Redacción. El día 27 de noviembre el Centro del Profesorado de Huelva Isla Cristina organizó una actividad formativa cuyo título fue «PREVENIR ES VIVIR, FÓRMATE CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO», aprovechando la cercanía del 25 de Noviembre, Día Internacional contra la violencia hacia las mujeres, día para denunciar la violencia que se ejerce sobre las mujeres y reivindicar medidas en todos los ámbitos.
El encuentro, financiado con fondos provenientes del Pacto de Estado contra la violencia de género, ha contado con la participación de más de 100 docentes y una treintena de familias. Su acogida se ha visto favorecida.
Dicho Pacto nace de la necesidad de aumentar la protección de las mujeres víctimas de la violencia de género y sus hijas e hijos y establece la necesidad de legislar para ser más eficaces en la lucha por la eliminación de la violencia de género.
El trabajo a realizar para conseguir la erradicación de la violencia contra las mujeres implica a multitud de agentes, tanto públicos como privados y requiere de actuaciones desde muy distintos ámbitos profesionales que reclaman coordinación para asegurar la transversalidad e integralidad en la respuesta.
En este cometido, destaca el papel clave e indispensable que desempeñan los centros educativos, por ser contextos privilegiados para fomentar valores igualitarios, libres de prejuicios y de estereotipos sexistas, y proporcionar modelos de relación desde la igualdad, el respeto y el rechazo a cualquier tipo de violencia.
La prevención es básica, y es obvio que para la prevención es primordial la formación. De esta forma podemos enriquecernos tanto profesional, como personalmente.
Por esta razón, con la prevención como principal objetivo, nace la actividad formativa «PREVENIR ES VIVIR, FÓRMATE CONTRA LA VIOLENCIA DE GÉNERO» en la que ponentes de prestigio aportaron su punto de vista desde muy diferentes perfiles profesionales.
Ana Belén López Blasco, jurista fiscal de violencia de género, aportó la visión de la justicia en el asunto del maltrato, tipificando los múltiples delitos que se producen y citando los celos y la coacción como los mimbres con los que se construye la violencia hacia la mujer.
Laura Viñuela Suárez, musicóloga y consultora de género, hizo reflexionar sobre el reggaeton, sin demonizarlo, ampliando su análisis más allá de las letras de las canciones, focalizando la atención en qué representaciones de género y de relaciones propone esta música y cómo llega a la gente. A partir de estas reflexiones plantea como finalidad educativa la de buscar y crear alternativas como espacios seguros para el aprendizaje.
La formación del profesorado ha servido en este caso como vehículo para unir fuerzas, compartir expectativas y trazar planes compartidos que permitan que los alumnos y alumnas de hoy, ciudadanas y ciudadanas del mañana, consideren a hombres y mujeres en un plano de igualdad.
Las personas participantes han terminado la jornada haciendo una valoración muy positiva del evento, saliendo reforzadas en sus convicciones sobre la necesidad de empoderar a la mujer y muy especialmente prevenir la violencia hacia las mujeres desde la coeducación y el feminismo en las aulas.