, el vinilo requiere escaso mantenimiento y su durabilidad está garantizada hasta los ochos años, mientras que, debido a factores como la lluvia, el viento o el sol las chapas hay que pintarlas cada dos años.
Por otra parte, otros espacios de la ciudad como son los huertos urbanos y las zonas de refugio que se dan en las propias estructuras de las zonas verdes, como rocallas y parterres, también pueden provocar el anidamiento de roedores, por lo que también resulta necesario actuar en los mismos de forma preventiva y planificada. Por todo ello, debido a la concurrencia de usuarios y animales domésticos que suelen darse en estas zonas de esparcimiento de Huelva, el Ayuntamiento desarrolla las actuaciones de control de roedores con altos niveles de seguridad, evitando en la medida de lo posible el uso de biocidas en este tipo de instalaciones.