
Cristina Morales. En otras ocasiones hemos publicado diferentes noticias sobre uno de los guitarristas onubenses más reconocidos. José Luis Rodríguez de la Torre, más conocido por su nombre artístico José Luis de la Paz, lleva toda su vida viajando por el mundo y liderando proyectos con su música por bandera. Sin embargo, hay otra faceta de él digna de resaltar, el hecho de que también es un ‘Onubense por el mundo’. Y es que lleva más de 8 años viviendo en Miami, Florida (USA), donde ha podido continuar con su carrera en el mundo de la música y acceder a proyectos que desde España sería casi imposible.
Nacido en Ceuta hace 53 años, aunque llegó a Huelva con apenas 3, este guitarrista, compositor y productor, vive por y para la música y el flamenco. Antes de emigrar, había sido guitarrista en la Peña de Huelva, la Peña Femenina, y también en la Coral Santa María de la Rábida. Siguiendo la tradición oral del flamenco, tuvo como maestros a A. Ramblado y Manolo Sierra, además de Antonio Sousa y, posteriormente, fue discípulo del gran Mario Escudero, quien lo tomó como alumno predilecto. Su esfuerzo y tesón hacen que en 1995 aparezca en el libro ‘Agenda Flamenca’ de Félix Grande, entre los mejores guitarristas flamencos del momento. Este reconocimiento se sumaría a otros galardones a nivel nacional como el Premio de Jóvenes Intérpretes (1985), Premio de la Asociación de la Prensa (1988), Finalista del Giraldillo de la Bienal de Sevilla (1990) o el Premio Nacional de Hospitalet (1989).

Destacan sus trabajos como compositor para el Ballet Cristina Hoyos, Ballet Flamenco de Andalucía, Belén Maya, Juan Carlos Lérida o Ramón Oller. Además ha colaborado con artistas de la talla de Gustavo Dudamel, Antonio Canales, Farruquito o la cantaora argentina Siudy Garrido Cia. En 2017 fue nominado a los premios US Artists, de la Fundación Rockefeller de Nueva York. A principios de 2018 estrena un concierto dedicado a la poesía mística española, que luego además sería un disco comisionado por el Centro Cultural de Miami y Miami Dade Cultural Affairs, y creado para la exposición del artista cubano Raimundo Travieso, llamado ‘Toda Ciencia Transcendiendo’. Además, ese año colaboraría en el disco ‘Evening of the East Star’ del compositor Colin Farish.
Recientemente, José Luis de la Paz, ha compuesto la música de la película ‘Finding Compás’ de Kathy Douglas, prepara un nuevo trabajo en concierto llamado ‘Ensemble’ y acaba de producir el disco ‘Tapiz’ para la cantante Susana Behar. Sin duda, un polifacético artista que decidió cruzar el charco para buscar en Miami las oportunidades que en España no le llegaban. Hablamos con el onubense de corazón, que también añora su amada Huelva, para que nos cuente más sobre su periplo como ‘Onubense por el mundo’.

– ¿Por qué decidiste irte fuera?
Tras mucho tiempo trabajando para otros, decidí hacer mi carrera en solitario como guitarrista de concierto. Tuve que enfrentarme a una burocracia y un sistema que no permite auto-producirte. El Flamenco se ha politizado tanto que, sin apoyos de organismos oficiales, prácticamente estas condenado a depender de otros y a no poder desarrollarte individualmente. Y yo quise perseguir mis sueños, por eso estoy aquí desde 2011.
– ¿Cuánto tiempo llevas fuera/has estado fuera de España?
Casi 8 años.
– ¿Es tu primera estancia en el extranjero?
He viajado muchísimo en mi vida, pero es la única vez que ha sido viajar para vivir en otro país.
– ¿Cuál y cómo es tu lugar de residencia?
Vivo en un dúplex, cerca de la Universidad y del aeropuerto. Es una zona tranquila, llena de zonas verdes, que me permite tener tranquilidad y estar bien comunicado al mismo tiempo.

– ¿Cuál era tu nivel de idiomas al llegar?
Muy básico, he aprendido bastante y justo ahora voy a tomar clases especiales para mejorar mi gramática, vocabulario y pronunciación.
– ¿Cuál es tu balance de la experiencia?
Positivo. Este es un país hecho para el individuo, por lo que, si te mueves, las infraestructuras te permiten desarrollarte a todos los niveles.
– ¿Cómo es vivir allí? ¿Es muy diferente a España?
La vida es más acelerada, porque eres responsable de todo y tomas control completo de cada decisión. Mi trabajo ha cambiado en el sentido de que soy mi propia oficina y soy yo quien hace muchas gestiones y quien maneja muchos aspectos de la producción como la edición de vídeo y audio, el diseño gráfico y demás, aparte de seguir componiendo, ensayando y tocando, claro.

– ¿Cómo es la ciudad y alrededores?
La ciudad se extiende, no hay edificios altos, predominan las playas de agua caliente y hay muchos lugares para compras llamados ‘Mall’, mucha zona verde y también abundante tráfico. Es una ciudad con mucha presencia latina en la que casi todo el mundo habla español, pero también es muy cosmopolita y alberga gentes y comidas de todo el mundo. El clima es tropical y suele hacer bastante calor, condiciones que hacen que también tenga una reserva natural impresionante, donde abundan los pantanos o Everglades.
La gente aquí es muy variada. Los latinos suelen ser amables, no hablan casi nada de inglés y son muy trabajadores. Lo que más impresiona aquí es la multiculturalidad y lo variado de la población. Tienen una idea de España un tanto distorsionada y folclórica. El panorama político, además, ayuda a que se vea como un país corrupto y poco productivo. Sin embargo, todos adoran la gastronomía y la gente.
– ¿Te has marcado algún nuevo objetivo o reto a corto/medio/largo plazo?
Siempre tengo retos y objetivos que cumplir. De hecho, aquí he podido estrenar 4 proyectos de concierto, además de una Suite para guitarra y orquesta, tocar el Concierto de Aranjuez, hacer música para una película o producir discos para una cantante sefardí. Ahora quedan otros proyectos por cumplir, además de mejorar mi nivel de inglés, tener hijos y demás proyectos vitales, ya que la vida es una aventura hasta su último día.

– ¿Qué piensa tu familia de la aventura?
Aunque al principio estas cosas son difíciles de entender, mi familia lo ha ido aceptando y asimilando poco a poco, sobre todo porque han sido testigos de mi crecimiento personal y artístico. Mis amigos también me apoyan, aunque algunos piensan que estoy loco o que soy un aventurero marcado por mi orgullo, de todo un poco.
– ¿Qué estás haciendo en estos momentos?
Inmerso en mi carrera artística, suelo colaborar con otros artistas y componer música para distintos proyectos, por lo que siempre estoy ocupado con mi gran pasión, la guitarra.
– ¿Qué vas a hacer al volver a Huelva?
Pasar tiempo con la familia y amigos, esa es la prioridad. Y si tengo ocasión, trataré de ofrecer algún concierto.
– ¿Cuáles son tus planes futuros?
Mi agenda se va llenando poco a poco y ya tengo planificados varios viajes, los primeros a San Francisco para tocar mi obra Sinfónica y a Ohio, para tocar en una Universidad. Luego México, un proyecto para niños y un disco en solitario.

– ¿Qué es lo que más extrañas/has extrañado de Huelva?
La familia, los amigos, la gastronomía y los cambios de estación. Huelva es privilegiada en muchos aspectos y eso nos hace muy vulnerables y nostálgicos, como diría Juan Ramón Jiménez, cuando estamos fuera.
– ¿Recomiendas a todo el mundo que viva un tiempo fuera de España? ¿Por qué?
Sí, porque creo que es bueno conocer otros lugares, ver cómo viven otras gentes, conocer otras culturas. Esto nos hace crecer como seres humanos.
– Para terminar: deja un mensaje a los onubenses.
Que se sientan orgullosos de su tierra, que Huelva tiene muchos valores, a pesar de todas las carencias que también tiene. Que para algunas cosas somos privilegiados, que no se nos olvide. Desde fuera, Huelva, te extraño, pero también te llevo en mi alma y en mi música siempre hay un pedacito de mi tierra y de mi gente.